lunes, 28 de septiembre de 2015

BIZCOCHO DE ZANAHORIA Y ALMENDRA, THERMOMIX Y TRADICIONAL


Aunque se podría considerar un bizcocho, en casa la ponemos como postre. Nos gustan todos los postres que llevan almendra sin excepción y éste, no iba a ser menos.

El hecho de tener thermomix simplifica mucho el trabajo en la cocina, por eso, siempre que puedo servirme de ella para la elaboración de cualquier plato, fundamentalmente los postres, recurro a ella para conseguir optimizar mi tiempo.

Ingredientes

4 huevos
125 gr de almendra molida
200 gr de azúcar
250 gr de zanahorias
60 gr de Maicena
80 gr de harina de repostería
La piel de un limón (sólo la parte amarilla)
1 sobre de levadura royal
Una pizca de sal.

Elaboración tradicional

Precalentamos el horno a 180º, calor arriba y abajo.

Ponemos la harina y la maicena juntas y las tamizamos.

Pelamos las zanahorias y las rallamos con la ayuda de un rallador. Reservamos.

En un bol ponemos los huevos y el azúcar y los batimos con una batidora de varillas unos minutos. Le agregamos las zanahorias ralladas y la ralladura de limón y lo mezclamos.

Incorporamos la harina y la Maicena tamizadas, la pizca de sal, las almendras molidas y el sobre de levadura.

Mezclamos suavemente poco a poco y con movimientos envolventes, con una cuchara o unas varillas.

Untamos el molde con mantequilla . Ponemos la masa en él.

Ponemos en el horno unos 35-40 minutos, hasta que pinchemos con un palito de los de hacer pinchos o con una aguja y salga seco y limpio.

No olvidéis que el horno no se debe abrir hasta pasados 30 minutos.

Sacarlo fuera del horno y esperar a que enfríe para desmoldarlo.

Para que quede más bonito, añadir azúcar glas cuando esté frío, y justo inmediatamente antes de servir.

Elaboración thermomix

Precalentamos el horno a 180º por arriba y por abajo.

Ponemos en el vaso, el azúcar, la piel del limón y programamos 30 segundo velocidad progresiva, 5-7-10.

Añadimos las zanahorias y programamos 20 segundos a velocidad 5.

Incorporamos los huevos y batimos todo durante 5 segundos a velocidad 7.

Incorporamos la harina y la Maicena, mezcladas previamente con la almendra molida, la levadura y la pizca de sal. Mezclamos 6 segundos a velocidad 4. Terminamos de mezclar con una espátula.

Untamos el molde con mantequilla o un antiadherente para bizcochos.

Colocamos la masa en el.

Metemos al horno durante 40/50 minutos por arriba y por abajo.

Antes de sacarla del horno, comprobar el punto de cocción.

Dejarla enfriar sobre una rejilla y espolvorear en el momento de servirla con azúcar glas.

Recordad que, el horno cuando se está haciendo un bizcocho, no debe abrirse en ningún caso durante los primeros 30 minutos.

PALMERITAS PARA EL CAFÉ


Estas palmeras son estupendas para salir del paso y quedar bien. Son sencillas de hacer, lucidas y además muy ligeras. Perfectas para acompañar un café

Ingredientes

1 plancha de hojaldre congelado
1 manzana fileteada
Un puñado de almendras fileteadas o piñones
Un puñado de pasas sultanas, o un coctel de fruta escarchada en trozos pequeños.
Un huevo batido.

Elaboración

Extendemos la plancha de hojaldre, previamente descongelada, sobre la superficie de trabajo ligeramente enharinada. Estiramos un poco, con cuidado de no desfigurar ni romper la plancha.

Repartimos sobre ella, la manzana cortada en trozos muy pequeños, las almendras, las pasas y espolvoreamos ligeramente con azúcar.

Sin perder el tiempo para evitar que la manzana se oxide, vamos enrollando sobre si misma la plancha hacia el centro con cuidado de que las frutas queden repartidas de forma uniforme. Le damos la vuelta y enrollamos el lado inverso, llegando al centro hasta que se junten formando aparentemente dos rollos pegados.

Con la ayuda de un cuchillo bien afilado, vamos cortando láminas de un dedo de grosor, y colocando sobre una bandeja de horno sin importar si cortamos o no, la fruta.

Pintamos con huevo batido y horneamos durante unos 10 minutos a horno precalentado a 200º.

Espero que os gusten.

SEPIA AL AJILLO EN THERMOMIX



Ingredientes

Una sepia de 500 gr. aproximadamente
3 dientes de ajo
Un ramillete de perejil fresco.
3 cucharadas de aceite
Una pizca de sal

Preparación

Ponemos en el vaso los ajos y el perejil, trituramos 5 segundos al 5. Bajamos los restos de las paredes con ayuda de una espátula. Añadimos el aceite y sofreímos 5 minutos, temperatura Varoma, velocidad 1.

Añadimos la sepia troceada y un poco de sal, sofreímos 20 minutos, temperatura Varoma, giro a la izquierda, velocidad cuchara.

Como era para la cena, y sólo éramos dos personas, tuvimos suficiente con medio kg. Si necesitáis hacer más cantidad, tendréis que ajustar las proporciones y comprobar el punto de cocción. Incluso podéis parar la máquina, y a la mitad del proceso, remover la sepia con la ayuda de una espátula para que quede hecha por igual.

De todas formas, observar si a la terminación os gusta más o menos hecha, pero para mi gusto, sale perfecta.

Al momento de servirla, podéis acompañarla de una mayonesa, pero no necesariamente.

VICHYSSOISE O CREMA DE PUERROS A MI AIRE, EN THERMOMIX


La Vichyssoise es una crema de la cocina francesa que está hecha a base de puerro, cebolla, patata y nata. En casa solemos tomarla fría y es un plato muy agradable para el verano, aunque también se puede tomar caliente en invierno.

Ésta receta, como la mayor parte de las que irán apareciendo en el blog, son recetas familiares y, como he dicho en otras ocasiones, en casa se cocina para los de casa, y todos queremos y necesitamos cuidarnos; por eso está adaptada a nuestras necesidades alimenticias, con muy poca grasa y pocas calorías.

Ingredientes

2 cebollas
4 o cinco puerros (sólo la parte blanca)
3 o 4 patatas de tamaño mediano
3 cucharadas de aceite
1/2 litro de caldo de ave, o en su defecto, un par de cubitos de caldo Maggi.
1 bote pequeño de leche evaporada o nata
leche descremada

Elaboración

Ponemos la cebolla y los puerros troceados en la thermomix con el aceite. Le damos dos golpes de turbo, y programamos: 5 minutos, temperatura Varoma, velocidad 1 para pocharlos

Una vez que se han pochado, troceamos las patatas, salamos y cubrimos con el caldo. Programamos 20 minutos, temperatura Varoma, velocidad 1. Una vez que termine el tiempo, trituramos en velocidad progresiva 5-7-9, durante unos segundos, y comprobamos si nos gusta cómo ha quedado la crema de fina, (tiene que tener una textura muy suave, pero espesa), Dejamos enfriar en el frigorífico hasta que esté bien fresquita.

Poco antes de llevarla a la mesa, le añadiremos la leche evaporada, y la leche descremada. Podemos ayudarnos de una batidora de mano para conseguir que esté bien emulsionada la crema con las dos leches. La leche evaporada podemos añadírsela toda desde un principio. En cambio, la leche descremada, es mejor ir añadiéndola poco a poco para conseguir que quede cremosa pero ligera. Si pusiéramos demasiada, dejaría de ser crema!

Elaboración en thermomix

Muchos de los platos, habituales en casa, he ido progresivamente incorporándolos al modo de hacer en thermomix. Primero porque los tiempos de cocinado se acortan considerablemente, y segundo porque la thermomix tiene la gran ventaja de que en cuestión de cremas, a las que somos tan aficionados en la familia, les da una textura mucho más fina y consigue una terminación excelente.

Vaya por delante, que muchas recetas no vienen a este blog procedentes de los libros de thermomix, origen de casi todas las recetas que pululan por la red, sino que como muchas otras personas que cocinan, yo la hago al modo y manera en que acostumbro y, por lo tanto, no varío en absoluto ingredientes. Sólo adapto, tiempos.

Procedamos.

Cortamos la cebolla en cuartos y el puerro en pedazos no demasiado pequeños. Damos unos golpes de turbo, y conseguimos que tanto la cebolla como el puerro queden lo suficientemente troceados. A mi, me gusta hacerlo así, porque aunque la thermomix marca hacerlo siempre en Velocidad 4 o 5 para el troceado, luego a la hora de hacer el sofrito quedan menos pochados.

Agregamos el aceite y sofreímos 5 minutos, temperatura Varoma y velocidad 1.

Finalizado este paso, agregamos la patata escachada y cubrimos con agua.

Ponemos la sal y el cubito de caldo y dejamos que se haga por espacio de 20 minutos a velocidad 1 y temperatura varoma.

Trituramos en velocidad progresiva, hasta conseguir una crema fina. Si viéramos que queda demasiado espesa, agregamos agua, pero siempre hay que tener en cuenta que con posterioridad añadiremos la leche, que también la va a aligerar.

Para nosotros es un plato de verano, así que vuelco el contenido de la thermomix en un recipiente y dejo que se enfríe para ponerlo en la nevera.

Cuando vayamos a sacarlo de la nevera, veremos que está más espesa de lo que nos pareció al terminarla, por eso, y para si hubiera que agregar mucha cantidad de leche  y no agregarle más calorías, utilizo siempre leche descremada, a veces incluso reduzco la cantidad de leche evaporada.

A nosotros, nos encanta.

CALLOS AL ESTILO DE MI MADRE


Siempre que repito una receta de mi madre digo lo mismo. Era una cocina sencilla, con ingredientes que habitualmente había cerca  y mínima cantidad de condimentos. Era sin embargo una cocina sabrosa y que gustaba a todos aquellos que nos visitaban. Nadie ha conseguido, por ejemplo, igualar sus croquetas de bacalao o sus empanadillas.Hacemos lo posible por igualarla, pero no logramos conseguir el punto que ella les daba. Los callos eran uno de los platos que sigo haciendo como ella, porque su sencillez los hace merecedores de competir con los que he probado de cualquier otro cocinero, y por tanto, son los únicos que hago.

Es un plato que una vez cocinado, admite congelación con muy buen resultado. Por eso suelo hacer una cantidad importante, guardarlo en porciones y luego ir comiendo de forma espaciada para no tener que cocinar todos los días.

Ingredientes

2 kg de callos
1 morro de ternera
1 pata de ternera
3 o 4 ajos
1 ramillete de perejil
2 hojas de laurel
un poco de harina
Pimentón

Elaboración

Aunque ahora mismo, los callos suelen venir muy limpios, es conveniente darles un repaso en profundidad, para retirar la grasa que no necesitamos o simplemente confirmar que están tan limpios como nos gustan.

Podemos pedir al dueño de la casquería que nos los trocee, -sobre todo la pata-, pero yo os digo que a excepción de la pata, suelo hacerlo en casa a mi gusto. De esa forma me aseguro que queden del tamaño adecuado.

Una vez troceados, ponemos los callos en la olla exprés y los cubrimos con agua y un chorrito de vinagre -para evitar que den olores durante la cocción-, y un poco de sal, muy poco (los salaremos al momento de guisarlos, mejor). No se puede precisar el tiempo que tienen que estar en la olla, pero no menos de 40 minutos. A partir de ahí, lo ideal es comprobar como va la cocción y añadirles tiempo si lo necesitan. Es más, a menudo tendremos que sacar la pata o el morro, y a veces los dos, porque en general, cuecen antes, y dejar un rato más los callos.

Aseguraros de que quedan con el punto correcto, porque unos callos mal cocidos pierden todo su valor, pero que no se pasen del punto justo porque se desharían y quedaría un plato inservible.

Ponemos a escurrir los callos, reservando un poco del caldo de cocción para la salsa, porque tiene gran parte de la gelatina que será lo que le da a la salsa la textura agradable.

Preparamos un majado con el ajo, el perejil y un poco de sal.

Cubrimos una olla del tamaño adecuado con aceite - mas bien escasa-, y cuando esté caliente, ponemos una cucharada generosa de pimentón -yo no lo pongo picante -, y media cucharadita de harina, procurando que no se queme porque amargará. Rehogamos allí brevemente los callos, e inmediatamente agregamos el caldo de la cocción con el majado y la hoja de laurel. Si hemos dejado poco caldo, podemos añadir agua.

Dejamos cocer entre 10/15 minutos y comprobamos el punto de sal. Rectificamos si es necesario y cuando la salsa haya conseguido integrar todos los sabores y el punto de espesor adecuado, retiramos y sin más, llevamos a la mesa.

¡ Buen provecho!

BRIOCHE EN PANIFICADORA

Es con mucho, la mejor receta de brioche de todas las que he hecho, he incluso las que he probado de los comercializados, casi siempre envueltos en una cantidad excesiva de melazas y azúcares varios. Si alguien quiere hacerlo y no tiene la misma panificadora tendrá que adaptarlo a la suya, salvo ese detalle, el brioche es fácil de hacer y ofrece un resultado óptimo.

Ingredientes
500 g. de harina de fuerza
150 g. de mantequilla blanda
100 g. de azúcar molido (se muele muy bien en el molinillo del café)
una pizca de sal
25 g. de levadura fresca
4 huevos, (uno de ellos es para pintar el bollo)
1/2 vaso de leche templada

Preparación

Os anticipo que sale un gran brioche, sube mucho y se hace grandísimo. Es más, si no sois muchos de familia, o no lo vais a compartir aunque dura fresco dos o tres días, podéis pensar en hacer uno más pequeño con la mitad de los ingredientes.

Cocinar es agradable para mi pero procuro, en lo posible, ayudarme de todos los medios a mi alcance en esa tarea, así que lo he hecho con la panificadora que me regaló mi hijo hace ya algún tiempo, es mucho más cómodo y más rápido.

Lo primero ponemos los huevos batidos (recordad que hay que dejar uno para pintar el bollo), el azúcar molido, la leche templada en la cubeta. Y encima, que la cubra en su totalidad, la harina con la levadura desmigada por encima, por último la mantequilla. Ahora le damos a la tecla del programa amasado y levado, en la Philips el 9.

Así se consigue que quede todo más integrado. Ya dejamos que termine el programa de amasado con su ciclo de levado. Dura en finalizar, aproximadamente unos 90 minutos. Estad pendientes porque la levadura sigue funcionando y sino la sacáis nada más terminar el programa, se os desbordará la cubeta.

Observar lo que ha crecido. Aún crecerá dos veces más, una cuando está en el molde y un poco más horneando.

Al acabar el ciclo sacamos la masa a la encimera que habremos enharinado ligeramente, y amasamos suavemente para sacar el aire.

Ahora cogemos un molde alto y lo engrasamos un poquito con mantequilla. Yo he utilizado un molde de bizcocho. Cogemos porciones no muy grandes de masa y estiramos con el rodillo y luego enrollamos poniéndolos de pie en el molde, hasta ir completándolo, procurando que no queden pegados porque va a crecer mucho.

Ponemos el horno a 40º y cuando haya cogido la temperatura, ponemos a fermentar dentro una media hora. Al cabo de ese tiempo habrá doblado su volumen.

Finalizado el tiempo lo sacamos y subimos la temperatura del horno a 180º solo calor abajo o solo aire para los hornos que tengan esta opción, y pintamos el bollo con el huevo batido que nos habíamos guardado al principio.

Metemos el bollo al horno en la rejilla del medio. Yo he necesitado cuarenta minutos hasta que lo he pinchado y salía limpio. A media cocción lo he tapado con una hoja de papel de aluminio porque se tostaba demasiado por arriba.

Desmoldar cuando esté templado. Si os gusta la bollería, veréis que aroma...y qué sabor!!

BERENJENAS REBOZADAS


Seguimos aprovechando los recursos que nos brinda el huerto y buscando las distintas formas de comer rico y variado: hoy tocan berenjenas rebozadas de primer plato. Todos los días recuerdo a mi madre, pero éste plato a ella le gustaba de una forma especial.

Ingredientes

1 Berenjena (era hermosa, pesó 750 gr)
2 huevos
Harina para rebozar
Aceite de oliva

Elaboración

Un par de horas antes de hacer la berenjena, la cortamos en rodajas finas y la salamos, para que vaya eliminando el jugo que le da el amargor.

Pasado el tiempo, ponemos el aceite a calentar, batimos los dos huevos y vamos pasando las rodajas de berenjena escurridas, primero por harina y después por huevo. La freímos en aceite bien caliente y le damos la vuelta para que se haga por los dos lados.

Vamos colocando en una bandeja con papel absorbente para eliminar el exceso de grasa. Una vez escurrida, colocamos en la fuente de servir y llevamos a la mesa.

Yo la pongo como primer plato, como podría poner una coliflor rebozada, pero sirve también como acompañamiento para un segundo plato. Ya se sabe que cada cual, tiene una medida sobre cómo, cuánto y de qué forma quiere comer. De cualquier forma, están muy buenas.

Más sencillo, imposible.

CREMA DE CALABACIN EN THERMOMIX


Durante todo el verano, tenemos en el huerto toda clase de verduras. La consumimos recién cortadas, y la crema de calabacín es una de las formas más habituales. Siempre tengo muy en cuenta que el menú sea saludable, con la menor cantidad de grasa posible, y de fácil digestión, ésta es una de las recetas más light que vais a encontrar en el blog.

Ingredientes

1 cebolla pequeña
Calabacín (no os puedo poner el peso; yo lo limpio, lo troceo y utilizo hasta que completo el vaso de la Thermomix, si sobra, para el día siguiente)
1 par de patatas medianas
3 cuchadas de aceite
Sal

Para acompañar (opcional)

Cebolla crujiente frita, huevo cocido o unos trozos de pan frito

Elaboración

Ponemos la cebolla en trozos en la thermomix, con las 3 cucharadas de aceite, damos un golpe de Turbo y programamos 5 minutos, Temperatura Varoma y Velocidad 1, para sofreírla.

Pasado el tiempo, añadimos la patata troceada pequeña y el calabacín (yo lo pongo sin piel, pero hay gente a la que le gusta con la piel), la sal y 400 ml. de agua. Programamos la thermomix, 30 minutos, temperatura Varoma y velocidad 1.

Una vez que haya pasado el tiempo, comprobamos el punto de sal, rectificamos si es necesario y trituramos a velocidad progresiva 5-7-9.

Se puede tomar calentita o fresca. Durante el invierno -porque yo congelo mucha verdura-, la sirvo caliente y en verano, siempre fría. Hay personas que enriquecen ésta crema con quesitos en porciones, y está rica, pero en nuestra casa evitamos en lo posible añadir grasa.

TARTA DE ALMENDRAS, O TARTA DE SANTIAGO EN THERMOMIX


Esta es una de las tartas que mas gustan en la familia, es sana, rápida para hacerla y no es pesada. Es incluso, fácil de llevar cuando vas invitado y quieres poner tu granito de arena para enriquecer el menú. 

Ingredientes:

250 gr de almendras crudas o harina de almendras (yo, harina)
250 gr de azúcar blanquilla
4 huevos
La piel de 1 limón, sólo la parte amarilla - la blanca, amarga-.
Azúcar glas para decorar

Elaboración

Precalentamos el horno a 180ºC con calor arriba y abajo.

Ponemos en el vaso bien seco, el azúcar y lo rallamos durante 30 segundos en velocidad progresiva 5-10 para hacerlo glas. Retiramos un poco más de medio cubilete que usaremos para decorar y el resto lo dejamos en el vaso.

Añadimos la piel de limón y mezclamos 10 segundos, velocidad 10.

Incorporamos los huevos y mezclamos 10 segundos en velocidad 4.

Agregamos las almendras, si las echamos enteras trituramos todo 10 segundos en velocidad 8, si lo que usamos es harina de almendras solo tendremos que mezclar 5 segundos en velocidad 3.

Vertemos la mezcla en un molde de unos 24cm de diámetro previamente engrasado con mantequilla y horneamos durante 25-30 minutos a 180ºC.

Dejamos enfriar sobre una rejilla. Cuando ya esté fría, la desmoldamos y decoramos con el azúcar glas.

PATATAS A LA IMPORTANCIA

Este es uno de los platos más sencillos y más ricos de la cocina tradicional. Quien lo prueba, repite

Ingredientes para 4 personas

900 g de patatas peladas
2 Huevos para rebozar
150 g de harina de trigo

Para la salsa
1 Cebolla
2 Dientes de ajo
1 Cucharada de perejil picado
Unos taquitos de jamón
5 Hebras de azafrán
1500 ml de caldo de ave, de cocido, o en su defecto, agua con un par de cubitos (yo le pongo Maggi)
80 de vino blanco
Sal al gusto

Aceite de oliva para freír

Elaboración

Personalmente, siempre trato de tener todos los ingredientes del plato dispuestos para que me sea más fácil la elaboración, me sirve de gran ayuda y me ayuda a simplificar el guiso. Os indico como me organizo:
Pelamos y cortamos las patatas en rodajas de medio centímetro de grosor aproximadamente, los más iguales posible para que se hagan lo mismo, lo ideal es hacerlo con la mandolina, eso si, con precaución porque en un descuido nos podemos cortar.
Pelamos y troceamos la cebolla en brunoise.
Pelamos los ajos y los cortamos en trozos pequeños.
Echamos la harina en un plato hondo.
Cascamos los huevos en un plato y los batimos bien.
Aparte, cocemos un huevo que utilizaremos para dar color al plato.

Vamos al asunto concreto

Ponemos una sartén a fuego medio y echamos abundante aceite para freír.
Pasamos las rodajas de patata por la harina, sacudiendo la harina sobrante.
Vamos pasándolas por el huevo batido, que queden bien rebozadas, y cuando el aceite esté caliente las vamos poniendo a freír.
No ponemos muchas a la vez para evitar que se enfríe el aceite, y las freímos durante unos dos minutos por cada lado.
Cuando estén hechas, las vamos sacando y poniendo en una bandeja sobre papel absorbente. 

Las reservamos, mientras preparamos la salsa
Ponemos una cazuela a fuego medio y echamos un par de cucharadas de aceite.

Cuando esté caliente echamos la cebolla, y un poco de sal y la dejamos hasta que poche. Hay personas a las que les gusta que la cebolla se dore, pero si es así, hay que tener cuidado que no se tueste porque luego amargará la salsa.
Cuando hayamos terminado de freír la cebolla, sofreímos un poco los tacos de jamón, y una cucharadita de harina, - con cuidado de que no se queme – y a continuación, ponemos el vino blanco, lo removemos bien y lo dejas reducir unos 3 minutos.
Ponemos el caldo sobre las patatas y las salamos al gusto, con cuidado, porque el jamón, le da su puntito salado.

Mientras empieza a hervir preparamos el majado. 
En un mortero echamos los ajos, el perejil, un poco de sal y las hebras de azafrán y los machacamos bien
A veces, además del azafrán, les pongo un poco de colorante alimentario del que utilizo para la paella, para darle color al caldo y lo pongo sobre las patatas cuando el caldo empieza a hervir removiéndolo bien. 

Añadimos las rodajas de patata que habíamos reservado, de forma que todas queden bien cubiertas por el caldo. Las dejamos que se cocinen durante 25 minutos a fuego medio. No conviene moverlas para evitar que se deshagan, si necesitamos hacerlo, nos limitaremos a mover la cazuela.

Pasado este tiempo comprobamos que están listas pinchándolas con un tenedor para comprobar que estén blandas.

Un minuto antes de retirarlas del fuego, picamos un huevo duro. Retiramos la cazuela del fuego y las servimos bien calientes.

sábado, 19 de septiembre de 2015

BOLLITOS PARA MERIENDA O DESAYUNO HECHOS EN THERMOMIX Y TRADICIONAL


Estos bollitos, son un éxito total, no demasiado complicados de hacer y se pueden hacer tanto con relleno dulce como salado, o sin rellenar. Son unos bollos parecidos a los suizos muy socorridos. Pueden congelarse en bolsas, se calientan unos segundos y parecerán recién hechos.

Ingredientes:

Masa:
250 gramos de leche
50 gramos de mantequilla (y un poco más para untar el molde)
50 gramos de azúcar
25 gramos de levadura fresca de panadería
500 gramos de harina de fuerza
1 cucharadita de sal

Para rellenarlos salados podemos hacer de distintos sabores:

Queso emmenthal en trozos
Jamón de york
Chorizo cortado en rodajas finas.
Cualquier paté

Si en cambio decidimos utilizarlos con relleno dulce podemos poner:

Nocilla
Cabello de Ángel
Dulce de Leche
Membrillo
Mermelada

Para la terminación

1 huevo batido para pintarlos
Semillas de amapola para espolvorear
Sésamo para espolvorear
Almendra fileteada o crocante (mejor sólo para los dulces)

Elaboración con thermomix

Ponemos en el vaso la leche, la mantequilla y el azúcar y programamos 1 minuto a temperatura 37º, velocidad 2.

Añadimos la levadura desmenuzada y mezclamos 10 segundos a velocidad 3.
Incorporamos la harina y la sal y amasamos por 10 segundos a velocidad 4 y a continuación, 3 minutos más, vaso cerrado, velocidad espiga.

Retiramos la masa y le damos forma de cilindro para ir cortando pequeñas porciones de unos 50 gramos. Les damos forma de bola y reservamos cubiertas con un paño, mientras se prepara el relleno.

Para hacer el relleno

Ponemos el queso y el jamón y troceamos 6 segundos a velocidad 5. Retiramos del vaso y reservar.

Untar con mantequilla un molde rectangular.

Aplastar con la mano una de las porciones de la masa hasta conseguir un círculo de 10 ó 12 cm. colocar en el centro una cucharadita o poco de chorizo y cerrarlo formando pliegues, como si fuese un pañuelo. Repetir el procedimiento con el resto de los rellenos.

Vamos colocando las bolas de masa con los pliegues hacia abajo en el molde preparado, formando filas de sabores: Por ejemplo los hacemos dulces, pones una fila de nocilla y la siguiente de membrillo, así sabremos cual elegir. Si decides hacerlos salados, puedes rellenarlos y distinguirlos por la decoración que les pongas .

Los dejamos reposar cubiertos con un paño, hasta que doblen su volumen, una media hora, depende de la temperatura ambiente, pero podemos dejarlos más.

Precalentamos el horno a 180 grados.

Para la decoración

Pintamos los panecillos con delicadeza con huevo batido y los espolvoreamos con la decoración elegida. Horneamos de 20 a 30 minutos, según hornos, teniendo en cuenta no pasarnos de tiempo, porque quedarán muy secos.

Una vez horneados, dejarlos templar un poco antes de comer.

Si sobran, podéis congelarlos, con un golpe de micro están como recién hechos.

Elaboración tradicional

Ponemos 200 gr de leche (los 50 restantes los reservamos para desleír la levadura), el azúcar y la mantequilla en un bol.

Mezclamos con una batidora de varillas durante un par de minutos, si no tenemos batidora de varillas, a mano, con unas varillas de las de siempre



Agregamos la levadura desleída y seguimos mezclando.

Ponemos la mitad de la harina y mezclamos. Aparcamos la batidora y empezamos a mezclar con las manos.

Añadimos la sal y el resto de la harina y empezamos a amasar poniendo la masa en la encimera. Al principio estará un poco pegajosa, pero amasando y golpeando la masa contra la encimera durante 5 minutos veréis que se va poniendo manejable.

Dejamos reposar la masa 1 hora dentro de un bol tapado con un paño de algodón. Pasado el tiempo, retiramos la masa y le damos forma de cilindro y vamos cortando pequeñas porciones de unos 50 g.

Aplastamos con la mano cada una de las porciones de la masa hasta conseguir un círculo de 10 ó 12 cm. colocamos en el centro una cucharadita o poco de chorizo, o nocilla o el relleno que hayáis elegido  y cerrarlo formando pliegues, como si fuese un pañuelo. Repetir el procedimiento con el resto de los rellenos.

Vamos colocando las bolas de masa con los pliegues hacia abajo en el molde preparado, formando filas de sabores: Por ejemplo los hacemos dulces, pones una fila de nocilla y la siguiente de membrillo, así sabremos cual elegir. Si decides hacerlos salados, puedes rellenarlos y distinguirlos por la decoración que les pongas .

Los dejamos reposar cubiertos con un paño, hasta que doblen su volumen, una media hora, depende de la temperatura ambiente, pero podemos dejarlos más.

Yo los hice para que crecieran juntos y se pegaran, pero podéis hacerlos individuales simplemente con ir colocándolos sobre la bandeja de horno cubierta de papel de hornear y separados para que no se junten porque crecen bastante.

Precalentamos el horno a 180º, arriba y abajo.

Pintamos los panecillos con delicadeza con huevo batido y los espolvoreamos con la decoración elegida. Horneamos de 20 a 30 minutos, según hornos, teniendo en cuenta no pasarnos de tiempo, porque quedarán muy secos.

Una vez horneados, dejarlos templar un poco antes de comer.

Si sobran, podéis congelarlos, con un golpe de micro están como recién hechos.

MERMELADA MORAS SILVESTRES EN THERMOMIX


Aprovechamos que estamos en el tiempo de  moras en el campo, para recogerlas. Este año son grandes, sanas y hermosas.

Debo indicar que yo hago las mermeladas con menos azúcar de la que indican las recetas tradicionales para poder permitirme el lujo de, ocasionalmente, tomarla en el desayuno, pero os aseguro que está igualmente rica. Lo indicado en casi todas las frutas, viene a ser el mismo peso de fruta que de azúcar.

Ingredientes

700 gr de moras recién recogidas del campo
300 gr de azúcar
1 limón sin pepitas y sin nada de la parte blanca

Elaboración

Ponemos las moras con el azúcar y el limón en trozos en el vaso de la thermomix. Programamos 30 minutos, temperatura Varoma a velocidad 2. Pasado el tiempo, la mermelada está en su punto.

Ponemos la mermelada en un frasco cuando aún está bien caliente, tapamos rápidamente asegurándonos de que quede bien cerrado y, automáticamente, damos la vuelta al frasco y lo mantenemos así, con la tapa para abajo durante 24 horas para hacer el vacío. No es necesario hervirlo.

Hay personas a las que no les gusta encontrarse las pepitas de las moras, yo encuentro que son saludables y no me resultan molestas. Por si alguien quiere quitarlas lo único que deberá hacer es, antes de meter los ingredientes en la thermomix, poner unos 100 gr. de agua y las moras y pasarlas 1 minuto a velocidad 8. Después se cuelan y ya se puede hacer la mermelada como indiqué. Este truco, lo aprendí en el Blog de Velocidad Cuchara.

viernes, 18 de septiembre de 2015

PAN DE ESPELTA CON PASAS Y NUECES EN THERMOMIX


Ingredientes

250 gr de harina de fuerza
250 gr de harina integral de espelta
10 gr de sal
320 gr de agua
10 gr de levadura fresca de panadero, o si no tenemos 3,5 gr de levadura seca (Maicena o cualquier otra, pero no sirve royal) de panadero
80 gr nueces peladas
80 gr pasas
4 cucharadas aceite oliva virgen
1 cucharada de miel

Elaboración

Poner en un bol las harinas y desmigar la levadura.

Añadir el aceite, la miel la sal y por último el agua; con cuidado, porque en general se necesita la cantidad de agua que indica la receta pero depende de la clase de la harina. Poner sobre la encimera ligeramente espolvoreada de harina.

Mezclar bien y poner sobre la encimera "espolvoreada" de harina

Estirar la masa y doblarla sobre ella misma al menos durante 10 minutos hasta que veamos que la masa se va poniendo lisa y elástica. Al principio notaremos que se pega a las manos, pero poco a poco irá ganando elasticidad.

Añadir las nueces troceadas y las pasas y seguir amasando unos minutos.

Hacer una bola con la masa, colocarla en un bol y dejarla reposar en un sitio sin corrientes y templado unas dos horas aproximadamente.

Pasadas las dos horas, poner la masa de nuevo en la encimera y amasarlo durante 1 minuto por lo menos.

Darle de nuevo forma de bola, la aplastamos un poco con la mano, y metiendo los bordes hacia dentro haciendo de nuevo una bola.

Para darle forma, la colocamos en un banetton poniendo la parte que nos ha quedado más fea, que es por donde cerramos la bola, hacia arriba, para que después al sacar la hogaza, nos quede más presentada. Dejamos reposar 2 horas más, hasta que veamos que ha levado aumentando el tamaño.

Elaboración en thermomix

Sólo hay que mezclar todos los ingredientes -menos las nueces y las pasas- 10 segundos, velocidad 6, y programar 4 minutos a velocidad espiga.

En el primer minuto incorporamos la sal, y en el último minuto, las nueces troceadas y las pasas.

Horneado:

Precalentamos el horno a 250º, calor arriba y abajo.

Cubrir la pala con un papel de hornear y volcar el pan con mucho cuidado y sin hacer movimientos bruscos.

Sacar la bandeja del horno y tirando suavemente del papel, poner con cuidado el pan en ella.

Con un vaporizador, echar agua dos o tres veces dentro del horno, justo antes de empujar la bandeja hacia dentro.

Bajar el horno a 220º, y mantener unos 25-30 minutos, hasta que la corteza esté un poco tostada y con aspecto crujiente.

Enfriar en una rejilla.

Sale un pan de tamaño considerable, pero podemos conservarlo muy bien. Una vez frío, lo cortamos en tostadas y lo guardamos en el congelador, bastará con ponerlo en un tostador y podremos comerlo como si estuviera recién hecho.

Yo lo suelo tomar en el desayuno, con un poco de queso Philadelphia, queso de Burgos, mermelada, o simplemente tostado y calentito.

Sencillo para hacerlo, y muy saludable.

viernes, 11 de septiembre de 2015

TORTILLA SUPREMA DE MI MADRE ADAPTADA A LA THERMOMIX


Este postre es original de mi madre que debió aprenderlo - supongo - de su madre, mi abuela Filomena. Es laborioso de hacer, pero siempre triunfa entre los más golosos. Tiene tres partes: un bizcocho genovés, una crema pastelera, y una crema tipo natilla para cubrirlo.

Vamos pues, por partes:

Bizcocho genovés

Ingredientes

4 huevos.
120 g de azúcar.
1 cucharadita de azúcar avainillado o esencia de vainilla.
120 g de harina de repostería.
1 pellizco de sal.

Elaboración tradicional

No se la razón, pero a mí, el bizcocho genovés como mejor me sale es por el método tradicional.

Separamos las claras de las yemas y reservamos las yemas.

Con una batidora de varillas, montamos las claras a punto de nieve. Añadimos el azúcar y batimos de nuevo hasta que se haya integrado totalmente y el punto de nieve esté bien firme y no se caiga de las varillas. Agregamos ahora las yemas y batimos un poco más. Nos ha de quedar una masa esponjosa.

Con delicadeza, poco a poco, y con movimientos envolventes, incorporamos la harina.

Engrasamos un molde con aceite, mantequilla, volcamos la masa y horneamos durante 20/25 minutos.

Elaboración con thermomix.

Precalentamos el horno a 180º.

Colocamos la mariposa en las cuchillas, vertemos en el vaso los huevos, el azúcar, el azúcar avainillado. Programamos 6 minutos, 37º, velocidad 4.

Cuando termine el tiempo programado, volvemos a programar 6 minutos, velocidad 4 (sin temperatura).

Añadimos la harina y la sal alrededor de la mariposa y programamos 4 segundos, velocidad 3. Retiramos la mariposa de las cuchillas y terminamos de envolver suavemente la mezcla con la espátula.

Ponemos la preparación en un molde engrasado y metemos al horno durante 20 o 25 minutos.

Crema pastelera

Ingredientes.

250 g leche
50 g azúcar
La piel de 1/2 limón
3 yemas de huevo
20 g maicena
Un pellizco de sal

Elaboración de la crema pastelera

Ponemos en el vaso la leche con el azúcar y las pieles de los cítricos y programamos 10 minutos a 90º, velocidad 1.

Colamos la leche y volvemos a ponerla en el vaso. Agregamos las yemas, la maicena (disuelta en un poquito de leche fría) y la sal. Programamos 4 minutos a 90º, velocidad 4. Tiene que quedar espesita. Para que no haga costra, pondremos un papel film pegado a la crema en el recipiente en el que la reservemos.

La dejamos enfriar y, antes de utilizar para el relleno, la batimos de nuevo durante 5 segundos, velocidad 4.

Natilla tostada

Ingredientes para la natilla

1 litro de leche entera
150 gr. de azúcar
6 yemas de huevo
40 gr. de maicena

Elaboración

Para poner la crema de color tostado, tenemos que hacer un caramelo con 150 gr. de azúcar y una vez que se haya solidificado añadirle la mitad de la leche y calentarla hasta que el caramelo se disuelva.

Mezclamos con el resto de la leche y esperamos hasta que esté templada para que no corte las yemas.

Ponemos todos los ingredientes en el vaso de la thermomix. Programamos 8 minutos a 90º, velocidad 4.

Cuando acabe el tiempo, volvemos a programar. 2 min. Sin temperatura. Vel. 2. Y los 10 últimos segundos aprox. lo subimos a vel. 3.

Montaje del postre

Mientras se templa la natilla, tostada montamos el postre. Buscamos una bandeja alargada y honda.

Colocamos el bizcocho bien centrado, lo abrimos y hacemos 2 capas. (El bizcocho no debe quedar demasiado alto).

Si nos gusta muy jugoso, podemos humedecerlo con almíbar, pero no es necesario porque gana humedad con la natilla.

Cubrimos la primera capa con crema pastelera, y tapamos con la otra, procurando que quede recto.

Cubrimos el conjunto con la natilla tostada y dejamos enfriar.

La suelo decorar con claras a punto de nieve, sobre todo porque así lo vi hacer a mi madre, aunque probablemente con nata quede más bonita, e incluso le podemos añadir algún otro elemento decorativo, aunque ya os advierto que el postre está tan bueno que no necesita aditamentos. Es un postre delicioso, que tiene mucho éxito con todo el mundo pero especialmente con los muy golosos.

La mayoría de mis primos siempre recuerdan este postre de mi madre con añoranza, aunque confieso que no me prodigo excesivamente en su elaboración. Alrededor de este postre hay anécdotas irrepetibles,  que hace que todos recordemos a  mi madre con una enorme sonrisa.

FLORES DE CARNAVAL EN THERMOMIX Y TRADICIONAL


Ingredientes:

500 gr de leche
4 huevos
Sal
350 gr de harina
1 litro o más de aceite para freír ( la flor tiene que quedar sumergida)
una olla o una sartén bien alta

Preparación:

Ponemos en el vaso de la Thermomix la mariposa e introducimos los huevos, la leche y la sal. Batimos durante 1 minuto en velocidad 3.

Sin parar la thermomix y en velocidad 3, agregamos la harina a través del bocal y volvemos a mezclar 2 minutos en velocidad 3.
Dejamos reposar la masa unos 30 minutos y mezclamos de nuevo 10 segundos en velocidad 3.

Ponemos a calentar el aceite y cuando vemos que está bien caliente , metemos el molde de hierro para que se caliente mucho a fin de que luego se pegue bien la masa.

Con el hierro caliente, lo introducimos en la masa, pero con cuidado de no sumergirla entera, porque no habría forma de despegarla y sacarla . La parte de arriba debe quedar sin masa para poder soltar la flor al contacto con el aceite.

Al meter el molde de hierro en la masa, oiremos como si la masa se friera al pegarse al hierro. Es el momento de pasar el molde a la sartén esperar unos segundos y dar unos pequeños golpecitos para que se suelte del molde y termine de dorarse la flor.

Las primeras que hagamos es posible que nos cueste un poco separarlas o que se desfiguren, no pasa nada, nos podemos ayudar con un tenedor, aunque rápidamente se pilla el truco y salen bonitas.

Cuando hayamos conseguido el dorado que nos gusta, las vamos retirando y colocando sobre papel absorbente para que pierdan el exceso de aceite. Espolvoreamos con azúcar glas, y a disfrutarlas bien crujientitas.
Elaboración tradicional
Si no tenemos thermomix, tampoco pasa nada, este dulce es de mucho antes de que se inventara la thermomix,  ya hacía flores mi abuela paterna que nació en el siglo XIX.
El  procedimiento no puede ser más sencillo tamizamos bien el harina para que no salgan grumos,  ponemos todos los ingredientes en un cuenco alto o en un vaso de los que suelen traer las batidoras, sea de varillas, o  de brazo, batimos todo hasta que esté todo bien integrado y  dejamos reposar la masa 30 minutos. Después la removemos con una cuchara un poco, y podemos empezar a hacer las flores.



 








PASTAS DE MANTEQUILLA FACILITAS



Ingredientes:

200 gr de harina.
100 gr de azúcar (la pasamos por la thermomix en velocidad 7/9 para hacerla glas).
100 gr de mantequilla.
1 huevo
Una pizca de sal.
Ralladura de limón, agua de azahar, vainilla, cualquier aroma que nos guste

Elaboración

Ablandamos la mantequilla, incorporamos el azúcar y a continuación añadimos el huevo.

Batimos un poco, añadimos la pizca de sal y el limón, en ralladura o unas gotas, como una cucharadita de café (no de postre) y por último la harina.

Cuando la harina se haya incorporado, dejamos reposar en la nevera un rato. Precalentamos el horno a 180º, y mientras reposa la masa y sube la temperatura preparamos los adornos: almendras fileteadas, chocolate en virutas, sésamo, pasas, piñones, mermelada, fruta escarchada o cualquier cosa que tengamos a mano

Sacamos la masa de la nevera y vamos formando bolitas del tamaño de una nuez y se colocan en la placa de horno sobre un papel de hornear, se aplastan con la parte de atrás de la mano y se adornan.

Horneamos a 180º-200º entre 8 y 10 minutos, hasta que se doren.

EMPANADA DE BONITO


Ingredientes para la masa

150 gr. de leche
65 gr. de aceite
60 gr. de vino blanco
Harina, la que pida, dependiendo del tipo de harina unos 450 gr. aproximadamente

Ingredientes para el relleno

1 cebolla mediana
1 kg de tomate
1 tarro de atún en aceite de oliva o en escabeche, de unos 300 gr.
4 huevos cocidos

Para pintar después la empanada, un huevo batido

Elaboración del relleno

Lo primero que tenemos que hacer es el relleno para que esté frio a la hora de montar la empanada.

Trocear la cebolla y sofreírla hasta que esté blanda. Agregar entonces el tomate pelado y troceado, ponerle sal y un poco de azúcar para quitarle la acidez. Dejar que se vaya haciendo lentamente, hasta conseguir reducir el líquido que suelta el tomate y dejamos enfriar.

Picamos los huevos cocidos en trozos y añadimos a la salsa de tomate.

Repetir la misma operación con el atún escurrido.

Mezclar todo bien.

Elaboración de la masa

Mezclar todos los ingredientes de la masa exceptuando la harina en un bol. Ir agregando la harina poco a poco, y amasar durante unos minutos hasta que la masa no se nos quede pegada a los dedos.

Dejar reposar tapada con un paño sin que le de el aire una hora aproximadamente.

A menudo la hago en la Panificadora, en el programa de amasado y levado. La mía es una Panificadora Philips: en el 9.

Una vez reposada, dividir en dos la masa y estirar con el rodillo, para colocar en una bandeja en la que previamente habremos puesto un papel de hornear.

Estirar el resto de la masa, y dejar en espera.

Colocar sobre la masa estirada en la bandeja el relleno y repartir de forma uniforme.

Cubrir con la segunda parte de la masa estirada y ayudándonos de los dedos ir sellando la masa doblándola por los bordes con un poco de gracia.

Nos podemos ayudar con un tenedor e incluso para sellarla, untar el borde con un poco de agua, pero si no lo hemos hecho antes, debemos tener cuidado para no estropear la empanada.

Siempre sobrarán recortes, así que podemos decorarla como más nos guste, os dejo dos de las que yo he hecho recientemente a modo de orientación.

Una vez que hemos terminado con la decoración, batimos un huevo y pintamos la empanada con la ayuda de un pincel de cocina, procurando que quede toda bien cubierta pero sin que queden montones que luego al cocer afearán la presentación.

Con la ayuda de un punzón (yo utilizo una aguja de hacer punto), hago varios agujeritos por toda la empanada, para evitar que al cocer se hinche, se rompa y salga fuera el relleno.

Precalentar el horno a 250º por arriba y por abajo.

Horneado

En el momento de meter a cocer la empanada, poner el calor solo por debajo y bajar la temperatura a 225º. En esta posición yo la tengo media hora, pero debéis vigilarla porque dependiendo del grosor a que hayáis dejado la masa y de la cantidad de relleno que hayáis puesto, tardará más o menos en hacerse. En general y como orientación, cuando veáis que comienza a hincharse, es momento de poner la temperatura arriba y abajo.

A pesar de haber previsto que se hinche haciendo los agujeritos, con probabilidad se seguirá hinchando, así que tendréis que abrir el horno y volver a insistir ahuecando los que se han cerrado.
Cuando veáis que va tomando color, (cada cual a su gusto) es momento de sacar del horno y dejar enfriar para poder degustarla.

¡Buen provecho!