domingo, 30 de enero de 2022

FIDEUÁ DE MARISCO O FIDEUÁ DEL SEÑORITO


La fideuà es un plato esencial de la gastronomía española que hoy vamos a elaborar en Thermomix. Es un plato típico de Valencia, pero se cocina en casi todas las casas, aunque mucho me temo que ésta no tiene nada que ver con respecto a la original. La fideuà tradicional exige un fideo grueso especial para ello, aunque si no tenéis en casa podéis utilizar igualmente un fideo grueso, como todas las cosas en cocina, salvo la repostería, admite variaciones al gusto.

No recuerdo el tiempo que no hacía una fideuà en casa, creo que desde antes de empezar a poner recetas en el blog. Se me olvidan cosas que hacía hace tiempo y ocasionalmente se enciende la lucecita y me digo, hoy es el día!

A mi particularmente me gusta con frutos del mar, más que con ninguna otra cosa, así que he hoy tocó. Tocó también, porque tenía parte de la cabeza de un rape, sepia, gambas y langostinos que eran restos de la navidad y había que darles salida.

He estado buscando recetas en la thermomix, más que nada como orientación para los tiempos aunque generalmente lo de los ingredientes y las cantidades me las suelo saltar a la torera y pongo los ingredientes que tengo a mano y la cantidad necesaria dependiendo del número de comensales que seamos.

Sí os indico dos cosas, el nombre lo tomé de una fideuà que hacen los valencianos y que se llama así porque todo lo que lleva va limpio de cáscaras para evitar ensuciarse las manos. Reconozco que en casa somos todos bastante señoritos a la hora de comer, nos gusta todo limpio de polvo y paja, se come más rápido e incluso te permite mejor calcular la cantidad que quieres comer.

Por ejemplo después de una temporada en la que yo he comido menos porque quería perder peso, mi estómago se ha hecho más chico y ahora necesito la mitad. Este plato de cualquier forma, es saciante, así que ojo si lo hacéis y al momento de servirlo tenerlo en cuenta.

Ingredientes:

12 gambas peladas
10 langostinos limpios
La mitad de la carne de una cabeza de rape grande
300 g de sepia troceada y limpia
1 kg de mejillones
4 cucharadas soperas de aceite de oliva
1 diente de ajo
40 gr. de cebolla
100 gr. de pimiento verde largo y fino
10 gr. de perejil
100 gr. de tomate natural
Unas hebras de azafrán
Un poco de colorante alimentario (yo no le puse)
1 cucharadita de carne de pimiento choricero
700 ml de fumet hecho con el agua que soltaron los mejillones al hervirlos al vapor, las espinas de la media cabeza de rape y las cáscaras de los langostinos y las gambas.
200 g de fideos especiales para fideuà
Sal

Elaboración

La parte más laboriosa de este plato es limpiar los mejillones. A mi me encantan de cualquier forma pero no los hago demasiadas veces por evitar ese trance, vienen con muchas adherencias y me gusta dejarlos completamente limpios, y eso lleva tiempo.

Después los coloco en una cazuela alta y los pongo al fuego sin nada de agua, tal cual, de forma que al abrirse, suelten todos los jugos que luego aprovecho para hacer el plato en que vaya a utilizarlos. Dejo que se enfríen y los desconcho para utilizarlos

El fumet lo hice a la forma convencional, eran bastantes cosas y me salió para hacer otro plato con pescado otro día. Puse una cazuela con las cascaras  y el hueso de rape y una hoja de laurel, y lo dejé que hirviera desespumando cada poco.

Ponemos el aceite en el vaso y añadimos el ajo, la cebolla en cuartos, el perejil y el pimiento, cortado en trozos, el tomate pelado, las hebras de azafrán y la carne del pimiento choricero. Lo picamos todo junto 4 segundos en velocidad 5. Bajamos con la espátula los restos que hayan quedado por las paredes del vaso.

Bajamos con la espátula los restos que hayan quedado por las paredes del vaso.

Sofreímos todo esto 5 minutos, Varoma, en velocidad 1. Cuando acabe, trituramos todo 1 minuto en velocidad 8, y volvemos a bajar con la espátula los restos que hayan quedado.

Colocamos la mariposa, pulsamos el botón de giro a la izquierda y añadimos 600 gr. del fumet. Programamos 7 minutos, Varoma, velocidad 3 o hasta que el caldo hierva.

Cuando veamos que el caldo hierve de verdad, añadimos la sepia y la carne de rape. Programamos 8 minutos, Varoma, velocidad cuchara, sin el cubilete, con el cestillo en su lugar.

Una vez finalizado, añadimos los fideos y programamos 8 o 9 minutos, según las indicaciones que marque el paquete.

En el último minuto le agregamos las gambas y los langostinos pelados con los mejillones.

Volcamos la fideuà en una fuente y dejamos reposar unos minutos para que se termine de embeber el poquito caldo que le puede quedar. A nosotros nos encantó, la haré más a menudo.

BIZCOCHO DE CALABAZA Y ALMENDRA ELABORACION TRADICIONAL Y EN THERMOMIX

Hoy decidí hacer un bizcocho diferente, sobre todo para utilizar harina de almendra que tenía en casa y un trozo de calabaza sobrante de hacer una crema. Aunque el bizcocho siempre lo hago en thermomix, hoy elegí hacerlo por el método tradicional, sobre todo para darle uso a una batidora de mano nueva que me dejaron los Reyes tardíos y también porque iba a preparar un plato para el que necesitaba la thermomix. De todas formas os pongo las dos formas de elaboración porque la thermomix además de ser más rápida. evita que utilicemos demasiados recipientes en la cocina. Vamos con ello.

Ingredientes

250 g de Calabaza limpia
100 ml de aceite de girasol
80 ml de leche
4 Huevos
1 pizca de sal
200 g de azúcar
280 g de harina para bizcochos
125 de harina de almendra
la piel de 1 naranja (sin nada de la parte blanca)
4 cucharadas de ron
1 sobre de levadura Royal

Elaboración tradicional

Ponemos en un robot de cocina la calabaza troceada, el aceite, la leche, la piel de la naranja, y el ron y trituramos todo de forma que quede un puré muy fino. Reservamos en un bol.

Separamos las yemas de las claras. Montamos las yemas con 150 g de azúcar hasta que tripliquen su volumen.

Añadimos a las yemas la crema de calabaza y mezclamos muy bien.

En un recipiente mezclamos bien la harina de bizcochos, la harina de almendra, la levadura y lo unimos con delicadeza a la mezcla anterior.

Montamos las claras a punto de nieve con 50 g de azúcar y una pizca de sal y las incorporamos a la mezcla anterior poco a poco usando una espátula y haciendo movimientos envolventes de abajo hacia arriba.

Yo he utilizado hoy un molde silicona y lo unté con spray antiadherente que me funciona muy bien, y puse en su interior la masa del bizcocho. Lo horneé en horno precalentado a a 180º durante 50 minutos.

No olvidéis antes de sacarlo del horno de pinchar con un palillo para ver si está listo, de hecho, el mío necesitó 5 minutos más. Una vez frío desmoldamos. Si queréis se puede espolvorear con azúcar glas, yo he preferido no hacerlo, porque me parece que ya tenía azúcar suficiente.

Elaboración en thermomix

Separamos las yemas de las claras. Colocamos la mariposa en el vaso, añadimos las claras, 50 g de azúcar, una pizca de sal y montamos 3 min, 37º C velocidad 3 y 1/2. Reservamos en un bol.

Quitamos la mariposa y sin lavar el vaso, ponemos la calabaza troceada, el aceite, la leche, el ron y la piel de la naranja y programamos 1 min velocidad 10.

Sacamos del vaso y reservamos.

Sin lavar el vaso ponemos la mariposa, metemos en el vaso las yemas y 150 g de azúcar 3 minutos velocidad 3 y 1/2.

Agregamos la mezcla de calabaza y ponemos 40 segundos velocidad 3.

Ahora añadimos la mezcla de harinas, y la levadura 1 minuto velocidad 3 y 1/2.

Ponemos la maquina en marcha a velocidad 3 y vamos añadiendo por el bocal las claras montadas poco a poco, no debemos tardar mas de 40 segundos. También podemos hacer este paso como en el método tradicional, que yo creo que funciona mejor.

Ponemos un molde con spray antiadherente y volcamos la masa del bizcocho.

Horneamos en horno precalentado a 180º durante 50 minutos. Hacemos la prueba del palillo para comprobar que esté listo.

Una vez frío desmoldamos. Si os gusta podéis espolvorear el bizcocho con azúcar glas.


 

martes, 25 de enero de 2022

GARBANZOS CON ALMEJAS EN OLLA RAPIDA


Nada hay mejor en días de frío como hoy, como un buen plato de cuchareo para combatirlo.

Las legumbres en general son buenas compañeras de los mariscos, tanto en guisos como en ensaladas y otro tipo de platos. En esta receta, guisamos unos garbanzos con almejas, el resultado nos ha encantado.

Los garbanzos son una de las legumbres más nutritivas, los secos aportan hasta 21 gramos de proteínas, una vez cocidos su contenido en proteínas se reduce, pero siguen aportando 5 gramos. También tienen hasta 7 gramos de hierro, y 14 gramos de fibra alimentaria. Son un alimento ideal para toda la familia ya que aportan nutrientes fundamentales. Los garbanzos tienen vitamina A, vitamina C, y hasta 143 miligramos de calcio.

La mejor manera de que el diabético aporte glucosa de manera lenta es a través de las legumbres como los garbanzos, ya que esta glucosa está mezclada con proteínas y con fibra, siendo su paso a la sangre lento.

Son un alimento prebiótico que mejora la salud intestinal ayudándonos a prevenir el cáncer de colon. También está recomendado para controlar la tensión arterial ya que es pobre en sodio, y también baja el colesterol.

Ingredientes

250 g de Garbanzos
1 Puerro (sólo la parte blanca)
1 Cebolla pequeña cortada en brunoise
400 g de Almejas
1 chorrito de Vino blanco
500 ml de Caldo de pescado
Aceite de oliva virgen
Sal

Elaboración

El día anterior ponemos los garbanzos en agua para que ablanden, han de estar al menos 12 horas.

Pelamos y picamos la cebolla, el ajo y el puerro muy finitos.

Echamos aceite en la olla y pochamos la verdura con un poco de sal, para que ablande antes.

Agregamos los garbanzos, y cubrimos con el caldo de pescado, añadimos sal y dejamos que cueza durante 25 minutos en la olla rápida.

Lavamos las almejas y las echamos en una sartén con un chorrito de vino blanco.

Tapamos y esperamos a que se abran para añadírselas a los garbanzos.

Cuando los garbanzos hayan terminado la cocción, esperamos que la olla se despresurice y añadimos las almejas ya abiertas. Dejamos que de todo junto un hervor para que el guiso adquiera el sabor del vino y las almejas.

Mezclamos bien ¡y servimos calentito!



SECRETOS PARA COCINAR CON LA OLLA RAPIDA Y COMPARATIVA CON LA OLLA EXPRES TRADICIONAL

 


TIEMPOS DE COCCIÓN EN OLLA RÁPIDA

Manejar los tiempos de cocción en olla rápida es importante a la hora de utilizarla, sea lo que sea lo que queramos cocinar. No hace falta aprendérsela de memoria, pero conviene tener la tabla siempre a mano, en el formato que sea, para echar mano de ella cuando vayamos a utilizarla. También pondremos la comparativa con una olla exprés que lógicamente trabaja a menos presión.

La marca de la olla es indiferente, los tiempos de cocción son válidos para todos los modelos. Lo único que debemos tener en cuenta es que 
 sirve incluso para las ollas exprés más antiguas, de cierre a tuerca. Lo único que debemos tener en cuenta es que la mayoría de ollas rápidas trabajan con dos tipos de presión:

Presión baja, a 0,5 kg/cm2, para cocinar moderadamente rápido, que sería una olla exprés normal.

Presión alta, a 1 kg/cm2, para cocinar muy rápido, que sería lo que conocemos como olla rápida.


La presión en una olla se consigue «encerrando» el vapor generado al hervir los alimentos en agua, liberando sólo la cantidad necesaria para permitir que la olla respire, y no acabe reventando. Si nuestras olla rápida no admite más que un estado de presión, lo más seguro es que trabaje a presión alta, la normal. En nuestra lista, anotaremos los tiempos de cocción en olla a presión en ambos niveles, es decir olla exprés y olla rápida.

Antes de que sigáis leyendo la tabla de referencia de tiempos de cocción en olla exprés, os significo que te la toméis como eso: una mera referencia. En casi todos los casos nos va a dar buenos resultados, pero la experiencia nos debe ir dando el punto exacto con cada alimento, en función de su tamaño. Yo he ido haciendo anotaciones a lo largo de los años sobre la tabla de tiempos de cocción de mi olla rápida, y el resultado es el que vais a ver. Ahora os toca a vosotros hacer vuestras propias anotaciones.

Un último detalle que hay que tener en cuenta es que el tiempo de cocción en olla rápida empieza a contar a partir del momento en que la válvula empieza a silbar; o sea, a liberar vapor (si lo hace, es porque ya ha alcanzado el nivel de presión necesario y establecido para cocinar).

TIEMPO DE COCCIÓN DE LAS LEGUMBRES EN OLLA RÁPIDA

La mayoría de la gente usa principalmente la olla rápida para cocer legumbres, al reducirse considerablemente el tiempo de cocinado (más o menos, a la mitad). Teniendo en cuenta que debemos comer legumbres al menos una vez por semana, la inversión estará rentabilizada en no demasiado tiempo si usamos la olla rápida para cocer garbanzos, lentejas, alubias o guisantes, exclusivamente.

De las citadas, las legumbres secas (garbanzos, lentejas y alubias) son las que más tiempo de cocción demandan, por razones obvias, y requieren de hidratación previa (vamos, que hay que tenerlas en remojo la noche antes).

Alta

Baja  

Lentejas normales

20′

30′

Lentejas pardinas

16′

22′

Garbanzos lechosos L

25′

35′

Garbanzos S

22′

30′

Alubias pintas o carillas

15′

21′

Alubias de fabada

18′

25′

Alubias de la granja

25′

35′

Guisantes

3′

5′

La cantidad de agua para cocer legumbres en olla rápida debe ser de 1/3 de la capacidad de la olla, como máximo, dejando unos cuatro dedos de agua por encima de las legumbres

TIEMPO DE COCCIÓN DE LAS VERDURAS EN OLLA RÁPIDA

Cocer verduras en olla rápida tiene menos sentido (salvo que sea para hacer un caldo, junto con otros ingredientes que requieran de más tiempo), si tenemos en cuenta que el tiempo necesario es muy reducido en la mayoría de casos. Yo personalmente si suelo cocerlas, porque utilizo verduras de las que me regalan en gran cantidad y las congelo, me refiero por ejemplo a las judías verdes. No la utilizo por ejemplo en el caso de verduras de hoja como las espinacas, y utilizo la olla exprés en el de otras verduras carnosas como las patatas, las zanahorias, el brócoli, la coliflor, etc., porque les tengo calculado el tiempo para que me queden en el punto de cocción que me gusta que suelen ser 4 minutos, concretamente en el caso de la coliflor, el resto va detallado en la tabla.
   

Alta

Baja  

Alcachofas            

8′

10′

Brócoli

6′

9′

Coliflor

6′

4′

Cebolla M

4′

6′

Calabacines

5′

7′

Coles de bruselas

3′

5′

Berenjena

5′

7′

Patatas M

6′

10′

Zanahorias

5′

9′      


La cantidad de agua para cocer verduras en olla rápida debe ser la suficiente para cubrirlas por completo, dejando unos 3 dedos por encima, aunque yo tengo muy en cuenta siempre que la olla rápida necesita como mínimo 250 ml. para ser utilizada sin riesgo.

TIEMPO DE COCCIÓN DE LAS CARNES EN OLLA RÁPIDA
   

Yo uso la olla exprés en ocasiones para hacer estofados de carne a baja temperatura «aprovechando» el cierre hermético de la misma, pero no hago uso de la presión, y dejo la válvula abierta. Cuando queremos que una carne nos quede blandita y perfecta, las prisas no son buenas consejeras, aunque para algunos guisos puede resultar práctico cocinar la carne en olla rápida.

Alta

Baja  

Piezas grandes

18′

25′

Carne troceada

12′

18′

Corte de chuleta

6′

9′

Hígado

8′

10′

La cantidad de agua para cocer carnes en olla rápida debe ser de dos dedos por encima de la carne, si queremos aprovechar para hacer una salsa.

TIEMPO DE COCCIÓN DEL MARISCO EN OLLA RÁPIDA

El marisco requiere de cocciones súper precisas si no queremos echarlo a perder. Como con cualquier ingrediente, pero más si cabe, si tenemos en cuenta su coste y la naturaleza de su carne. Por eso cocer marisco en olla rápida tampoco lo recomiendo si se trata de piezas pequeñas como gambas, langostinos o incluso cigalas, pero sí puede ser útil para cocer centollos, bogavantes o pulpo. Si quieres ahondar en el caso del pulpo, te explico:

Podemos hacerlo en olla convencional o en olla exprés.  Si vamos a cocer pulpo en olla exprés, ponemos a cocer el agua con la sal y  laurel, y cuando borbotee, trinchamos el pulpo y lo sumergimos en el agua, contamos hasta 5 y lo sacamos, contamos de nuevo, y volvemos a sumergirlo. A la tercera, lo dejamos en el agua definitivamente, y tapamos. Es lo que se llama asustar al pulpo.
Si nuestra olla tiene dos posiciones, usamos la 1 (la de menos presión), esperamos a que empiece a echar vapor, y entonces bajamos el fuego y mantenemos la cocción durante 25 minutos (un pulpo excesivamente grande requerirá más tiempo, de forma proporcional).
Si preferimos cocer el pulpo en olla normal hacemos lo mismo, pero en vez de 25 minutos, lo dejamos cocer durante 40 minutos tapado.

De todas formas, voy a indicar los tiempos de cocción del marisco en olla rápida sólo a presión baja, ya que en la mayoría de casos (como sucede con las legumbres de hoja) antes de que la válvula empiece a liberar presión, ya tendremos las piezas cocidas.

Ni que decir tiene, que debemos tener un plus de escrúpulo con el tamaño de cada pieza, y que en este sentido, será la experiencia la que nos acabe acercando a la exactitud.

Alta

Baja  

Calamar

8′

Pulpo M

18′

25′

Bogavante

10′

Buey de mar

11′

Centollo

12′

Langosta

10

lLa cantidad de agua para cocer mariscos en olla rápida debe ser de 2/3 de la capacidad de la olla, o la capacidad máxima contando con el volumen del marisco.

TIEMPO DE COCCIÓN DE UN CALDO EN OLLA RÁPIDA

Si vas a hacer caldo en una olla rápida, nos podemos permitir abusar un poco de todo lo que pongamos sobre cociendo los ingredientes, con el fin de obtener la máxima sustancia de cada cosa. Si mezclamos verduras con carnes y, por ejemplo, un hueso de jamón, deberíamos añadir cada ingrediente en su momento, pero esto sería inviable usando una olla rápida. Se puede hacer un rehogado con las verduras y la carne antes de añadir el agua y la sal. Si es de pescado, lo añadimos después de echar el agua, y seguimos estos tiempos de referencia.

Alta

Baja  

Caldo de carne

20′

25′

Caldo de pescado

10′

15′


La cantidad de agua para cocer legumbres en olla rápida debe ser el máximo admitido de la olla.

¿POR QUÉ EN LA OLLA RÁPIDA SE COCINA MÁS RAPIDO?

Siempre hemos oído eso de tapar siempre la cazuela cuando queremos cocinar más rápido, sin dejar escapar la energía. Pues bien, si llevamos este principio al extremo en lo que a concentración de vapor se refiere, y a eso le añadimos el efecto de la presión, tenemos el sistema de cocción en olla rápida.

En una olla rápida tiene lugar un proceso de concentración extrema del vapor, que unido al efecto de la presión, acelera la penetración del agua en los alimentos, y su ablandamiento.

VENTAJAS DE COCINAR EN OLLA RÁPIDA

Es por eso que la principal ventaja de cocinar con la olla rápida o exprés será, como su nombre indica, el considerable ahorro de tiempo con respecto a cocinar en una olla convencional.

INCONVENIENTES DE COCINAR EN OLLA RÁPIDA

No obstante, como casi siempre, la merma de tiempo en los procesos de cocinado conlleva asumir algunos riesgos, como que nos pasemos en la cocción/presión y alteremos el aspecto y la textura de los ingredientes. Si conocemos nuestra olla y sabemos los tiempos, esto no debería pasar, pero siempre conseguiremos mejores resultados, en general, con un estofado (tapado a fuego lento), que cocinando a presión.

CÓMO USAR LA OLLA RÁPIDA SIN PELIGRO

Mucha gente se resiste a comprar ollas exprés por temor a usarlas. Es cierto que tienen sus riesgos si no se usan como es debido (y todos hemos visto alguna vez una foto o vídeo del resultado de la explosión de una olla), pero si entendemos el funcionamiento de éstas y seguimos algunas recomendaciones, no debemos tener miedo alguno usando una olla rápida.

Como hemos comentado antes, una olla exprés trabaja con la presión justa para cocinar, dentro de unos mínimos y máximos. Para que la olla cocine con la presión suficiente, pero ésta no sea demasiada como para provocar la rotura del metal o el levantamiento de la tapa, las ollas tienen una válvula que libera la presión necesaria. Si la válvula está en buenas condiciones (y las de las ollas rápidas modernas nada tienen que ver con las válvulas de antes), y nos aseguramos tras cada uso de que no está obstruida ni deteriorada, no hay nada que temer.

Aun así, si podemos elegir, optaremos siempre por un tipo de presión media o baja, por el bien de nuestras comidas, y por evitar llevar la olla al máximo de su capacidad (aunque los márgenes de admisión de presión de una olla son muy superiores). Además, controlaremos la temperatura de la cocina para que la salida de vapor nos sea violenta, sino moderada.

Por último, otro de los consejos básicos para usar una olla exprés sin riesgos, es dejar que éstas suelten todo el vapor fuera de fuego antes de abrir la tapa (las ollas modernas cuentan con un indicador de apertura de la tapa: cuando no hay presión en la olla, cae por su propio peso). Con ese tiempo hay que contar a la hora de medir el tiempo de cocción de una olla rápida. Aunque esté fuera de fuego, si hay presión en la olla y el agua bulle, la cocción sigue su curso. ¡Tenlo en cuenta!


Mi experiencia me dice que los tiempos marcados son los precisos, pero yo utilizo un truco que me va muy bien para ahorrar energía, tan cara en estos tiempos. Pongo la temperatura al máximo en el fuego indicado a cada tamaño de olla, cuando la olla ya tiene la presión suficiente para empezar con la ebullición, bajo la temperatura de mi vitrocerámica al 3 y empiezo a contar el tiempo de cocción, queda todo en su punto. Espero que todas estas indicaciones os sirvan para una utilización optima tanto de la olla exprés como la olla rápida.

sábado, 22 de enero de 2022

CROISSANT RELLENOS PARA UNA CENA RAPIDITA


Hoy ha sido uno de esos días en los que no nos apetecía el típico pescado a la plancha para cenar y nos hemos saltado a la torera nuestro sistema de cuidado en la alimentación. Nos hemos dado un gusto, no porque haya sido nada especial, sino porque significa un cambio en nuestros hábitos de diario. Es un plato sencillo de elaboración y con un buen resultado: Unos croissant rellenos de jamón york y queso mozzarella.

Ingredientes

1 lámina de hojaldre de mantequilla de las que se pueden comprar en el súper
1 envase de jamón York cortado en rodajas finas
1 envase de queso mozzarella
1 huevo batido para pintar los croissants
Unas semillas de sésamo

Elaboración

Precalentamos el horno a 190º.

Extendemos la lámina de hojaldre sobre el papel de hornear en que viene envuelto. Lo partimos a la mitad por la parte mas larga y con cada parte, formamos triángulos.

Como queremos unos croissants pequeños, vamos a tener cuidado de no rellenarlos demasiado para que resulten ligeros. En cada triángulo ponemos una rodaja de jamón york enrollada y media loncha de queso troceado en tres partes para poder formar el croissant con facilidad,

Vamos rellenando cada triángulo y colocándolos en una bandeja de horno en la que hemos colocado papel de hornear, hasta completar los triángulos o hasta que se nos acabe el relleno. Una vez colocados en la bandeja de horno, pintamos con huevo batido y le ponemos un poquito de sésamo tostado por encima.

Los dejamos hacerse en el horno durante 20 minutos y ya tenemos una cena sencilla y rápida.






 

COSTILLAS DE CERDO AL HORNO

Ingredientes

800 g de costilla de cerdo troceada
1 patata grande
100 ml de vino blanco
100 ml de agua o caldo de carne
Hierbas provenzales, o tomillo, romero, orégano
Aceite de oliva
Sal
Pimienta
3 dientes ajos enteros sin pelar

Elaboración

Precalentamos el horno a 190º

Pelamos la patata y la cortamos en trozos ni muy pequeños ni muy grandes.

En una bandeja de horno, ponemos las costillas, las patatas troceadas, sal, pimienta, las hierbas provenzales, los ajos enteros sin pelar y un buen chorro de aceite. Removemos todo para que se mezcle bien. Agregamos el vino y el caldo y tapamos la bandeja con papel de aluminio, poniendo la parte brillante del papel hacia abajo porque absorbe mas calor al reflejarse la luz

Horneamos durante 50/60 minutos.

Pasado el tiempo, sacamos la bandeja del horno, retiramos el papel con cuidado de no quemarnos y removemos las costillas.

Volvemos a introducir en el horno, subimos la temperatura a 200/210º y horneamos otros 30 minutos hasta que veamos que se ha reducido el líquido y están doradas.

Depende del tamaño y el grosor de las costillas el tiempo de horno, de forma que la mejor manera de comprobar que están hechas es pincharlas para comprobar si están tiernas.




 

martes, 18 de enero de 2022

SOLOMILLO DE CERDO AL VINO BLANCO


Este es un plato que se prepara en poco tiempo con buen resultado y por poco dinero.

Muchas veces, nos complicamos demasiado y hacemos platos elaboradísimos que requieren de mucho tiempo y esfuerzo en la cocina. Este plato  no requiere esfuerzo y nos puede servir para un día especial. La salsa es una auténtica maravilla y se prepara en un momento. 

Ingredientes

1 solomillo de cerdo 
1 cebolla mediana cortada en brunoise
200 ml de vino blanco
200 ml de agua o caldo que hacemos con 1/2 cubito
1 cucharada de harina de trigo (15 g)
Sal y pimienta negra molida
aceite de oliva
1/2 cubito de caldo de carne (opcional)
Una pizca mínima de colorante alimentario si queremos darle un color dorado.

Elaboración

Lo primero que hemos de hacer es preparar el solomillo. Retiramos con una tijera los restos de grasa y las telas que pueda tener. Cortamos en medallones de aproximadamente un centímetro y medio de grosor y los aplanamos un poco con  una maza de madera o un cuchillo.

Marcamos los medallones en una sartén, poniendo en una sartén al fuego un buen chorro de aceite de oliva virgen extra y colocamos los solomillos. Hay que marcarlos sin dejar que se cocinen por dentro. Retiramos a un plato cuando estén marcados por las dos caras.

Ahora vamos a preparar la salsa. En una cazuela, sofreímos la cebolla en el mismo aceite  (yo le pongo un poco de sal para que la cebolla suelte sus jugos), y añadimos una cucharadita de harina cuando la cebolla empiece a dorarse. Añadimos el vino blanco y el caldo. Dejamos que hierva a fuego lento hasta que reduzca el alcohol. Tras unos diez minutos en el fuego, la salsa ya habrá empezado a espesar. Trituramos la salsa y si nos parece demasiado espesa, agregamos un poco de agua.

Si queremos que el solomillo gane en sabor, podemos disolver 1/2 cubito de caldo de carne en el agua. Yo no lo hice y la salsa quedó muy rica.

Añadimos el solomillo a la cazuela para que se acaben de cocinar por dentro. Probamos el punto de sal. A los 3 o 4 minutos, retiramos del fuego. Servimos.

Este plato podemos hacerlo con anterioridad, de hecho yo suelo cocinar a primera hora de la mañana para luego salir a dar un paseo y aprovechar para hacer compra. Teniendo eso en cuenta, y que luego deberéis recalentarlo, tendremos el solomillo menos tiempo hirviendo en la salsa o incluso dejar ese paso para la hora de comer. Se trata de que el solomillo quede en su punto y quede jugoso.

Podemos presentar todos los medallones en una bandeja con un poco de salsa de encima y poner el resto de la salsa en una salsera y que cada cual riegue el solomillo a su gusto.

miércoles, 5 de enero de 2022

AZÚCAR INVERTIDO: USOS Y PROPORCIONES. COMO SE HACE

 

AZÚCAR INVERTIDO: USOS Y PROPORCIONES

Para muchos el azúcar invertido es un gran desconocido en la cocina y para muchos otros ya lo conocerán, o lo habrán leído en alguna receta, pero si aún no se han atrevido a hacerlo éste es el momento. La preparación del azúcar invertido es muy sencilla, ya que al preparar éste con thermomix controlamos muy bien la temperatura durante todo el proceso, muy importante para su correcta elaboración. Y los resultados en su posterior utilización son muy efectivos, sobre todo en los helados si no se tiene heladera.

El azúcar invertido es el resultado de una separación por hidrólisis de la sacarosa del azúcar en glucosa y fructosa por la acción de un ácido a temperatura elevada. Este proceso se produce de forma natural en los alimentos, como por ejemplo la miel. Pero la podemos realizar de forma involuntaria cuando hacemos mermelada al añadir limón y azúcar a la fruta durante la cocción.

En este caso la vamos a realizar a través de una reacción química añadiéndole el sobre de acidulantes del gasificante para repostería.

USOS DEL AZUCAR INVERTIDO

La principal característica del azúcar invertido es que endulza un 30% más que el azúcar común, por ello su mayor uso será en panadería, bollería y repostería. Ya que además acelera la fermentación de la masa de levadura y ayuda a la retención de humedad evitando que ésta se reseque y se mantenga tierna más tiempo. También se emplea para dar brillo a la superficie de la bollería.

Además dificulta la cristalización del agua, por lo que es muy útil en la producción de helados, es más fácil darle forma una vez congelado y queda más suave.

PROPORCIONES

El azúcar invertido se utiliza sustituyendo una parte del azúcar que requiere la receta, por una parte del azúcar invertido, siendo las proporciones las siguientes:

· En panadería, sustituimos un 50% del azúcar común por azúcar invertido. Es decir, si la receta nos indica 100 gramos de azúcar, utilizaremos 50 gramos de azúcar común y 50 gramos de azúcar invertida.

· En heladería, sustituimos un 25% del azúcar por azúcar invertido. Es decir, si nos indica 100 gramos de azúcar, utilizaremos 75 gramos de azúcar y 25 de azúcar invertido.

· En bollería y pastelería, sustituimos entre un 10% y un 20%, si nos indica la receta 100 gramos de azúcar, utilizaremos entre 80 y 90 gramos de azúcar y entre 20 y 10 gramos de azúcar invertido.

Para corregir el nivel de dulzor, 100 gramos de azúcar común equivalen a 77 gramos de azúcar invertido. Por lo que tendremos que multiplicar a su vez por 0,77 la cantidad de azúcar invertido que vayamos a usar.

Siguiendo con el ejemplo de la panadería, si tenemos que añadir 100 gramos de azúcar, solo añadiremos el 50%, o lo que es lo mismo 50 gramos de azúcar. Y para corregir el mayor dulzor del azúcar invertido multiplicamos los 50 gramos restantes por 0,77 y solo tendremos que añadir 38 gramos. En resumen, 100 gramos de azúcar en panadería equivalen a 50 gramos de azúcar y 38 gramos de azúcar invertido.

CONSERVACION DEL AZÚCAR INVERTIDO

Si lo conservamos en un bote hermético de cristal en la nevera, nos puede durar hasta un año. y lo podremos utilizar a las 24 horas de haberlo realizado.

COMO HACER AZÚCAR INVERTIDO

Ingredientes para 500 gr

150 g de agua embotellada
350g de azúcar blanquilla
Gasificantes: en el Mercadona los venden, un sobre blanco y otro morado
1 sobre blanco de gasificante (ácido cítrico)
1 sobre azul o morado (mercadona)de gasificante (quitando un poquito de bicarbonato -yo no quité nada y salió perfecto)

Elaboración
Pon el agua a temperatura ambiente y programa 3 minutos, 50º, velocidad 5 (la temperatura tendrá que llegar obligatoriamente a 50º).
Agrega el azúcar. Programa ahora 6 minutos, 80º en velocidad 4. (deberá alcanzar los 80º para continuar).
Añade el sobre blanco y mezcla 10 segundos en velocidad 4. 
Ahora tendremos que esperar a que la temperatura del vaso baje a 60º antes de continuar, en mi caso tuve que esperar 5 minutos. (Fíjate en la temperatura que te marca la Thermomix).
Una vez alcanzados los 60º, incorpora el sobre azul de gasificante  y mezcla 1 minuto en velocidad 4. Ya tenemos el azúcar invertido.