martes, 16 de febrero de 2016

CROISSANT

Hay dos tipos de masa hojaldrada: el croissant y el hojaldre. Estas dos masas son muy parecidas, únicamente difieren en que el hojaldre no lleva levadura y la masa para croissant sí.

La forma de trabajar las dos masas es casi idéntica. En el hojaldre se hacen 5 pliegues y en los croissants 3 pliegues. Ambas son masas que requieren tiempo y reposo, las prisas en este caso, no sirven.

A mi madre le salían unos hojaldres extraordinarios, pero yo intenté hacerlos una vez y fue un fracaso absoluto. Será el próximo reto, porque la diferencia es mínima.

Con el croissant he sufrido varios contratiempos, pero he continuado probando hasta que por fin he encontrado una receta que me ha ido bien . En todas las recetas que he encontrado por la red, los ingredientes son prácticamente idénticos: unos gramos más o menos de mantequilla, de azúcar, y unos que ponen como ingrediente líquido la leche, el agua o los dos combinados.

Lo que en verdad me ha complicado el asunto es la cuestión de los tiempos y del frío. En mi primer intento, la mantequilla estaba demasiado blanda y se salía; en el segundo demasiado fría y se cuarteaba en lugar de extenderse y formar capa. He leído por la red que la mantequilla de marca blanca da problemas. Es posible, pero tengo que decir que he usado la de Mercadona y me ha ido perfectamente.

En cuanto al amasado de la masa inicial, he de decir que el sistema de amasado de Xabier Barriga va muy bien, y si hacéis el amasado Bertinet, que es el que él utiliza, queda una masa suave y elástica y muy manejable. Yo he aprovechado que tengo thermomix, para hacer la masa con ella. Difiere un poco de la que utiliza Xabier Barriga, porque se utiliza prefermento y los tiempos de espera son más largos, pero ha salido una masa excelente, de fácil manejo y que me ha permitido hacer los pliegues con mucha facilidad. Amasar el prefermento es fácil, así que mi consejo para los que no tienen thermomix, es hacer el prefermento primero y tomar los tiempos de espera de la thermomix. Yo creo que en los reposos está el quid.

El secreto para hacer un buen croissant es que la masa ha de estar fría continuamente, por eso, después de cada paso, tendremos que dejarla reposar en el frigorífico unos 30 minutos, o en caso de que nuestra nevera esté a una temperatura por encima de los 4º, lo suficiente para que la mantequilla esté fría y dura. Si no respetamos los tiempos de refresco, nos será imposible trabajar la masa y si la mantequilla si no está fría y o está muy dura se saldrá de la masa al hacer los pliegues y estirarla con el rodillo.

La receta se elabora en dos días: el primer día se prepara el prefermento y la masa, que se deja reposar toda una noche en la nevera, y al día siguiente se preparan los croissants. El retardado en frío de la fermentación aporta más sabor a las masas. El proceso es laborioso, pero no difícil, y os aseguro que el resultado merece la pena. Nada que ver con los croissants industriales tipo Granier.

Ingredientes

500 gr. de harina de fuerza, 270 gr. de leche desnatada
18 gr. de levadura fresca de panadero
10 gr. de sal
55 gr. de azúcar
260 gr. de mantequilla para el hojaldrado
1 huevo batido con un poco de sal para pincelarlos antes de hornear Elaboración

Preparamos un prefermento para activar la levadura poniendo en la Thermomix 120 g de la harina, 100 g de la leche y toda la levadura. Programamos 10 segundos a velocidad 4. Dejamos reposar tapado dentro del vaso, hasta que doble el volumen y esté burbujeante. Añadimos el resto de la harina y de la leche, y todos los demás ingredientes, excepto la mantequilla. Programamos 6 segundos a velocidad 6 y rebañamos las paredes con la espátula. A continuación, programamos 2 minutos, vaso cerrado y velocidad espiga. Dejamos reposar la masa 10 minutos. Volvemos a programar 2 minutos, vaso cerrado y velocidad espiga, y volvemos a dejar reposar la masa 10 minutos.

Volvemos a programar 1 minuto, vaso cerrado y velocidad espiga. Dejamos reposar la masa 15 minutos. La masa ya debe estar elástica y con un buen desarrollo del gluten. Hacemos una bola, la ponemos en un cuenco ligeramente aceitado la tapamos con papel film y la dejamos en el frigorífico toda la noche. Lo ideal es preparar también la mantequilla el día anterior. Debemos formar con ella un cuadrado de unos 18-20 cm de lado, aplanándola entre dos papeles de hornear. 

Para estirar la mantequilla es mucho más efectivo hacerlo en un primer momento golpeando el rodillo sobre ella, en lugar de rodarlo, intentando que el cuadrado quede lo más regular posible. Después la guardaremos en el frigorífico hasta el día siguiente.

Al día siguiente la masa debe haber doblado de volumen, como mínimo. Si no fuera así, deja que se atempere fuera del frigorífico para que suba un poco más. Al día siguiente, empezamos con la parte más complicada de la elaboración: los pliegues. Yo he utilizado el sistema de Xabier Barriga, me parece el más sencillo:

Lo primero que haremos, será extender la masa y dejarla en reposo -estirada y tapada con papel film- en la nevera durante 10 minutos. Sacamos la mantequilla para que se atempere
Enharinamos un poco la superficie donde vamos a trabajar y sacamos la masa antes de empezar a trabajar.

Ponemos la mantequilla en el centro de la lámina de masa y la cubrimos con las dos solapas que quedan, una a cada lado. Sellamos la unión ayudándonos un poco con el rodillo, pero sin estirar.

Sellada la masa, empezamos con el estirado:

- primero desde el centro de la masa hacia la derecha
- después la otra mitad, desde el centro hacia la izquierda
- después desde el centro hacia arriba
- desde el centro hacia abajo

Plegamos la masa como la vez anterior volviendo a hacer el paquete y la dejamos enfriar 30 minutos en la nevera:
Repetiremos los estiramientos y plegados y reposos, otras dos veces.

Si observamos que al hacer los pliegues se nos rompe la masa y se sale parte de la mantequilla, y la rotura es pequeña , la tapamos con un poco de harina y continuamos trabajando. Si vemos que las roturas son abundantes, mejor tirar la masa y empezar de nuevo: algo hemos hecho mal.

Cuando hayamos terminado, si cortamos un trozo de masa por el borde, podemos apreciar las diferentes capas que se han ido formando, entre capa y capa de masa, capa de mantequilla.

Después del último reposo, sacamos la masa de la nevera y la estiramos haciendo un rectángulo, que quede como mucho de medio centímetro de grosor.

Con un cuchillo bien afilado, recortamos los bordes para igualar el rectángulo y cortamos la masa en triángulos alargados de unos 70 a 80 g. Los triángulos de 10 cm de base por 22 cm de altura, aproximadamente. Yo lo he hecho a ojo de buen cubero, y no me ha ido mal.

Simplemente distribuí la masa final en dos partes para aprovechar lo más posible, y me salieron unos croissants más pequeños, pero bien formados.

Los dejamos reposar 10 minutos en la nevera.
Procedemos a la formación de los croissants: Estiramos el triángulo tirando del vértice y en la base del triángulo hacemos un corte, cuanto más grande, más grandes nos saldrán las patas del croissant.

Enrollamos desde la base hasta la punta y los dejamos en la bandeja forrada con papel de horno bastante separados porque crecen bastante.

Los dejamos reposar a temperatura ambiente sobre unos 28º hasta que doblen casi el doble su volumen. Yo los tuve levando dos horas.

Batimos un huevo con una pizca de sal y los pincelamos para que salgan con brillo, la sal le da aún más brillo.

Con el horno precalentado a 185º los horneamos durante 20 minutos.

Dejo el enlace para el vídeo en que podéis ver como lo hace paso a paso Xabier Barriga, os resolverá muchas dudas y también un paso a paso de la elaboración.

https://www.youtube.com/watch?v=slQv5VHeO8Q













lunes, 15 de febrero de 2016

SOLOMILLO A LA PIMIENTA



Ingredientes

Filetes de solomillo de ternera, de 1,5 cts. de grosor aproximadamente
Pimienta negra
Sal
1 par de cebollas
300 gr de caldo de carne, o en su defecto, un par de cubitos Maggi
Salsa de tomate casera, 1 bote de 650 gr. Aquí
50 cl de coñac

Elaboración

Limpiamos bien todos los filetes de solomillo y salpimentamos con pimienta recién molida y sal. Es importante moler la pimienta en el momento para que no se pierda el sabor. Dejamos que tome el gusto esperando al menos 1/2 hora.

Mientras el solomillo está en reposo, partimos la cebolla en brunoise y dejamos pochar hasta que esté bien blandita. Cuando hayamos terminado, le añadimos el caldo de carne y el tomate frito y dejamos cocer al menos durante media hora. Cuando veamos que la cebolla está muy muy tierna, lo pasamos por la túrmix hasta conseguir una salsa que ha de quedar muy fina.

Freímos los filetes al punto que nos gusten y vamos colocando en una fuente honda, tomando la precaución de taparlos para que no se enfríen.

Inmediatamente antes de servirlos, cubrimos los filetes fritos con la salsa muy caliente.

En un cazo, ponemos el coñac a calentar y flambeamos echándolo sobre el solomillo cubierto por la salsa cuando aún está con la llama. Mover un poco para que el coñac se mezcle con el resto de la salsa y llevar a la mesa. Espero que os guste.
NOTA:

Es muy importante que la salsa que pongáis sea casera. Con el tomate frito comprado no sale igual, es más...yo no lo haría.
 

NATILLAS DE CHOCOLATE EN THERMOMIX


Ingredientes

650 ml. de leche
90 gr. de azúcar
30 gr. de maicena
150 gr. chocolate puro Valor
3 huevos

Elaboración

Cortamos en trozos el chocolate y lo introducimos en el vaso de la Thermomix. Trituramos en velocidad 5-7-9 durante unos segundos.

Añadimos el resto de los ingredientes.

Programamos 90º, 13 minutos, velocidad 3.

Pasado el tiempo, programamos otros dos minutos, misma velocidad, sin temperatura.

Vertemos la mezcla en una bandeja o en vasitos.

Dejamos enfriar y decoramos como más nos guste. Yo le puse merengue.

NOTA:

Como las hice a media mañana para la comida de mediodía y no enfriaban fuera, las metí cuando aún estaban templadas en el frigorífico sin tapar, por eso hizo esa capa que veis agrietada, hay que dejar que enfríe fuera y meterlas tapadas en el frigorífico para que no suceda eso.

ARROZ CON COSTILLA DE CERDO ADOBADA Y VERDURAS


Ingredientes

750 gr. de costilla de cerdo adobada
Un puñado generoso de judías verdes
2 zanahorias grandes
2 tomates medianos pelados
1/2 pimiento verde
1/2 pimiento rojo
1 cebolla
2 ajos
1 hoja de laurel
1 hebras de azafrán (podéis añadir si os gusta, un poco de colorante alimentario)
Sal
Aceite

Elaboración

En nuestra casa tanto el lomo adobado como las costillas, nunca se compran adobadas, nos gusta más el adobo que yo hago. Algunas veces hago el adobo de mi madre que es un majado de ajo con sal y pimentón, pero la mayoría de las veces prefiero hacer el que hice para las costillas, porque es más sabroso y les da un gusto más intenso.

Vais a necesitar

2 dientes de ajo
1/2 cucharadita de pimienta en grano (que moleréis al momento de hacer el adobo)
1/2 cucharadita de orégano
3 clavos
Si os gusta, una pizca de canela (no la pongo)
Una cucharada sopera de pimentón agridulce
Unas gotas de limón
Un poco de agua
Una cucharada pequeña de aceite de oliva
Sal

El adobo, es conveniente hacerlo dos o tres días antes, colocar la carne en un taper bien cerrado, y dejarlo reposar unos días en el frigorífico para que tome bien los sabores.

El día que vayamos a preparar el arroz, lo primero que haremos será sofreír la costilla con muy poca aceite y muy despacio, para que suelte la mayor parte de la grasa. No os importe si se dora algo, lo importante es que suelte cuanto más grasa, mejor, será más sano.

Ponemos en la cazuela (esta vez no la hice en la paellera, mi vitro sólo admite paellera pequeña y la arroz era consistente y abundante) una cucharada de aceite por persona. Hay quien lo hace con la aceite que sobra de freír las costillas, pero yo prefiero evitar en lo posible la grasa animal, sin duda tiene que estar rico.

Lo primero que haremos es trocear y pochar la cebolla en brunoise, y una vez que esté en su punto, agregamos los pimientos y los ajos troceados menudos dejándolos freírse hasta que se ablanden. En cuanto todo esté tierno, añadimos el tomate, -a ser posible pasado por el túrmix para que después nadie lo encuentre- y dejamos que se fría bien.

Añadimos entonces las hebras de azafrán y las verduras y lo rehogamos todo junto.

Agregamos las costillas fritas y un poco de agua y dejamos hervir a fuego lento, hasta que la costilla esté tierna. Para entonces, ya se habrá consumido el agua que pusimos y necesitaremos poner agua para que se haga el arroz

Cuando lo hago en paellera, pongo 3 medidas de agua por una de arroz, pero al hacerlo en cazuela, el agua se evapora menos y me quedó con algo de caldo. A mi personalmente, me gusta el arroz con caldo, pero si no os gusta, tendréis que ponerle algo menos de agua.

Esperamos que vuelva a hervir de nuevo y contamos de 13 a 15 minutos, dependiendo del arroz. Dejamos reposar un par de minutos y llevamos a la mesa.

FILETES DE TERNERA REBOZADOS, DE MI MADRE


Mi madre era una excelente cocinera. No hacía una cocina muy variada, pero si muy rica. Cuando ella cocinaba para nosotros, los medios eran escasos. Recuerdo incluso de verla cocinar en la cocina de carbón cuando yo era niña, hacernos churros, petisús, tortilla suprema, unos guisos exquisitos de carne y unas albóndigas buenísimas, aunque el plato estrella de sus nietos eran las croquetas y las empanadillas. Nunca me han salido como a ella, lo confieso.

Estos filetes eran un recurrente en la familia. Tienen la ventaja de que además de estar muy ricos son extremadamente sencillos y se pueden preparar con antelación y si elegimos bien la pieza, quedarán muy jugosos y tiernos. Yo he procurado enseñarlos a los cercanos, y algunos hasta de han apropiado de la receta, para mayor gloria de mi madre, porque eso quiere decir que son muy ricos.

Ingredientes

Tapilla de ternera hecha en filetes muy finos (En León la llaman Picaña, es una pieza tierna y sin infiltraciones de grasa, la mejor para hacer estos filetes aunque también sirve para asar. Es una pieza de pequeño tamaño situada en la zona exterior del cuarto trasero. Su parte estrecha es tan jugosa como el solomillo.).
Huevo para rebozar
Harina
Sal
Aceite para freír




Elaboración

Tomamos los filetes que vayamos a necesitar. (Esta pieza tiene forma triangular por lo que los filetes del principio tienen un buen tamaño, pero los de la última parte son pequeños. Yo calculo entre 150 y 200 gr por persona, depende .del comensal y sobre todo de lo que cada cual cree que debe comer). Quitamos los bordes si los tuvieran para evitar que el filete se encoja al freír y los salamos por los dos lados con cuidado de no excedernos.

Preparamos un plato con harina para rebozarlos y mientras toman el sal, vamos poniendo una sartén con aceite al fuego para que vaya tomando temperatura y aprovechamos para batir un huevo.

Cuando tengamos el aceite bien caliente (en mi vitro al 7), vamos pasando los filetes primero por harina y después por huevo. Los freímos por ambos lados -procurando no hacerlos demasiado porque se secarían- y vamos colocándolos en una cazuela que tenga tapa.

Cuando hayamos terminado de freír todos los filetes, apagamos el fuego y tapamos la cazuela con los filetes. Con el fuego residual -nunca demasiado caliente- colocamos la cazuela y dejamos que se hagan un poco. La temperatura suave y la tapa, hacen que se hagan prácticamente al vapor y suelten algo de jugo poniéndose los filetes muy tiernos.

Si no queremos prepararlos inmediatamente antes de comer, porque tenemos algún imprevisto o cualquier otra razón, éste ultimo paso lo suprimimos y lo hacemos justo antes de sentarnos a la mesa para que el filete esté en su punto de temperatura. Naturalmente, tendremos que calcular la intensidad del fuego porque ya no tenemos el fuego residual. Insisto: no poner a fuego fuerte, así no se consigue el punto.

lunes, 8 de febrero de 2016

CREMA DE PESCADO Y GAMBAS


Ingredientes (para 4 personas)

Litro y medio de agua aproximadamente
1 cucharada de sal
1 puerro
1/2 cebolla
2 zanahorias grandes
1 colita de rape
las alas y la parte inferior de la cola de una merluza
24 gambas
50 gr de aceite
Azafrán, pimienta, y pimentón (como la hice para la cena, no le puse pimentón, pero si un poco de colorante alimentario del que se pone a la paella y le dio el color que podéis apreciar)
Picatostes.

Elaboración

Yo hice primero un fumet con la espina de una merluza que compré para segundo plato y las cáscaras de las gambas y le añadí como siempre, la parte verde del puerro, sal y una hoja de laurel y lo tuve durante 20 minutos.

Cuando lo tengamos listo, colamos el caldo y ponemos el rape y la merluza y las cáscaras de las gambas con el agua y la sal en un cazo para hacer un caldo. Escurrimos, reservamos el caldo y desmenuzamos el pescado, quitando todo resto de piel y espinas.

Ahora troceamos la parte blanca del puerro, la cebolla y las zanahorias a trocitos pequeñitos.

Ponemos aceite en la sartén y sofreímos toda la verdura y las gambas ya peladas. Aliñamos al gusto con la pimienta y el azafrán. Añadir el pescado reservado.

Pasamos el contenido de la sartén al vaso de la batidora e vamos añadiendo caldo del pescado hasta conseguir la consistencia deseada. (Este paso yo lo hice en la thermomix, porque las cremas salen mucho más finas)

Servimos caliente con picatostes.

Normalmente suele sobrar algo de caldo de pescado, que podemos guardar congelado para usar para una paella o similar.

ENSALADA DE MORRO DE TERNERA


Recién llegada a Madrid, recuerdo que comí éste plato en un restaurante que estaba en los alrededores de Cea Bermúdez, si mal no recuerdo el restaurante se llamaba Edelweiss. Me encantó, aunque curiosamente no he vuelto por allí, e incluso dudo de que el mencionado restaurante exista. Después y con carácter intermitente, he repetido éste plato tal y como a mi me pareció que podía estar elaborado, aunque he tenido que esperar que mis hijos crecieran para hacerlo más a menudo, porque debido a la textura del morro, no a todo el mundo le resulta agradable. A nosotros nos encanta, es un plato fresco, ligero y sin grasa.

Ingredientes

1/2 Morro de ternera
1 cebolleta
3 huevos cocidos
Un puñado de alcaparras
Aceite
Vinagre
Sal.

Opcional: mostaza en grano

Elaboración

Lo primero que tenemos que hacer es lavar bien el morro. Se suele encontrar completamente limpio en el mercado, pero siempre es bueno darle un repaso para asegurarnos de no encontrar ninguna sorpresa.

Lo ponemos en la olla exprés entero, cubierto de agua y con sal. Lo dejamos hacerse por espacio de media hora. Transcurrido el tiempo, abrimos la olla con cuidado de no quemarnos y pinchamos el morro con un tenedor para comprobar que esté bien cocido. En general es tiempo suficiente, pero si no lo fuera podéis ponerlo y cocerlo un poco más.

Dejamos escurrir y enfriar bien el morro y cuando esté frío lo cortamos en tiras alargadas como de cm y medio de anchura.

El secreto de la ensalada está en cortar el morro con mimo, así que vamos tomando las tiras de una en una y con ayuda de unas tijeras de cocina, cortamos en filetitos muy finos - tanto como podamos- y vamos colocando en una fuente.

Picamos el huevo también muy fino. Yo lo piqué en la thermomix, 4 segundos y en velocidad 5.

Después piqué la cebolla en brunoise muy menudita y también las alcaparras. En esta ocasión, no le añadí la mostaza en grano porque no tenía, pero la podéis encontrar en Mercadona.

Añadís aceite y vinagre al gusto. A nosotros nos gustan las ensaladas muy ligeras, así que para la fuente que veis en la foto puse sólo cinco cucharadas soperas de aceite y vinagre hasta que le dio un poco de alegría. Tuve que añadirle un poco de sal para rectificar porque me quedé corta al cocer el morro.

FISUELOS DE LEON


Cuando yo era niña, por estas fechas, al salir de la escuela la maestra nos decía: Dile a tu madre que estamos en carnaval y que tiene que hacer frisuelos. Y aquí estamos, en carnaval y haciendo frisuelos para no faltar a la tradición. Esta receta que he encontrado en la red, no se parece en nada a los que hacía mi madre, más parecidos a unos churros esponjosos y mal formados en  circulo, pero no he encontrado quien me pasara la receta, asi que seguiremos la tradición, aunque no sea la que yo recuerdo.

Ingredientes

3 huevos
250 cl de leche (yo descremada porque no utilizo otra)
175 gr de harina
1 cucharadita de levadura royal
1 cucharada de azúcar
Aceite para freír
Azúcar para espolvorear

Elaboración

Mezclamos en un recipiente los huevos, la leche, la harina, una cucharada pequeña de levadura y el azúcar.

Todo en ese orden y batimos con la ayuda de una batidora hasta que te quede una masa no muy espesa (como una natilla clarita).

En una sartén con poca aceite, cuando esté caliente pero no en exceso, vamos echando la masa con una cuchara sopera y cuando estén listos y hechos por un lado, les damos la vuelta y los sacamos poniéndolos a escurrir sobre papel absorbente. Espolvoreamos con azúcar por encima, y listo!.

LENTEJAS LIGHT


Ingredientes

Lentejas
1 puerro (sólo la parte blanca)
2 zanahorias hermosas
1 ajo
4 cucharadas de aceite de oliva virgen
1 cucharadita de pimentón
1 cubito de caldo Maggi
Sal

Elaboración

Estas lentejas además de light, son rápidas para hacer y salen ricas de verdad.

Sólo tenemos que preocuparnos de ponerlas a remojo durante unas horas y con la ayuda de una olla exprés, tendremos un rico plato de legumbres saludables para una dieta completa, en poco menos de 30 minutos.

Vamos a ello, ponemos por éste orden en la olla exprés: las lentejas, el puerro picado menudito, la zanahoria limpia y en rodajitas finas, el ajo picado tan pequeñito como podamos, el aceite, el pimentón y finalmente la sal y el cubito de caldo. Tapamos la olla y ponemos al fuego. Contamos 25 minutos desde que la válvula comienza a moverse.

A mi me da resultado el bajar el fuego (en la vitrocerámica al 6) cuando la válvula empieza a moverse. De esa forma las lentejas se hacen pero no se pegan y salen luego con un caldo espesito como nos gustan en casa.

TIRAMISÚ

 
Ingredientes

250 gr. de mascarpone
2 claras
3 Yemas de huevo
3 cucharadas de azúcar
Bizcochos (puse los que llevan huevo de Gullón, los compré en Ahorra Más)
1 taza de café
50 cl. de ron

Elaboración

En un bol, batimos las claras a punto de nieve con una batidora de varillas hasta que estén muy firmes.

En otro bol aparte, batimos las yemas y el azúcar hasta que cambien de color y se forme una espuma blanquecina. Este paso debe hacerse a mano, si se hace a máquina la textura no queda igual. Es el secreto realmente el secreto de la receta, así que...¡toca hacer brazos!

Una vez que espesan las yemas añadimos poco a poco el queso mascarpone. Nunca debemos añadir todo el queso de golpe. Finalmente incorporamos las claras que se han montado previamente, también muy poco a poco. Podemos darle un toque de sabor añadiendo una cucharadita de ron, aunque yo nunca lo hago.

El paso final es preparar la salsa para impregnar los bizcochos: Yo hice tres cafés en la Nespresso, pero podemos hacer un café en la cafetera. Esperé que estuviera frío y aromaticé con el ron.

Puse el café mezclado con el ron en una fuente baja y unté los bizcochos por las dos caras, colocándolos de forma ordenada en una fuente y forré la base de la fuente con la cara con el azúcar boca abajo, hasta cubrirla por entero. Cubrí completamente con la crema y dejé enfriar durante 4 horas en el frigorífico.

A la hora de servir, espolvorearemos con un poquito de cacao.

Nota: Dependiendo del tamaño del huevos, y sobre todo si son grandes, es posible que la textura del tiramisú no sea demasiado espesa. En este caso concretamente, yo tuve que añadir una cucharadita más de Mascarpone.