jueves, 28 de diciembre de 2023

MARQUESAS


Las últimas navidades hemos ido siempre a comprar los dulces navideños a Toledo. Además de por la excelente calidad que, los dulces de la época tienen en sus confiterías, porque hacíamos un viaje en tren placentero, breve y aprovechábamos el día para pasarlo en la ciudad imperial disfrutando cada año, de uno de sus monumentos para apreciar y aprender cada detalle. 

El viaje es extremadamente cómodo, tomamos el Ave y en poco más de 20 minutos estamos allí. Recorremos la parte de Toledo que hayamos pensado ese año, comemos tranquilamente y nos paseamos fuera de Madrid, que por estas fechas está excesivamente concurrido. 

Poco antes del regreso nos acercábamos por una de las confiterías más reconocidas por la calidad de sus productos, comprábamos lo que necesitábamos y vuelta en tren a Madrid.

La verdad es que cada año consumimos menos dulces navideños, y este año, estuvimos fuera una semana y cuando recordamos que no habíamos ido, pensamos en comprar los turrones y el resto de las cosas en un buen supermercado y de marcas reconocidas. 

He de admitir sin embargo que cualquier comparación con los toledanos no tiene parecido. Ni turrones, ni almendrados, ni marquesas, ni mazapanes se acercan ni con mucho a las calidades de Toledo. Lo que toda la vida nos pareció bueno, después de probar los mejores, ya no gusta tanto.

Estos días como había comprado marquesas y no se comían, decidí ponerlas para el desayuno y al ver la diferencia, dije, bueno...voy a intentarlo, las haré en casa. Y dicho y hecho. No han salido como las de Toledo, pero desde luego infinitamente mejor que las comerciales, así que os cuento como las hice

Ingredientes

240 gramos de azúcar
La piel de 1/2 limón, (solo la parte coloreada)
250 gramos de almendra molida
40 gramos de harina de repostería
40 gramos de maicena
1 cucharadita de levadura química
4 huevos

Elaboración

Observaciones a tener en cuenta antes de comenzar:

La cantidad inicial de azúcar la dividiremos en dos partes iguales.

La primera parte la pulverizamos 20 segundos en velocidad 10 y de esa parte, retiramos un par de cucharadas de azúcar glas para la decoración.

Precalentamos el horno a 200ºC

Una vez retiradas las dos cucharadas de azúcar que hemos indicado en las observaciones, agregamos la piel de limón y pulverizamos 15 segundos en velocidad 10.

Añadimos la almendra molida, la harina, la maicena y la levadura y mezclamos 10 segundos, velocidad 10, volcamos en un cuenco y terminamos de envolver con la espátula. Reservamos.

Colocamos la mariposa en las cuchillas, ponemos los huevos y los otros 120 gr de azúcar y programamos 6 minutos, 37ºC, velocidad 3,5. 
Volvemos a programar 6 minutos, velocidad 3,5.

Incorporamos la mezcla reservada en el cuenco y mezclamos 6 segundos, velocidad 5. Terminamos de mezclar con la espátula y rellenamos las ¾ partes de las cápsulas de papel para magdalenas cuadradas o redondas.

Introducimos en el horno, bajamos la temperatura a 180ºC y horneamos durante 10 – 15 minutos 
hasta que estén doradas (en mi horno necesitaron 20 minutos hasta que cogieron color).

Espolvoreamos con el azúcar glas reservado, dejamos enfriar y servimos.

 

 

sábado, 23 de diciembre de 2023

TARTA DE NAVIDAD PARA HÉCTOR


Es cierto que a medida que cumplimos años, la Navidad, si dejamos de lado el sentido religioso de la celebración pierde de alguna forma la gracia, cuando se han perdido los padres y los familiares cercanos con los que teníamos una relación más estrecha.

Yo recuerdo aquellas navidades con mis primos, tíos y con los abuelos en torno a la mesa llenos de alegría, pero esa costumbre se ha ido perdiendo paulatinamente y, salvo excepciones, en los días señalados se reúnen los padres con los hijos y los nietos y el resto de la familia pasa a ocupar un lugar secundario.

Este año es el segundo que nosotros compartimos con nuestro nieto que empieza a disfrutar de la ilusión del árbol, el nacimiento y los villancicos. Yo voy a tratar de hacerlo disfrutar un poquito más, haciéndole una tarta que tenga todas las cosas dulces que le gustan: chocolate, nata y fresas. No se si cenando tarde llegará a disfrutarla, pero lo que si puedo asegurar es, que pensando en el, yo he disfrutado preparándola.

Y después de este preámbulo sentimental, os voy a ir contando como la he hecho.

La tarta lleva un bizcocho de chocolate, nata montada, almíbar y chocolate fundido, uno chocolate normal y el otro chocolate blanco con colorante alimentario verde.

EL BIZCOCHO

Ingredientes

4 huevos
200 gr. de azúcar
145 gr. de aceite de girasol 
200 gr. de Nesquik 
100 gr. de leche
200 gr. de harina de repostería
1 sobre de levadura Royal
azúcar glas, para decorar

Elaboración en Thermomix.

Precalentamos el horno a 180º y engrasamos 2 moldes rectangulares de 28 x 12 cm. con un anti adherente para bizcochos o bien un poco de mantequilla en las paredes . Si utilizáis un molde un poco deteriorado o liso, cubrir el fondo con papel de hornear.

Ponemos los huevos y el azúcar en el vaso. Programamos 2 minutos, a velocidad 2.

Añadimos el aceite y programamos 1 minuto, temperatura 37º y velocidad 3.

Incorporamos el Nesquik y la leche. Mezclamos durante 15 segundos, a velocidad 3.

Agregamos la harina y la levadura. Programamos 15 segundos, a velocidad 3. Terminamos de mezclarlo con la espátula.

Vertemos esta mezcla en los moldes, procurando poner la misma cantidad de masa en cada uno y horneamos durante 45 minutos, a 180º.

Sacamos del horno, dejamos que templen, desmoldamos y esperamos a que enfríen completamente.

Elaboración tradicional

Precalentamos el horno a 180 º.

En un bol ponemos los huevos y los batimos con ayuda de una batidora de varillas eléctrica. Añadimos el azúcar y continuamos batiendo hasta que la mezcla blanquee.

Incorporamos el aceite de girasol y el vino a temperatura ambiente y lo batimos un poco.

Añadimos la harina y la levadura tamizadas de dos veces, y la incorporamos a la mezcla con movimientos envolventes asegurándonos de que no quede ningún grumo.

Pintamos dos moldes  de 28 x 12 cm. con spray antiadherente o un poco de mantequilla procurando que todo el quede pintado, pero sin que haya exceso. 

Ponemos la mezcla en los moldes repartiendo la masa por igual en los dos moldes. los colocamos en el horno, durante al menos 40 minutos. Pinchamos con una aguja y si sale limpia, tenemos los bizcochos hechos.

Colocamos sobre una rejilla, y dejamos enfriar antes de desmoldar.

EL ALMIBAR

Ingredientes

150 g de agua
120-140 g de azúcar blanquilla

Elaboración

Ponemos los ingredientes en el vaso y programamos 10 minutos, 100º, velocidad 2 y esperamos a que enfríe antes de usarlo.
Dura bastante, así que como os sobrará lo podéis conservar en el frigorífico para otras tartas o bizcochos que os guste humedecer. Incluso le podéis agregar algún licor que os guste. A mi me basta sin licor, pero va en gustos.

NATA MONTADA CON THERMOMIX

Para que la nata monte bien debéis tener muy fría tanto la thermomix como la nata, lo bueno es meter el recipiente un rato en el congelador o toda la noche en el frigorífico

Ingredientes

500 g de nata para montar muy fría  35% de mg.
80 g de azúcar glas
1 cucharada de queso de untar tipo Philadelphia que nos va a servir como estabilizante para la nata, o también podemos utilizar para lo mismo, una cucharada de leche en polvo (opcional).

Elaboración

Colocamos la mariposa en las cuchillas, agitamos bien el envase de la nata y la volcamos en el vaso junto con el queso de untar -opcional- y el azúcar.

Programamos velocidad 3 ½, sin poner tiempo. Hay que estar vigilantes, mirando por el bocal y escuchando como cambia el sonido.

No programéis tiempo, hay que estar pendiente hasta que haya montado, veréis que el sonido cambia y que se forman rayas en la nata.

COBERTURA DE CHOCOLATE

Ingredientes


CHOCOLATE FONDANT (TAMBIÉN SIRVE CON 70 % DE CACAO)

150 gramos de chocolate fondant
50 g agua
50 gramos de mantequilla

CHOCOLATE BLANCO

150 g de chocolate blanco para postres
1 cucharada de sopera de aceite de girasol

ELABORACIÓN DEL CHOCOLATE FONDANT

Añadimos al vaso el chocolate y troceamos programando velocidad progresiva 2-5-7. Con la espátula bajamos el chocolate que queda en las paredes del vaso. Vertemos el agua y programamos 4 min, 37º, vel 2. Añadimos la mantequilla y programamos otros 4 min, 37º, vel 2. Comprobamos que quede una mezcla homogénea.

Debemos utilizarla inmediatamente mientras esté templada.

ELABORACION DEL CHOCOLATE BLANCO

Añadimos al vaso el chocolate y troceamos programando 20 5-7. Con la espátula bajamos el chocolate que queda en las paredes del vaso. Vertemos el aceite y ponemos 4 min, 37º, vel 2. Comprobamos que quede una mezcla homogénea.

Debemos utilizarla inmediatamente mientras esté templada.

En el caso del chocolate blanco, yo quise colorearlo porque quería poner alrededor de la casita que hice, una zona verde. Le añadí colorante verde en polvo, no os puedo indicar la cantidad. Una vez que el chocolate estaba fundido fui poniendo poco a poco, hasta conseguir el tono que quería.

EL MONTAJE DE LA TARTA

De uno de los bizcochos hice tres planchas de tamaño semejante.

Cubrí la bandeja con papel de aluminio para que no se manchara durante la elaboración, y después de terminarla la retiré.

Coloqué sobre la bandeja la primera plancha que no humedecí con almíbar para que no interfiriera después con el chocolate de cobertura verde. 

La cubrí de nata y puse otra plancha, esta vez humedecida con almíbar y cubrí con nata.

Coloqué una tercera plancha que estreché como 1 cm por cada lado, para colocar luego la parte sobre la que formé el tejado. Le puse almíbar y de nuevo una capa de nata.

Con el otro bizcocho corté una parte y formé un tejado de dos aguas, le puse almíbar para que esta parte quedara jugosa también.

Alise los bordes para que no saliera nata y pasé a cubrir toda la tarta con el chocolate fondant, alisándola con una espátula.

Una vez terminada esa parte, coloqué unos bizcochos de soletilla a modo de tejado, que se quedan pegados al chocolate.

Antes de que se empezara a endurecer totalmente el chocolate, coloqué las ventanas y las puertas que hice con galletas tostadas cuadradas que previamente había recortado con un cuchillo de sierra para que no se trocearan y decoré, como podéis ver en las imágenes que van a continuación, ayudándome de una manga con la boquilla muy fina, con chocolate verde para hacer las hojas de la puerta y los cristales de las ventanas.

Le coloqué unas bolitas de colores, simulando luces de navidad, al tun tun...sin orden, a gusto de quien la haga.

Después de este paso, es el momento de retirar el papel de aluminio, levantando la tarta con delicadeza con una espátula larga y dejándola deslizarse sobre la bandeja (es posible que en este paso, necesitéis ayuda de otra persona que sujete entre tanto la bandeja).

A continuación colocáis el chocolate coloreado verde alrededor de la casa. Y ya tenéis la tarta montada.

Para terminar, yo puse unas tartaletas rellenas de nocilla con una fresa encima y las decoré con nata alrededor. Puse unas figuras de Papá Noel que tengo de otras veces y complementé la unión del tejado adornándola con nata.

Puse azúcar glas por encima para simular nieve, y concluí la elaboración.












viernes, 22 de diciembre de 2023

BOMBONES BACI


Los bombones de chocolate y avellanas mas conocidos, son los Baci de Perugina los mas conocidos de toda Italia. 

En esta ocasión he tratado de reproducirlos en casa, la receta no parece complicada. No vamos a necesitar ni molde ni ningún artilugio especial, sólo un poco de paciencia.

Desde luego que les va a faltar el aliciente de los auténticos Baci, con su peculiar envoltura y el papelito que contiene una frase, pero lo que vamos a intentar es poder degustarlos sin necesidad de viajar a Italia.

Ingredientes

100 g de Chocolate con leche
20 g Mantequilla
Crema de avellanas 100 g
100 g de avellanas tostadas troceadas
25 g de avellanas tostadas enteras
200 g de Chocolate negro 70%

Elaboración

Troceamos el chocolate con leche y la mantequilla, los ponemos en una cazuela y los derretimos al baño baño María o en microondas. En thermomix 5 min. 50 º vel. 1.

Mientras picamos 100 g de avellanas con un cuchillo, no usamos ningún robot porque quedarían demasiado desmenuzadas o hechas polvo.

Cuando el chocolate esté listo añadimos la crema de avellanas y las avellanas troceadas. Mezclamos con una espátula y metemos en el frigorífico hasta que veamos que la mezcla se ha endurecido lo suficiente para poder manejarla sin pegarse demasiado a los dedos.

Cuando la masa esté fría tomamos pequeñas porciones y hacemos con ella una bolita, la aplastamos un poco y colocamos encima una avellana entera apretando ligeramente.

Troceamos el chocolate negro y lo fundimos al baño María, en microondas o con Thermomix 5 min. 70º velocidad uno y medio.

Luego lo ponemos en un vaso.
Pinchamos la base los bombones de chocolate y avellanas con un palillo de dientes y sumergimos cada bombón e forma que quede cubierto por todas partes.

Cuando lo sacamos, dejamos escurrir un poco y lo dejamos escurrir unos segundos y ponemos el bombón sobre papel de horno, para que escurra bien.

Cuando hayan escurrido cogemos los bombones, sin tocar los laterales, y metemos en frigorífico hasta que que endurezcan.

Cortamos papel de aluminio en cuadrado de 10x10 cm, y podemos pintar unas estrellitas con un bolígrafo indeleble. Yo envolví parte en un papel con estrellitas que encontré, pero la próxima vez pondré en todos papel de aluminio pintado, resulta mejor.
 





CONFITURA DE TOMATE EN THERMOMIX


Hace años hacía una mermelada de tomate, que era muy parecida a esta confitura.

Había exceso de tomates y de fruta en el huerto, no sabía ya que hacer con ellos para que no se perdieran y elaboré muchas mermeladas y confituras, hubo suficientes incluso para regalar.

Últimamente, me limito a preparar las que consumimos en casa, o como en este caso, si necesito algo para una preparación específica. Si hay exceso de fruta, prefiero regalarla y me ahorro el trabajo.

Esta confitura que he preparado hoy, en concreto, es para una empanada de cecina que lleva también mermelada de pimiento rojo que ya he publicado estos días, aunque como he hecho mas de la necesaria, y llega la Navidad, me servirá para algunos canapés, y si sobra, como fondo de despensa.

En el caso de las confituras las recetas aconsejan que se ponga el mismo peso de ingrediente que de azúcar, es decir si tengo 500 gr de tomate añadiremos 500 gr de azúcar, pero se puede hacer con un poco menos de esta última y además de ser más saludable, se nota más el sabor del ingrediente.

Yo le he añadido unos clavos en especie, pero si preferís podéis sustituirlos por la piel y el zumo de un limón.

Ingredientes

650 gr de tomates pelados y troceados AQUI
500 gr. de azúcar
4 clavos en especie

Elaboración

Podemos utilizar tomate entero natural del comercializado, pero mejor el tomate fresco. En caso de que os decantéis por el tomate fresco, lo primero que hay que hacer es lavar bien los tomates y pelarlos. Para pelarlos podéis, hacerles un corte en forma de cruz en la base y meterlos unos minutos en el microondas o escaldarlos un minutillo en agua hirviendo. 

Para comenzar la elaboración los troceamos un poco pero no mucho que de eso se encarga la thermomix.

Hay quien retira las pepitas pero yo se las dejo .

Ponemos los tomates en la thermomix, añadimos el azúcar y los clavos.

Programamos 20 minutos, temperatura 100º, velocidad 2. Si tienen mucha agua, le quitamos el cubilete para que evapore mejor y ponemos el cestillo en posición invertida para que no salpique.

Pasado este tiempo comprobamos como está la mermelada, a mi me quedó muy líquida así que la volví a programar 10 minutos, esta vez en temperatura varoma y velocidad 2.

El tiempo depende de la cantidad y la variedad del tomate que estemos haciendo, por ejemplo si hay menos cantidad puede que con 5 minutos en temperatura varoma sean suficientes.

Para comprobar si la mermelada está lista, como en caliente es difícil de saber, echamos una o dos cucharadas en un platito y lo metemos en el congelador para que enfríe, pasados unos minutos veremos exactamente que consistencia tiene la mermelada y podemos decidir si es necesario un poco mas de cocción.

Una vez veamos que esta lista, si no vamos a utilizarla toda, la verteremos en los tarros esterilizados, con ayuda de un embudo, hasta arriba y cerramos bien asegurándonos de que todas las tapas están puestas correctamente.

Se dejan enfriar durante al menos 24/48 horas con la tapa hacia abajo y se guardan también en esa posición

Si quieres doblar los ingredientes, porque quieres más cantidad no es necesario cambiar los tiempos ni la temperatura ni la velocidad.

EMPANADA DE CECINA DE LEON


La cecina es un tipo de carne deshidratada de origen español, similar al jamón pero realizada mediante el curado de carne de vacuno, de cerdo, de equino y menos frecuentemente, de chivo.

Las únicas cecinas que se encuentran recogidas como Indicación Geográfica Protegida son la de vaca (cecina de León) y la de chivo (cecina de Vegacervera, también en León).

La cecina de León es una variedad de cecina que se elabora en la provincia de León con carne de vacuno. Es probablemente el mejor jamón de vaca que existe en España y en el mundo y su relación calidad precio es espectacular.

En 2017, en unas excavaciones arqueológicas realizadas en la Peña del Castro, además de un almacén de semillas y cereales, se encontraron restos de carne de vaca curada datados en los primeros años de nuestra era.

La cecina aparece mencionada en diferentes relatos a lo largo de la historia. Así, Gabriel Alonso de Herrera, en su Tratado de Agricultura General, destacaba la cecina y la salazón e indicaba que se podían cecinar diversos tipos de carnes, incluyendo la de vacuno. También en el siglo XVI, la cecina de vacuno aparece mencionada entre las viandas que ofrece la mesonera de La pícara Justina.​

En el siglo XIX, Enrique Gil y Carrasco recogió las costumbres leonesas, entre las que se encontraba la producción y el consumo de cecina. A mediados del mismo siglo, y según el Diccionario geográfico -estadístico - histórico de España y sus posesiones de Ultramar, en 1835 se pagaban 6,20 reales por kg de cecina en la plaza Mayor de León, y cada habitante consumía 972 arrobas de cecina en un año.

Aparte de las menciones históricas, el ahumado de los alimentos tiene gran tradición en la provincia de León. Por ejemplo, los arrieros maragatos, que pasaban largas temporadas fuera de casa, procuraban que los víveres durasen todo lo posible, por lo que además del salado y el curado, el ahumado fue habitual como forma de conservar las carnes.

Para su elaboración, el producto debe pasar una auditoría anual que demuestre que cumple con una serie de requisitos con le confieren su exclusividad. Así, su materia prima debe ser los despieces de los cuartos traseros de ganado vacuno —tapa, contra, babilla y cadera—, de un mínimo de cinco años de edad y un peso de 400 kilos. El proceso,  consta de seis fases —perfilado, salado, lavado, asentamiento, ahumado y secado o curación.

Una vez contada la historia de partes de las costumbres relativas a la alimentación de mi tierra, paso ya a contaros los ingredientes y como se hace la empanada.

Ingredientes 

2 láminas de hojaldre
Confitura de pimientos
Confitura de tomate
cecina
1 rulo de queso de cabra
1 huevo

Elaboración

Poner el horno a precalentar por arriba y por abajo a 180º.

Poner una lámina de hojaldre en la bandeja del horno sobre un papel de hornear para que no se nos pegue.

Sobre la lámina comenzamos a rellenar la empanada, primero una capa fina de confitura de tomate y después encima, otra capa de confitura de pimientos extendidas por todo el hojaldre, dejando los bordes libres para plegarlos, a continuación la Cecina sin llegar a los bordes para poder cerrarla, por último el queso de cabra en trocitos.

Colocamos la otra lámina de hojaldre encima, y la cerramos pellizcando y cerrando todos los laterales para que no se abra.

Pintamos con huevo batido y pinchamos con ayuda de un tenedor los bordes y un poco por el centro.

Horneamos 45 min. a 180º. Dejamos enfriar y a disfrutar.








martes, 19 de diciembre de 2023

CONFITURA DE PIMIENTOS ROJOS DE FRESNO

León es una de las provincias con una de las geografías más diversas de España. Debido a eso, se cultivan una gran variedad de productos que van desde cereal, la vid, hortalizas, legumbres, lúpulo o frutas como la manzana, la pera, la cereza y otras más que se recogen siempre en periodo estival.
Es una provincia conocida por la calidad de sus productos, alrededor de los cuales se hacen incluso ferias para promocionarlos.
Uno de los más conocidos es precisamente el pimiento de Fresno, así que aprovechando alguno que tenía congelado, hoy he hecho esta confitura para preparar con posterioridad, otra delicia típicamente leonesa, una empanada de cecina.

Ingredientes

600 g de pimiento rojo
300 g de azúcar
150 g de vinagre de manzana
60 g de agua

Elaboración

Lo primero que tendremos que hacer, es limpiar los pimientos, retirando todas las pepitas y las venas, y trocearlos.

Trituramos los pimientos,15 segundos, velocidad 4-10 progresivamente.

Vamos a hacerla con el cubilete puesto para que no salpique fuera.

Bajamos con la espátula los restos que hayan quedado en las paredes.

Añadimos los demás ingredientes y programamos 35 minutos, Temperatura Varoma, giro a la izquierda, velocidad cuchara.

Ahora ponemos el cestillo.

Cuando hayamos terminado la elaboración, es conveniente triturarla si veis que quedan pedazos enteros, hasta que quede homogénea, en mi caso no ha sido necesario.

También se puede tomar como acompañamiento, está buenísima sobre queso de untar o acompañando a un asado de cerdo.

Queda bastante espesa, si la preferís más diluida basta con añadir un poquito más de agua la próxima vez.

Hare pues, una elaboración leonesa, con receta leonesa y naturalmente productos leoneses, que no es cualquier cosa.

BRIOCHE EN PANIFICADORA


Si hay algo que me guste en el desayuno es, un buen brioche, un suizo o un croissant. Claro está que, el sentido común sólo lo permite en contadas ocasiones y hoy buscando un molde me tropecé con la panificadora aparcada, y pensé que esta era una buena ocasión para hacer algo rico: un brioche.

Este brioche, que supera con mucho a la mayoría de los que he encontrado en la red en cuanto a textura y sabor, llena la casa de aroma cuando está en el horno. Es una receta que estaba olvidada y que hoy he recuperado.

La cuestión viene de la época de la pandemia, cuando aparqué la panificadora y me convertí en una panarra, porque salir, incluso a comprar el pan, tenía riesgo. Por suerte, la pasamos sin contagiarnos y hubo tiempo de aprender no sólo a hacer nuestro propio pan, sino a comprender que incluso en la cocina, hay que ser paciente y respetar los tiempos, que en mi caso, no ha sido poco.

Ingredientes


500 g. de harina de fuerza
150 g. de mantequilla blanda
100 g. de azúcar glas (la podéis hacer en la thermomix) 
una pizca de sal
25 g. de levadura fresca
4 huevos, (uno de ellos es para pintar el bollo)
130 g de leche templada

Elaboración

Sale un brioche muy grande, sube tanto que se hace grandísimo, y dura fresco varios días. Lo he amasado en la panificadora que es mucho más cómodo y más rápido.

Lo primero que hacemos es poner los huevos batidos (recordad que hay que dejar uno para pintar el bollo), el azúcar molido, la leche templada en la cubeta, y encima, que cubra toda la harina, la levadura desmigada por encima. 

Ponemos la panificadora en la tecla del programa amasado en mi panificadora que es la Philips, el programa 9. Dura un poco más de hora y media.

Cuando esté todo bien mezclado interrumpimos el programa. Añadimos la mantequilla a dados y empezamos de nuevo el ciclo de amasado desde cero.

Así conseguiremos que quede todo más integrado.

Dejamos que termine el programa de amasado con su ciclo de levado. (De 8 a 10 minutos, no más)

En ese momento podréis ver cómo ha crecido. Aún crecerá dos veces más, una cuando está en el molde y un poco más horneando.

Al acabar el ciclo sacamos la masa a la encimera que habremos enharinado ligeramente, y amasamos suavemente para sacar el aire.

Ahora preparamos un molde  y lo engrasamos con un poquito con mantequilla. Yo he utilizado un molde de los que utilizo para bizcochos, el que me pareció más alto. Tomamos porciones no muy grandes de masa y estiramos con el rodillo y luego enroscamos poniéndolos de pie en el molde. Como me salían muy altos los he cortado por la mitad, poniendo la parte cortada sobre la base del molde)

Que no sean muy anchos porque si no, se caen hacia un lado. Dejamos fermentar dentro del horno a 40º una media hora. Al cabo de ese tiempo habrá doblado su volumen.

Normalmente los hago más gorditos, pero hoy he querido probar haciéndolos más finos. Queda mejor presentado si hacemos menos rollos y más anchos.

Lo sacamos del horno y subimos la temperatura a 180º solo calor abajo o solo aire para los hornos que tengan esta opción.

Pintamos el bollo con el huevo batido que nos habíamos guardado al principio.

Metemos el bollo al horno en la rejilla del medio. Yo he necesitado cuarenta minutos hasta que lo he pinchado y salía limpio. A media cocción lo he tapado con una hoja de papel de aluminio porque se tuesta demasiado por arriba.

Desmoldamos cuando esté templado.











jueves, 7 de diciembre de 2023

FOCACCIA DULCE CON NUTELLA

 

Hoy he preparado una focaccia dulce, rellena de nocilla, un dulce fácil de preparar en Thermomix. La focaccia dulce se puede rellenar de tantas cosas como os gusten: podéis ponerle dulce de membrillo, cabello de ángel, una mermelada...dulce de leche, en fin, todo aquello que siendo dulce, dé cierta jugosidad a la masa de la focaccia. Yo he puesto Nocilla, porque en esta casa gusta mucho todo lo que huela a chocolate. Como es la primera vez que la hacía, puse una capa de nocilla fina, pensando que con la cocción podría salirse. La próxima vez pondré más, no se salió nada.

Ingredientes

500 g de harina de fuerza
1 pizca de sal
60 g de azúcar
15 g de levadura fresca de panadero
300 g de leche templada
Nocilla (sin grasa de palma, fundamental)
30 g de mantequilla fundida
Azúcar glas

Elaboración

Ponemos en el vaso la harina, un poco de sal, el azúcar, la levadura y la leche. Mezclamos 2 minutos, vaso cerrado, velocidad espiga.

Sacamos la masa del vaso y lo ponemos en un bol amplio pincelado con aceite. Lo cubrimos con film transparente. Dejamos levar al menos 60 minutos.

Pasado ese tiempo dividimos la masa en dos. Extendemos una de esas partes sobre una lámina de papel de horno hasta conseguir una lámina de unos 30×40 centímetros aproximadamente. Podemos extenderla con las manos, no hace falta rodillo.

Pinchamos esa masa con un tenedor y ponemos sobre ella la nocilla, extendiéndola con ayuda de una cuchara.

Extendemos ahora la otra porción de masa, igual que hemos hecho con la primera. La colocamos sobre la anterior, sobre la nocilla, y sellamos bien los bordes.

Pintamos la superficie con la mantequilla fundida y hacemos algunos cortes con un cuchillo afilado.

Horneamos a 180º (horno precalentado) durante 30 minutos aproximadamente.

Servimos caliente o fría. Si la servimos fría podemos cubrir la superficie con un poco de azúcar glas.






GRATINADO DE BACALAO CON PATATAS


Ingredientes para 3 personas
300 g de bacalao desalado en migas
3 patatas medianas
1 cebolla mediana
2 huevos
Aceite de oliva virgen extra
Sal y pimienta negra
Salsa bechamel ligera

Ingredientes para la bechamel

35 g de aceite de oliva virgen
35 g de harina
300 de leche
Pimienta, nuez moscada y sal al gusto.

Queda una bechamel muy líquida, pero no debe preocuparos, mientras estáis preparando el resto de la receta, al enfriar, quedará en el punto justo para que podáis utilizarla como indica la receta

Elaboración

Desalamos el bacalao durante 12-24 h (según tamaño) en agua. En mi caso he utilizado migas ya desaladas previamente, se suelen encontrar en todos los supermercados, en la pescadería.

Cocemos las patatas con su piel, las pelamos y cortamos en rodajas de 1 cm. aproximadamente.

Separamos las claras de las yemas y batimos las claras a punto de nieve con unas gotas de limón. Reservamos

Preparamos una bechamel tradicional con las cantidades que indico en los ingredientes.

En una cazuela al fuego con un fondo de aceite rehogamos la cebolla picada fina en juliana.

Cuando veamos que está pochada añadimos el bacalao, removemos un minuto y añadimos las patatas que tenemos cortadas en rodajas.

Salteamos todo junto un momento y apartamos del fuego.

Mezclamos las claras batidas con la mitad de la bechamel y añadimos a la mezcla de patatas y bacalao. Lo mezclamos bien y ponemos en la bandeja en que vamos a servir el plato.

Mezclamos la otra mitad de la bechamel con las yemas batiendo muy bien y ponemos por encima de las patatas con bacalao.

Gratinamos bajo el grill a 250º unos 10 minutos, o según el horno, lo justo para que dore la superficie. Mi plato tardó algo más, pero tenéis que vigilar para que quede en su punto a partir de los 10 minutos.

Servimos al momento.





HUEVOS AL PLATO


A mi me sucede, que según temporadas, repito mucho un plato. Después, pasan al olvido sin explicación hasta que te lo recuerdan. En esta ocasión estaba pensando en la cena y desde luego ni por un momento tenía proyecto de poner huevos. Mi hija que está en casa ayudándome a preparar la decoración de Navidad y acompañándonos a otras cosas, me dijo: recuerdo de cuando estábamos los cuatro en casa hacías huevos al plato y nos encantaban...y cena resuelta!. 

El único problema fue que, hacía tanto que no los hacía que no encontraba los platos apropiados, pero finalmente, ¡aparecieron!

Aquí os dejo una cena rápida y rica.

Ingredientes

Tomate frito casero AQUI
1 huevo por comensal
1 lata de guisantes en conserva pequeño (éramos 3 personas)
3 rodajas de chorizo cortadas muy finas por comensal, o un puñadito de tacos de jamón serrano o 1 loncha de jamón serrano, o de York, a vuestra elección.

Elaboración

En un recipiente apropiado para hacer huevos al plato - (en mi caso es de acero inoxidable, pero os servirá uno de barro apto para horno, o incluso, si la tenéis, una cocotte del tamaño adecuado) - cubrís el fondo con la salsa de tomate frito, las rodajas de chorizo o jamón y un puñado de guisantes.

Una vez colocados todos estos ingredientes, ponéis sobre ellos la clara de huevo y  ponéis en horno precalentado a 200º. 

Cuando veáis que la clara ya está prácticamente cuajada, abrís el horno y ponéis la yema, sobre cada clara. 

De esa forma evitaréis que la yema quede cuajada en exceso y la clara quede hecha. Cuando haya cuajado como os gusta, sacáis con cuidado del horno para no quemaros, ponéis sobre un plato y a la mesa.

Es una cena rápida y muy rica

lunes, 4 de diciembre de 2023

CONEJO CON TOMATE


El conejo es una carne blanca, suave y con poca grasa. Ideal para incorporarla en el menú si hacemos dieta, si queremos hacer un exquisito guiso, o preparar arroces o salsas. Depende de cómo lo preparemos cumplirá un objetivo u otro. Hoy preparamos conejo con tomate, que es un guiso delicioso y sencillo de preparar. En este caso, la receta consiste en un guiso de toda la vida con sus verduras y con su rica salsa que se puede acompañar con unas patatas o con un buen trozo de pan. También es importante que sepamos que los guisos con conejo quedan más buenos si se preparan de un día para otro.

Ingredientes para 4 personas

1 conejo troceado
1 cebolla
1 pimiento verde italiano
Salsa de tomate
Caldo de pollo
Vino blanco
Aceite de oliva virgen extra
Sal y pimienta al gusto
1 diente de ajo

Elaboración

Comenzamos friendo bien las tajadas de conejo para que tomen buen color. Para ello las ponemos en una cacerola con cuatro cucharadas de aceite de oliva y un diente de ajo fileteado. Cuando se doren, reservamos las piezas..

En la misma cacerola donde hemos frito el conejo, ponemos una cebolla muy bien picada en brunoise y añadimos seguidamente el pimiento verde también muy picado. Agregamos la salsa de tomate frito y dejamos que todo se sofría un par de minutos.

Añadimos las tajadas de conejo, el caldo y el vino, dejando que el guiso se vaya haciendo a fuego lento. Para evitar salpicaduras, ponemos la tapa a la cacerola, removiendo de vez en cuando para que no se agarre. Tras unos 30 minutos de cocción estará perfecto de punto.

Si lo hacéis en olla rápida, 8 minutos serán suficientes.

Para conseguir una salsa tan espesa como la que veis y que estaba riquísima, bastará con que después de comprobar que sean correctos tanto el punto de sal como de cocción, dejéis unos minutos sobre el fuego haciendo chup-chup.

No lo acompañe con patatas porque el pan fue suficiente compañía.

sábado, 2 de diciembre de 2023

ESTOFADO DE TERNERA CON TOMATE, ZANAHORIA Y PATATAS


Ingredientes

500 g de ternera para estofado (Yo elegí de la parte de la cadera)
500 ml de caldo de carne (Puse caldo del cocido que hice esta semana)
1 ajo grande
1 cebolla
2 zanahorias grandes
150 g de tomate natural triturado
150 ml de vino tinto (sino tenéis abierta ninguna botella, podéis poner cualquier vino de guisar que no sea blanco)
1 hoja de laurel
1 poquito de romero (lo ideal es fresco, pero no tengo aquí)
2 patatas
Harina de trigo para pasar la carne
Aceite de oliva virgen extra
Pimienta negra
Sal

Elaboración

Salpimentamos los trozos no muy pequeños de ternera. Si estamos indecisos preguntamos al carnicero que carne es la más indicada, pero puede ser cadera, morcillo o cualquier parte de las jugosas que sirva para el estofado, ellos saben seguro que parte es la mejor.

Cubrimos el fondo de una cazuela con aceite de oliva virgen extra. Pasamos por harina los trozos de carne y los doramos en el aceite.

Una vez dorados los sacamos y reservamos.

En el mismo aceite echamos el ajo picado, a mi en este caso no me gusta hacerlo menudo porque se puede quemar con facilidad.

Cuando empiece a dorarse echamos la cebolla bien troceada, salamos ligeramente y sofreímos unos 10 minutos.

Incorporamos las zanahorias peladas y cortadas en trozos no muy pequeños, porque queremos que se cocinen pero que no se deshagan durante el cocinado.

Sofreímos 5 minutos y echamos el tomate triturado. Sofreímos 10 minutos a fuego fuerte.

Pasado el tiempo vertemos el vino y reducimos 5 minutos más a fuego fuerte.

Volvemos a echar la carne a la cacerola con los jugos que haya soltado, cubrimos con el caldo de carne y removemos.

Incorporamos una hoja de laurel y una ramita de romero (no tenía y puse seco), tapamos y dejamos cocinar a fuego bajo durante 1 hora y media.

Cuando falten 20 minutos para finalizar el tiempo añadimos 2 o 3 patatas, dependiendo del tamaño. Las vamos a chascar en trozos no muy pequeños para que no se deshagan.

Tapamos y dejamos que finalice el tiempo de cocción. Antes servir, debemos pinchar con un cuchillo un trozo de carne para comprobar que está tierna.

Mi carne era muy tierna y yo opté por hacerla en la olla rápida. Todos los pasos son exactamente los mismos, salvo agregar las patatas. Yo las agregué antes de cerrar la olla, los tiempos de cocción en olla rápida tanto para la ternera como para las patatas son muy similares, varían dos minutos. Me arriesgué y puse los 8 minutos que marca para las patatas que era el tiempo más largo. Gané la apuesta, las patatas quedaron enteras como podéis ver en la foto y con un sabor buenísimo.

La salsa, como siempre suele suceder en la olla rápida, queda muy ligera y a mi me gusta que me quede un poco melosa. Para eso, después de despresurizar la olla, dejé que diera un hervor hasta que vi que había espesado. Si elegís esta opción, vigilar constantemente el guiso, la salsa tiene la harina de rebozar la carne y tomate, así que es posible que si os descuidáis, se os pegue.

Os diré que en casa tuvo más éxito la guarnición que la propia carne, y la salsa es justamente apropiada para los muy paneros como mi hijo.