sábado, 31 de diciembre de 2016

TARTA TATIN


Esta es una tarta perfecta para los amantes de las tartas de frutas, de todas las tartas es mi predilecta, nunca resisto la tentación y tomo un trozo aunque no debería hacerlo. Simplemente el día que la tomo, lo hago con precaución y suprimo otros alimentos que se transformen en azúcar, así voy consiguiendo mantener mis niveles de glucosa. No he probado nunca a sustituir el azúcar por stevia o natreen, simplemente tomo menos de lo que me gustaría, pero me doy el lujo de comer algo rico. Mi médico dice que un día no pasa nada y que jamás debemos sustituir los postres hechos en casa por los preparados para diabéticos que hay en el mercado.

Ingredientes:
Para la masa


50 gr. almendra cruda
100 gr. harina todo uso
75 gr. mantequilla fría
75 gr. azúcar glas
1 yema
1/2 cta. vainilla
1/2 cta. sal

Para el relleno

7 manzanas Golden, las mías pesaban 1,700 kg
160 gr. Azúcar
50 gr. mantequilla
Una pizca de canela
el zumo de un limón y medio

Sobre la receta base, que llevaba ralladura de un limón y el zumo de medio, sustituí todo por zumo de limón y medio que utilicé para ir rociando las manzanas a medida que las iba pelando para evitar que se oxidaran, para que no estuviera la manzana ácida añadí 2 cucharadas soperas más de azúcar al momento de hacerlas.

Elaboración de la masa en thermomix

Colocamos el azúcar, en la thermomix y la molemos durante unos segundos a velocidad progresiva, 5,7,9. Reservamos.

Moler la almendra, 10 seg. vel.10. Despegar del fondo un poco. Yo me ahorré ese paso puesto que puse almendra molida
Añadimos la harina, la mantequilla, el azúcar glas, la yema, la vainilla y la sal, 10 seg. vel.6. Formar una bola, envolver en papel film y dejar reposar en la nevera.

Como podréis observar, en este caso, la thermomix sólo acorta los tiempos pero teniendo azúcar glas en casa (Mercadona) y la almendra molida, la podéis hacer perfectamente sin necesidad de la maquinita y estará igual de buena.

Elaboración del relleno

Pelar y cortar las manzanas en cuartos, las colocamos en una sartén (yo las puse en un wok porque es más espacioso y a la hora de moverlas no se destrozan), junto al azúcar, la mantequilla, la canela, y el zumo de limón y cocemos a fuego suave 15-20 minutos, removiendo con cuidado varias veces con una espátula. Cuando las manzanas ya están blanditas, subir el fuego y dorar hasta conseguir un color caramelo, las mías quedaron pálidas y sólo tomaron color al hacer la tarta en el horno.
Engrasamos un molde Pírex con mantequilla abundante, y vamos colocando las manzanas ya hechas con el lado curvo hacia abajo apretándolas entre si.

Precalentamos el horno a 180º.

Sobre un papel de hornear, espolvorear harina y estirar la masa dándole la forma del molde, pasando suavemente el rodillo, no hace falta que quede perfecta, se parchea y listo.

Llevar la masa con el papel y la colocamos sobre las manzanas para despegar suavemente la masa sobre las manzanas (al dar la vuelta y levantar el papel y se irá despegando la masa).

Remetemos los bordes bajándolos con el dedo.
Horneamos 30 minutos, o hasta que la masa comience a dorarse. Desmoldar dando la vuelta como si fuera una tortilla sobre una bandeja, cuando esté templada para no quemaros. Ya sabéis que en caso de esta tarta, debe quedar a la vista la parte de la manzana, como veis en la imagen. Lo bueno de esta tarta es tomarla un poco caliente, pero yo siempre la preparo el día anterior y la saco un poco antes de servirla del frigorífico y está buenísima.

Elaboración tradicional

Únicamente pongo la de la masa de almendra, puesto que el resto de la tarta se hace sin la thermomix

Moler la almendra bien fina con un molinillo o adquirirla ya molida.
Añadir la harina, mantequilla, azúcar glas, yema, vainilla y sal, y mezclar bien.. Formar una bola, envolver en film y llevar a la nevera.


COCHINILLO AL HORNO


Ingredientes para 5 personas

½ cochinillo (éste pesaba 2,600 kg)
Aceite de oliva o manteca de cerdo para pintar el cochinillo
4 hojas de laurel.
3 ajos
1 ramillete de perejil

Elaboración

Debemos pedir al carnicero, que parta el cochinillo por la mitad longitudinalmente. Es la única forma de asarlo perfectamente por el escaso espacio de los hornos caseros. Si tenéis que hacer un cochinillo entero, pedir que os lo corten en cuatro piezas.

Precalentamos el horno a 170 grados con el ventilador. Es fundamental utilizar la función ventilador para hacer este asado, porque abrevia los tiempos de asado. Si tu horno no lo tiene, el asado tardará entre 4 horas y media y 5 en estar terminado.

Yo suelo prepararlo la noche anterior untando, si la tengo, con manteca de cerdo o bien con aceite de oliva, - queda rico igualmente-, y un majado con el ajo, el perejil y la sal para que tome bien los sabores.

Lo unto bien por la parte interior del bicho, y por la piel. Me gusta más hacerlo con manteca porque al ponerlo por la noche en el frigorífico, se mantiene fija tanto sobre la piel como por dentro, y me evito tener que volver a pintarlo al momento de ponerlo en el horno.

Si lo hacéis con aceite poned sobre la piel unas gotas de aceite de oliva y extenderlo bien por todo el cochinillo.
Llenamos la bandeja del horno de agua hasta que cubra 3/4 partes de su capacidad, le añadimos unas hojas de laurel y colocamos en la parte de abajo del horno. Si os gusta podéis ponerle también un poco de tomillo y romero fresco como sustitución del ajo y el perejil, en esta ocasión yo no tenía en casa, pero quedó muy rico.

Colocamos el cochinillo con la piel hacia abajo en la rejilla del horno y ponéis la rejilla en la primera altura que tengáis sobre el agua.

Horneamos el cochinillo en dos fases.

Durante 1 hora y 45 minutos a 170º, con el modo ventilador y calor arriba y abajo. Es importante –insisto- colocar la bandeja en la parte baja del horno.

Siempre debe haber agua en la bandeja. Si vemos que durante el horneado se va evaporando, añadimos un vaso de agua más.
Pasado ese tiempo, sacamos el cochinillo del horno y lo ponemos con la piel hacia arriba, Si observamos que la piel se ha secado demasiado pintamos un poco con aceite de oliva, en mi caso no fue necesario.

No olvidéis que la bandeja siempre debe tener agua .

Subimos la temperatura del horno a 220º.
Volvemos a meter el cochinillo en el horno y lo dejamos durante 45 minutos más o hasta que veas que la piel está dorada y crujiente.

Lo ideal es servir el cochinillo acompañado de unas patatas panaderas, o de una salsa de manzanas. Nosotros lo comimos sólo porque no tuve tiempo de hacer ninguna de las dos cosas y las echamos en falta, aunque debo decir que prácticamente lo terminamos.

Si antes vais a tomar unos entrantes, apagar el horno y dejar el cochinillo dentro para que no pierda calor.
Es importante el tamaño del cochinillo para conseguir un asado perfecto. No debe sobrepasar los 5 kg.
La piel debe quedar crujiente. Estará en su punto cuando al golpearla con un cuchillo, se rompa.

Si no queréis que las patas y la cabeza se os tuesten demasiado, podéis envolverlas en papel de aluminio cuando le dais la vuelta

Si os apetece con salsa de manzana lo haréis así:

1 cebolla
2 manzanas
75 ml. de vino blanco

Con un poco de aceite, sofreímos la cebolla, picada muy finita. Pelamos y cortamos las manzanas en trozos no demasiado pequeños. Cuando la cebolla está dorada, añadimos las manzanas a la sartén. Ponemos un poco de sal. Esperamos que queden blanditas pero no deshechas y, añadimos el vino blanco y un poco de agua. Dejamos que se reduzca la salsa durante unos minutos y ya estará lista. En nuestra casa somos más de patata panadera.

CREMA DE ZANAHORIA Y BROCOLI


Ingredientes para la crema

3 cucharadas soperas de aceite
60 g de cebolla
350 g de brócoli (1 brócoli entero)
150 g de zanahoria pelada
350 g de agua
1 cucharadita de sal
1 pizca de pimienta molida
Picatostes tostados o fritos

Elaboración

Ponemos el aceite y la cebolla pelada y cortada en cuartos en el vaso. Programamos 3 segundos, velocidad 4.

Con la espátula bajamos los restos y programamos 4 minutos, temperatura 100 ºC, velocidad 1.

Añadimos las verduras bien lavadas y cortadas en trozos junto con el agua, la sal y la pimienta. Programamos 25 minutos, temperatura 100 ºC, velocidad 1.

En mi caso he utilizado verduras congeladas de nuestro huerto. No he variado en nada la receta, salvo que he dejado la verdura fuera del congelador mientras preparaba el resto de los ingredientes y la he incorporado después de freír la cebolla. He añadido 5 minutos más a la cocción y ha quedado perfecta.

Cuando terminamos, trituramos 10 segundos, velocidad progresiva 5-10, o bien hasta que hayamos logrado la textura que nos gusta. Si vemos que nos ha quedado demasiado espesa, añadimos agua y volvemos a mezclar a velocidad 10, probamos y dejamos reposar un rato para que esté a buena temperatura para comer y el agua añadida, no haga que pierda sabor la crema.

Sirve con picatostes. En esta ocasión los he puesto fritos bien escurridos en papel de cocina, pero si queréis restar más calorías está igual de buena con picatostes tostados.

Si además sois de los que les gusta darle un sabor diferente, le podéis añadir al momento de comer un chorrito de aceite de oliva y orégano, aunque yo la prefiero tal cual.

lunes, 19 de diciembre de 2016

BACALAO CON COSTRA

Antes de explicar la elaboración, señalar que tengo perjudicada mi maquina de fotos, y que en las ultimas recetas están hechas con el teléfono, por lo tanto, carecen del color y la calidad que sería deseable.

Ingredientes

Bacalao
Patatas
Pimiento rojo fresco
Cebolla
Mayonesa
Aceite
Sal

Elaboración

Para esta receta he utilizado bacalao seco y como era muy grueso, lo he tenido desalando durante cuatro días en el frigorífico, cambiándole el agua 1 vez al día. La receta se puede hacer también con bacalao fresco, congelado o cualquier otro pescado blanco, con lo que os podéis ahorrar el paso más largo. De todas formas, a nosotros nos gusta este tipo de bacalao y al punto de sal, cada cual ha de encontrar el suyo.

Si elegís el bacalao desalado, es el momento de colocar en un escurridor para que suelte el agua mientras hacemos los primeros pasos del plato.

Precalentar el horno a 250º.

Para empezar la elaboración y dependiendo de los comensales, peláis unas patatas y las cortáis en rodajas no demasiado finas, las saláis y las ponéis a freír en aceite bien caliente (al 9), para que no se llenen de aceite. Una vez que ha empezado la fritura bajáis la temperatura de forma que la patata se haga bien por dentro pero no quede crujiente (al 7), y cuando estén hechas, las vais colocando a capas sobre una fuente que pueda ir al horno, procurando escurrir bien el aceite para que el plato resulte ligero.

Laváis bien el pimiento y lo vais cortando en aros muy finitos. No demasiado pimiento. Yo puse la mitad de un pimiento morrón grande.

Hacéis lo mismo con la cebolla. Puse la mitad de una cebolla mediana. Los freís juntos hasta que estén blanditos pero no dorados y colocáis sobre el lecho de patatas fritas.

Colocáis los trozos del bacalao sobre el conjunto y cubrís con la mayonesa.

Lo metéis al horno y vigiláis porque el tiempo depende del grosor del bacalao. Yo lo tuve 10 minutos, pero era grueso, quedo en su justo punto aunque tuve que poner un papel de aluminio a los cinco minutos para evitar que se quemara la costra. Quedó muy rico y es una forma diferente de comer el bacalao. Os animo a probarlo.



martes, 15 de noviembre de 2016

PATATAS CON COSTILLA, ARROZ Y GUISANTES

Por aquí se dice que del cerdo se aprovechan hasta los andares. Hoy toca una parte del cerdo que se presta a muchas formas de hacer en la cocina. En mi tierra, es habitual que estas partes menos nobles del cerdo se adoben y se curen al humo, en lugar de al aire como sería lo más común. La costilla, el espinazo, el rabo, se pueden meter también en el Botillo, un plato muy tradicional en León. A mi sin embargo me gusta más con arroz o con patatas como es el caso. Un plato que merece la pena probar y que es bueno para cuando ya empieza a refrescar.

Ingredientes

9 trocitos de costilla
Patatas
Pimiento verde o rojo
2 Puñados de arroz
150 gr de guisantes congelados
2 ajos
Un ramillete de perejil
1 hoja de laurel
1 cucharadita de pimentón
Aceite de oliva

Elaboración

Lo primero que tenemos que hacer es lavar bien la costilla con agua templada para retirar un poco el adobo. La escurrimos bien, y ponemos una sartén con un poco de aceite -casi nada-, para sofreír allí la costilla, dejándola que se dore y suelte la grasa que pueda tener. Reservamos.

En una cazuela cubrimos el fondo con aceite de oliva y cuando esté caliente, agregamos los pimientos troceados y los salteamos. Cuando estén en su punto, añadimos el pimentón y freímos con cuidado de que no se nos queme. En la vitro, lo mejor que podéis hacer para evitarlo, es retirar la cazuela y dejar que el pimentón se fría fuera del fuego, así evitaréis que se queme.

Agregamos rápidamente las patatas troceadas/escachadas, y freímos un poco todo el conjunto.

Añadimos un poco de agua para que no se queme nada y hacemos un majado con el ajo, el perejil y la sal.

Incorporamos la costilla frita.

Cubrimos todo con agua, y ponemos una hoja de laurel, dejamos hacer hasta que veamos que la costilla está cocida, porque las patatas están hechas en media hora.

Los guisantes los suelo poner congelados pero los cuezo antes de incorporarlos al guiso aprovechando, generalmente, que hay que añadirle agua incluyendo el agua de su cocción.

En ese mismo momento, agregamos el arroz y pasados 15 minutos el plato está hecho.

Deberá quedar un caldito espeso por el almidón de la patata y el del arroz, si no fuera así, lo más probable es que esté falto de sal, probadlo y si está bien, aumentar la intensidad del fuego y dejarlo dar un hervor rápido con cuidado de que no se os queme.

Buen provecho!

lunes, 14 de noviembre de 2016

QUICHE LORRAINE A MI ESTILO



Ingredientes
Para la masa quebrada


150 gr de harina
75 gr de mantequilla en trozos muy fría
40 gr de agua
½ cucharadita de sal
Molde de 26 cm de diámetro

Para el relleno de quiche

1/2 cebolla grande cortada en brunoisse
Una cajita con 200 gr de bacon en tiras (Mercadona)
Una cajita de jamón york en taquitos (Mercadona)
200 gr de nata o leche evaporada
150 gr de queso rallado
4 huevos
Sal y pimienta al gusto
Aceite para pochar la cebolla

Elaboración

Podéis utilizar, cualquier masa quebrada de las que hay elaboradas, pero yo prefiero hacerla en casa porque en la thermomix no da nada que hacer y sale muy rica y del tamaño adecuado al molde que utilizo. Las que se compran suelen ser para mi gusto algo pequeñas y esta quiche está mejor si queda un poco alta.

Para la masa quebrada en la thermomix:

Ponemos todos los ingredientes de la masa en el orden en el que aparecen y damos unos golpes de turbo o mezcla 15 segundos en velocidad 6. Haz una bola y si la masa está muy blanda la metemos en el frigo 10-15 minutos envuelta en film transparente.

Sobre la encimera enharinada, estiramos la masa muy fina y forramos un molde de quiche, pincha la masa con un tenedor en su base -no en las paredes- y horneamos 15 minutos a 180º con calor arriba y abajo. Reservamos.

Para hacer el relleno de la quiche:

En una sartén pochamos la cebolla y cuando esté pochada, añadimos el bacón para que se sofría un poco. Ponemos sobre un escurridor para que quede la menor cantidad de grasa posible.

Batimos los huevos, los mezclamos con la nata y o volcamos sobre la masa precocida.

Añadimos la cebolla pochada y los tacos de jamón york. Mis tacos de jamón eran demasiado gruesos por lo que yo los trocee un poco.

Distribuimos todo por la quiche de forma que quede lo mas igual posible.

Cubrimos con el queso rallado, y horneamos nuevamente unos 20-25 minutos a 180º con calor arriba y abajo. Comprobamos que está cuajada metiendo un palillo.


 

TRUCHAS CON SOPAS

 En León por suerte, quedan muchos ríos en los que aún se pueden pescar truchas. Cada vez menos, es verdad, la intervención de pescadores furtivos que además utilizan métodos prohibidos obstaculiza la acción de ICONA, el  organismo encargado de conservar en lo posible, el medio ambiente.  Para nuestra desgracia, esto ha contribuído al crecimiento desmesurado de algunas especies de caza y no ha mejorado en demasía los rios.
Cuando era niña, había varias especies en el río: barbos, gallegos y cangrejo que desapareció con la introducción del cangrejo americano, (trajo enfermedades que terminaron con los autóctonos, que se reproducían más lentamente pero eran infinitamente más ricos), y recuerdo escuchar a mi padre que cuando el, era joven, había incluso anguilas. 
Para pescar cangrejos, eran necesarios pocos útiles, simplemente ibas a bañarte al río y si metías la mano debajo de las piedras, encontrabas cangrejos suficientes para hacer un arroz. Curiosamente ese tipo de pesca, que practicábamos casi todos los niños, no afectaba a la abundancia de la especie 

En la actualidad en el río Órbigo, únicamente está permitida la pesca deportiva, que obliga a devolver al río los ejemplares capturados, a fin de conseguir una recuperación de la especie.

Por eso que ahora, se comen truchas compradas en una piscifactoría que utiliza agua del mismo río. Puede parecer mentira, pero existe una gran diferencia con la trucha que puedes comprar en cualquier pescadería de Madrid.

Sabido es que el hombre siempre ha sabido utilizar sus recursos más próximos para alimentarse, y en mi tierra no iban a ser menos. En la utilización de este plato que viene de antiguo, se utilizan dos ingredientes fundamentales: pan y truchas.

Ingredientes:

1 trucha hermosa (ésta pesó 600 gr.)
Pan del día anterior (si es de hogaza, mejor)
Aceite
Ajos
Perejil
Pimentón
1 hoja de laurel
Sal

Elaboración

Limpiamos bien la trucha, retirando vísceras y agallas y partimos en dos trozos.
En una cazuela de barro, hacemos el pan en lonchas finas (sopas)
y dejamos en reserva.
En otra cazuela de las que habitualmente utilizamos para cocinar, ponemos agua siempre adecuando la cantidad al tamaño de la trucha que vamos a hacer, de forma que la cubra.
Añadimos 3 cucharadas de aceite, 1/2 cucharada de pimentón (si es un poco picante, mejor) y un majado con el ajo, el perejil y la sal que añadiremos al agua con la hoja de laurel.

Cuando el agua rompa a hervir, colocamos la trucha y dejamos cocer hasta que esté hecha, con cuidado de no pasarnos.

Cuando veamos que está hecha, separamos con cuidado y colocamos encima de las sopas que tenemos en la cazuela de barro.
Volcamos el caldo dejando que se empapen bien las sopas,  y a comer!!
                                   

MORCILLO GUISADO


Ingredientes (2 pers.)

1/2 kg de morcillo troceado
3 cucharadas de aceite
1/2 cebolla troceada en gajos finos
2 ajos pequeños
1 ramillete de perejil
Sal
1 hoja de laurel
1/2 vaso de agua de Vino de Pedro Ximénez
1 patata grande para guarnición

Elaboración

Sofreímos la cebolla sin dejar que se dore en exceso.

Mientras se sofríe, preparamos el majado con los ajos, el perejil y la sal.

Añadimos la carne y la sellamos bien, para que retenga los jugos.

Ponemos el vino de Pedro Ximénez en el mortero, y revolvemos para volcar el majado sobre la carne una vez sellada.

Añadimos la hoja de laurel y tapamos.

Dejamos que se haga a fuego lento hasta que la carne esté blanda.

Este vino, le da ese dorado color apetitoso a la carne, pero es fundamental que se haga despacio sin que se consuman el vino ni los jugos de la carne, que se unirán a la cebolla que como hemos dorado se funde con los jugos.

Yo lo tuve 2 horas haciéndose.

Poco antes de llevar a la mesa, pelamos la patata y la troceamos. Se puede hacer con un molde redondo, pero a mi no me gusta desperdiciar nada, así que la hice en cuadraditos como podéis observar. Se fríen las patatas en aceite bien caliente dejando que tomen algo de color, y las ponemos en la cazuela en que hemos guisado la carne para que den un hervor por espacio de 3 o 5 minutos, sin subir el fuego. De esa manera, absorben parte de la salsa y con ello el sabor del guiso.

En casa, gustan bastante más las patatas que la carne...

domingo, 16 de octubre de 2016

TALLARINES CON GAMBAS AL AJILLO


Ingredientes

120 gr. de tallarines de "El Pavo"
1 paquete de gambas congeladas (las mías, de Mercadona) (*)
2 ajos grandecitos
2 guindillas
Aceite de oliva
Sal

Elaboración

Fileteamos los ajos y los doramos en aceite en una cazuela, (yo mido siempre la aceite, puse 3 cucharadas soperas), junto con las guindillas. Cuando veamos que empiezan a dorarse los ajos, añadimos las gambas previamente descongeladas y bien escurridas, y un poco de sal. Las rehogamos y rápidamente bajamos el fuego y dejamos haciendo unos minutos con la cazuela tapada para que las gambas suelten el jugo.

En una cazuela aparte ponemos el agua con sal y cuando rompa el hervor, añadimos los tallarines. En casa gustan al dente, así es que los tuve cociendo durante 8 minutos.

Escurrimos los tallarines y volcamos en la cazuela donde ya tenemos hechas las gambas, dejamos que absorban el jugo que han soltado y rápidamente llevamos a la mesa.


(*) Para vuestro conocimiento, muchas de las gambas peladas que se venden congeladas, vienen con sal, por lo que no tendremos que ponérselo hasta comprobar el punto.

CARRILLADA DE CERDO CON CHAMPIÑONES


La carrillada es una de las carnes más jugosas y más versátiles a la hora de prepararla. Admite toda suerte de especias, verduras, y formas de elaboración, y de todas formas está igualmente sabrosa. Esta es una de las formas de hacerla que más me gustan porque tiene un sabor muy fino y el champiñón le aporta ligereza.

Ingredientes

1 kg de carrillada de cerdo
4 dientes de ajo
aceite de oliva
½ kg de champiñones
½ vaso de vino blanco
1 vaso de agua
½ vaso de salsa de tomate

Elaboración

Lo primero que hemos de hacer es limpiar bien la carrillada, descartando toda la grasa y las pieles que la recubren y a continuación la troceamos.

Laminamos y limpiamos bien los champiñones y los dejamos en reserva.

Laminamos los dientes de ajo y los ponemos a dorar en una olla con el aceite.

Una vez dorados los dientes de ajo, añadimos la y la sellamos.

Agregamos los champiñones y doramos, le añadimos entonces el vino y cuando se haya consumido el alcohol, le agregamos la salsa de tomate y el agua. Dejamos hacer hasta que la salsa espese.

De una hora a tres cuartos más ó menos, según nos guste de tierna la carne.

ROLLO DE CARNE DE TERNERA CON MANZANA Y PASAS

 
Ingredientes (con estas cantidades hice 2 rollos)
Para el rollo

500 gr. de carne picada
1 huevo
1 cebolla
1 manzana
40 gr. de pasas
30 gr. de pan rallado
1 cucharada de curry en polvo
Sal y pimienta

Para la salsa

1 cebolla
2 zanahorias
1 ajo
Aceite de oliva
Perejil
Una cucharada rasa de harina
½ vaso de vino
Sal y pimienta

Elaboración

Ponemos en un cuenco toda la carne picada con el huevo batido, la cebolla picada muy fina y pochada, la manzana rallada menudita, las pasas remojadas en agua, el pan rallado y el curry. Salpimentamos y formamos un rollo que quede compacto.

Enharinamos.

En una sartén amplia, ponemos abundante aceite y cuando esté bien caliente freímos a fuego fuerte el rollo (en la vitro al 9 al ponerla y luego bajarla al 7) para que se dore por todos los lados, teniendo cuidado de que no se rompa al darle la vuelta. Una vez bien dorado lo sacamos a un plato aparte.

En una cazuela y con parte del aceite en que doramos los rollos, echamos la cebolla, la zanahoria y el ajo picados lo rehogamos y dejamos que se vaya haciendo a fuego medio.

Agregamos el perejil picado y la harina y mezclamos bien. Incorporamos el vino, la sal y un vaso grande de agua y removemos.

Volvemos a poner el rollo de carne en esta salsa y lo dejamos cocer despacio durante unos 30 minutos, dándole la vuelta dos o tres veces durante su cocción.

Pasado este tiempo, sacamos el rollo a una tabla de cocina y trituramos la salsa con la batidora.

Servimos la carne cortada en rodajas gruesas y acompañada de la salsa. Está muy rica.


TARTA DE QUESO TIPO CAÑADIO


Esta tarta es un logro de mi hija, que dispuesta a independizarse, se ha puesto a cocinar con éxito y esta tarta es una muestra de ello. No se por qué extraña razón no puede incluirla ella en el blog a pesar de tener acceso, así que yo contribuyo poniéndola y además, me quedo con las ganas de probarla. Las tartas de queso me gustan todas, pero esta tiene una pinta espectacular.

Ingredientes:

1 rulo de galletas María.
125 g de mantequilla.
½ kg de requesón.
1 tarro grande de leche condensada.
1 tarrina de queso Philadelphia.
5 huevos.

Preparación:

Moler las galletas y mezclándolas bien con la mantequilla derretida.
Con ayuda de los dedos, ponemos toda la mezcla en la base del molde desmontable y metemos al horno a 180ºC unos 10 minutos hasta que veáis que está un poco doradito.
Utilizando un robot de cocina o batidora, mezclamos el resto de los ingredientes intentando que no quede ningún grumo en la mezcla.
Una vez la mezcla esté lista, la volcamos al molde encima de la base de galletas y metemos al horno, a 180º unos 45 minutos. Si vemos que se está tostando demasiado, la cubrimos con un papel de aluminio para evitar que se queme.
La clave de esta tarta es que quede jugosa por lo que no debemos esperar a que esté totalmente cuajada. ¿Cómo cuando está en su punto? Pinchamos con un cuchillo o algún otro objeto punzante, si al sacarlo, está un poco manchado, es el momento de retirarla del horno.

Mi hija la tuvo 50 minutos, pero la tarta del Restaurante Cañadio está menos cuajada por dentro, por eso pongo 45 minutos, creo que son más que suficientes.

Si os gustan las tartas de queso cubiertas, podéis hacer un coulis o una mermelada de frambuesa o de fresa, pero os aseguro que en este caso, no es necesario.


jueves, 15 de septiembre de 2016

ROLLO DE BONITO DE MARIA JOSE

En quince días he hecho dos veces rollo de bonito. El primero lo hice un poco al libre albedrío, porque resultó que de la receta que me dio Mª José, me faltaban algunos ingredientes. Hoy por fin, hemos comido el auténtico, con la salvedad de que yo no lo hice en salsa verde, porque el jefe entre las dos posibilidades eligió ésta salsa.

Ingredientes para el rollo

3/4 kg de bonito limpio, sin piel ni espinas
2 huevos cocidos
1 bote de aceitunas pequeño (Mercadona)
1 bote de cebolla frita (Mercadona)
1 huevo entero
Dos rebanadas de pan sin corteza, empapado de leche
1 pimiento asado
Un puñado de gambas al ajillo con una guindilla (opcional, yo no las puse)
Sal

Ingredientes para la salsa

1 bote de tomate frito Aquí
1 bote de pisto Aquí
1 chorrito de salsa de soja

Elaboración

Con la experiencia del rollo anterior, pude darme cuenta de que para la formación del rollo, no era suficiente con trocear menudo el bonito por eso hice uso -una vez más-, del mejor auxiliar de mi cocina, la thermomix y después de trocear el bonito coloqué en ella y por este orden los ingredientes:

- el bonito troceado
- el pan empapado en leche y escurrido
- los dos huevos cocidos
- la cebolla frita
- las aceitunas
- el huevo entero
- la sal

Tríturé la mezcla a velocidad 6 durante 8 segundos, y quedo la masa tal cual la veis en las fotos. (Después del texto, podéis ver un paso a paso)

El pimiento, lo troceé con un cuchillo porque al ser asado pensé que quedaría molido y no quería eso.

Continué amasando con ayuda de un tenedor hasta integrar el pimiento y comencé con la formación del rollo. Extendí un trozo de papel film, lo cubrí de harina y fui colocando la mezcla para formar el rollo y enharinarlo para freírlo.

No he sido nunca muy hábil en la elaboración de rollos tanto de carne como de pescado, siempre se me desmoronaban al momento de pasarlos a la sartén hasta que descubrí un par de trucos que sirven para las dos clases de rollo.

Primero, tanto el pescado como la carne, tendrán que estar bien triturados y la mezcla suficientemente consistente.

Segundo, si hacemos un rollo de un tamaño considerable (con éstas cantidades me han salido dos, y cada uno da para 4 personas), no hay espátula ni útil de cocina, capaz de permitir trasladar el rollo para sofreírlo sin que se desmorone.

Para apretarlo bien, hay quien utiliza aluminio, pero a mi me gusta más trabajar con el papel film porque, entre otras cosas, me permite ver en todo momento como va de prieto el rollo y después, retorciendo el papel por los extremos, consigo una forma correcta. Además, ayudándome de un pincel de silicona puedo retirar el exceso de harina que queda adherido al rollo.

Descubrí que colocando un papel de aluminio al borde del papel film y deslizando el rollo hasta el papel de aluminio, se podía trasladar cómodamente sujetándolo por los extremos, dejándolo caer con cuidado en la sartén para no quemarnos, sin que se deforme lo más mínimo.

Seguimos con la elaboración del rollo. Ponemos una sartén en la que entre bien el rollo con abundante aceite caliente y freímos el rollo por todos los lados. Reservamos y freímos el siguiente.

Para la salsa que yo hice, utilicé un bote de salsa de tomate frito casero y un bote de pisto. Trituré todo junto y le añadí un chorrito de salsa de soja. Dejé hervir allí el rollo durante 15 minutos.

La próxima vez lo haré con salsa verde, fue como lo puso Mª José y estaba riquísimo. Si os decidís a prepararlo, no os decepcionará.
 











MERMELADA DE FRESAS


La prolongación de este verano tan caluroso, ha hecho que las fresas, este año por lo menos, dieran dos cosechas. La mermelada de fresa es quizá mi preferida, así que ya que estamos en racha, hoy tocó de fresas.

Ingredientes

500 gr de fresas limpias
250 gr de azúcar
1 limón sin piel ni nada de la parte blanca y sin pepitas.

Elaboración

Colocamos todos los ingredientes en la thermomix, y trituramos en velocidad progresiva, 5/7/9 unos segundos.

Programamos 40 minutos, temperatura Varoma, velocidad 2 y cubrimos la tapa con el cestillo.

Una vez terminado el tiempo comprobáis si la queréis así o más espesa, si la preferís más espesa añadir unos minutos más, pero no demasiados porque se pegaría al fondo.

Colocáis en tarros esterilizados, cerráis herméticamente y los colocáis boca abajo durante al menos, 24 horas. Se hará el vacío y no requerirá por tanto, la esterilización como en otro tipo de conserva. Esta indicación, sirve para todas las mermeladas.

Dos advertencias, la primera, la mermelada de fresa suele saltar demasiado, de ahí la indicación de que cubráis la tapa de la thermomix con el cestillo. No sirve el cubilete, porque no se evaporaría el líquido. La segunda advertencia es que no cambiéis las cantidades de fruta, la fresa al alcanzar una temperatura muy alta, hace espuma y rebosará incluso por encima del cestillo.

MERMELADA DE NARANJA Y MANZANA

Tenía en el frutero media docena de naranjas de zumo que estaban a punto de estropearse. Con el viento que ha hecho éstos últimos días se habían caído un par de manzanas reinetas que de momento están demasiado verdes para poder comerlas, así que en un arranque de "todo o nada", hice una mermelada que ha resultado rica y novedosa. Dos por el precio de uno: no he tenido que desechar nada y además tengo 3 estupendos tarros de mermelada.

Ingredientes

3 naranjas de zumo grandecitas
1 manzana reineta
1 limón
400 gr de azúcar *.

* En la mayoría de las recetas de mermeladas, se aconseja que la cantidad de azúcar que se emplee sea aproximadamente igual al peso de la fruta. Así lo he hecho durante mucho tiempo, pero ahora he restringido en gran medida todo lo que lleva azúcar, y de hecho, yo no desayuno una tostada con mermelada, desayuno una tostada a la que le enseño la mermelada.

Por esa razón, todas las mermeladas que hago tienen menos de la mitad del peso de la fruta, pero si alguien se puede permitir el lujo de tomar azúcar, os animo a que la hagáis con las cantidades aconsejadas por los expertos. Puedo decir, eso si, que las mías están muy ricas y se conservan perfectamente, aunque necesitan un poco más de tiempo de cocción para espesar.

Elaboración

Retiramos la piel del limón procurando que no le quede nada de la parte blanca, lo troceamos y retiramos todas las pepitas.

Lavamos muy bien las naranjas con agua, las secamos y sin pelarlas las partimos en cuartos o como nos guste más, quitando también todas las pepitas.

Lavamos la manzana de igual forma, la descorazonamos y la partimos en cuartos.

Colocamos en la thermomix.

Añadimos el azúcar.

Trituramos en velocidad progresiva 5/7/9 durante unos segundos hasta que veamos que no se aprecian trozos grandes sobre todo de la piel de la naranja.

Programamos, 30 minutos, 100º, velocidad 2. Los ingredientes de esta mermelada tienen más fibra, queda más espesa que puede quedar la de cualquier otra fruta por eso necesita únicamente 30 minutos.

En cuanto termina la thermomix, colocáis la mermelada en los tarros esterilizados y tapáis asegurándoos bien de que queden bien cerrados. Ponéis los botes boca abajo, y los teneis en esa posición durante al menos 24 horas. Mermelada lista!

CREMA DE ZANAHORIA AL CURRY


Ingredientes

150 gramos de cebolla en cuartos.
5 gramos de aceite de oliva.
600 gramos de zanahorias peladas y cortadas en rodajas.
200 gramos de patatas peladas y en trozos.
800 gramos de agua, o caldo de verduras si tenemos.
2 pellizcos de curry en polvo.
1 pastilla de caldo Maggi
Sal
1 cucharada de nata liquida.
Pimienta molida.

Elaboración en Thermomix

Ponemos en el vaso la cebolla y el aceite, troceamos 3 segundos/ vel. 4. y sofreímos 5 minutos / Varoma/ vel. 1.

Seguidamente incorporamos las zanahorias y las patatas troceadas y rehogamos 2 min/ Varoma/ vel. 1

Añadimos el agua, el curry, la pastilla de caldo, la sal y programamos 25 minutos/ 100 grados/ vel. 1.

Esperamos unos minutos a que baje la temperatura y trituramos 1 minuto/ vel. progresiva 5 – 10.

Comprobamos que la crema quede con la textura que nos gusta y si fuera necesario, le añadimos algo más de agua o caldo de verduras. Servimos la crema decorada con un chorrito de nata y espolvoreamos con pimienta si nos gusta.

lunes, 12 de septiembre de 2016

MERMELADA DE FRAMBUESAS


Con la llegada del otoño el frambueso está cargado, y dado que la frambuesa no es una fruta que se conserve muchos días, este año, he decidido convertirlas en mermelada.

Hice dos tandas en la thermomix con las mismas cantidades, de una de ellas hice confitura y de la otra mermelada.

La confitura queda más espesa que la mermelada y sirve mejor para rellenar pastas o tartas. La única diferencia en la elaboración fue que para la confitura puse 45 minutos y temperatura Varoma y a esa temperatura el agua se evapora más, pero los ingredientes fueron exactamente iguales.

Os advierto, que lo habitual es que la mermelada lleve siempre la misma cantidad de azúcar que de fruta, pero yo siempre lo hago con la mitad e incluso menos azúcar. Primero porque es más saludable y segundo porque para el desayuno me gusta que la tostada tenga una capa muy fina de mermelada, lo imprescindible para que le dé algo de sabor pero nada más. Salen estupendas y se conservan muy bien, y por supuesto no tienen nada que ver con las mermeladas que se compran llenas de espesantes, acidulantes y estabilizantes.

Son “absolutamente ecológicas”, y se conservan durante varios años. A mí se me “traspapelaron” algunas de hace 5 años y la estamos desayunando este verano.

Ingredientes

500 g. de frambuesas.
250 g de azúcar
1 limón sin piel ni parte blanca, retiradas las pepitas.

Elaboración en Thermomix

Colocamos todo en el vaso y trituramos unos segundos a Velocidad 6.
Programamos 45 minutos, temperatura 100º, velocidad 2
Elaboración Tradicional

Poner a macerar las frambuesas con el limón cortado en trozos pequeños y el azúcar blanco.

Ponemos la fruta con el azúcar y el zumo de limón, ponerlo al fuego hasta que hierva, remover continuamente, dejar que se vaya evaporando el agua, hasta que vaya espesando.

Colocamos en los tarros esterilizados en agua hirviendo durante 5 minutos. Rellenamos con la mermelada, cerramos los tarros y los colocamos boca abajo para que se haga el vacío

sábado, 3 de septiembre de 2016

ROLLO DE BONITO FRESCO

 
Hace unos días estuvimos visitando a nuestros primos en Gijón. Fueron días de compartir en familia en todos los aspectos, pero vine con una receta de rollo de bonito un plato tradicional de la cocina asturiana, preparado con bonito fresco. Mi idea era hacer el mismo rollo porque estaba realmente rico, pero al comprar el bonito olvidé un par de ingredientes que habitualmente tengo en casa, pero hoy no. Ya con la idea de hacer un rollo probé con éste. Ni por asomo tiene la presentación ni el sabor del que tomamos en su casa, pero hice un rollo, que era la intención inicial.

El próximo día que compre bonito, caerá con seguridad el rollo de María José, hoy no pudo ser.

Ingredientes:

700 g bonito fresco, limpio de espinas

1 pimiento rojo asado grandecito
2 cebollas
Perejil
Dos dientes de ajo
Un vaso de vino blanco seco
1pimiento
3/4  kg de tomate
2 huevos
Dos rebanadas de pan de molde
Media cucharada de pan rallado, aceite, sal.

Elaboración


Si ya tenemos el bonito limpio, se pica menudito. Creo que por cómo quedó, (lo piqué como si fuera para albóndigas), quedó poco picado, más menudito hará que el tronco quede más compacto y que el corte resulte mejor.

Cortamos una cebolla en brunoise y se sofríe con el ajo y el perejil

En un bol vamos poniendo el bonito, la cebolla pochada, los huevos, el pimiento asado troceado pequeño,  la sal, y un poco de pan rallado. Mezclamos todo.

Empapamos las dos rebanadas de pan de molde ligeramente en vino, y amasamos todo hasta que esté bien mezclado, quitando cualquier hilo que pueda tener el bonito.

Sobre una superficie lisa enharinada, se forma el rollo. Yo puse papel de aluminio y lo enhariné. Primero dividí la masa en tres porciones, y formé con cada porción, una albóndiga gigante que enhariné antes de extender sobre el papel de aluminio.

Una vez colocada una porción sobre el papel de aluminio, vamos dándole forma a la vez que apretamos la masa ayudándonos con el aluminio. Si vemos que queda excesivamente enharinado retiramos la harina sobrante.

Para llevarlo a la sartén para freír, os tendréis que ayudar de una espátula bastante grande, y así evitaréis que se os abra. Se dora el rollo en aceite bien caliente, y se le va dando vuelta hasta que quede bien sellado todo el rollo y  dorado para que quede por dentro jugoso.


Así hacemos con los otros dos rollos restantes y los reservamos

Para hacer la salsa, preparamos un sofrito con la otra cebolla, el pimiento, y el tomate.

Cuando veamos que ya está bien frito, añadimos el vino blanco.

Colocamos los rollos en una cazuela bien amplia y cubrimos con la salsa que hemos preparado. Yo lo tuve cociendo a fuego lento, 15 minutos y quedó en su punto.

















martes, 23 de agosto de 2016

COCA DE LLANDA


La “Coca de llanda”, es la receta del bizcocho más popular de la Comunidad Valenciana, su nombre de llanda es porque se hacía en un molde rectangular de hojalata.
Es muy popular tanto en las fiestas, para desayunar o merendar y en las fiestas de niños con un buen chocolate.
Como toda receta popular tiene muchísimas variaciones, podemos sustituir parte de la leche por naranja, mezcla de naranja y pomelo, con calabaza, sustituir 50 g de harina por 50g de chocolate puro, y nos queda como un brownie.

Ingredientes

200 gr de azúcar
La corteza de un limón sin parte blanca
3 huevos medianos
150 ml de aceite de girasol
150 ml de zumo de naranja natural
250 ml de leche entera, semi o desnatada
400 gr de harina de trigo de repostería
(Si queréis hacer bizcocho SIN GLUTEN usáis 250 gr de harina de arroz y 150 gr de maicena en lugar de la harina de trigo)
1 sobre de levadura Royal.
Azúcar y canela para decorar

1 Molde de 36 x 23cm aproximadamente

Preparación

Precalentamos el horno a 180ºC con calor arriba y abajo. Ponemos en el vaso el azúcar blanco y pulverizamos 15 segundos a velocidad progresiva 5-10. Añadimos la corteza del limón y repetimos lo mismo, otros 10-15 segundos en velocidad progresiva 5-10.

Incorporamos los huevos y programamos 3 minutos, temperatura 37º, velocidad 3. Cuando acabe el tiempo volvemos a programar otros 3 minutos en velocidad 3, sin temperatura.
Agregamos el aceite, el zumo de naranja y la leche en el vaso y mezclamos 15 segundos en velocidad 3.

Ponemos la harina y la levadura Royal y mezclamos 10 segundos en velocidad 4.
Ponemos la mezcla en un molde rectangular forrado de papel de hornear o untamos el molde con mantequilla. Espolvoreamos por encima con azúcar y canela y hornea unos 35 minutos a 180ºC con calor arriba y abajo hasta que esté cocido.
Comprobamos que está bien hecho pinchando con un palillo en la masa, si sale seco es que ya está cocido.
Retiramos la Coca de Llanda del horno y dejamos reposar unos 30 minutos antes de cortar o desmoldar.