domingo, 26 de febrero de 2023

PASTEL DE CREMA BÁVARA DE YOGUR Y NARANJA EN THERMOMIX

Ayer sábado comimos en casa de nuestra hija. Siempre que vamos nos sorprende con una comida rica, así que le pido que me pase la receta para colocarla en el blog y repetirla en casa. Ya puse el primer y segundo plato de ayer que estaban buenísimos, pero el postre fue la guinda, por lo rico y lo fresco que resultó y la presentación que hizo.


Ingredientes

1 plancha de bizcocho genovés de aproximadamente Ø18 cm x 1,5 cm de grosor, dependerá del molde que tengáis a mano.

Crema de yogur

3 hojas de gelatina
200 g de nata (35% de grasa)
200 g de yogur natural
40 g de azúcar glas
1 cucharadita de vainilla líquida

Mousse de yogur y naranja

3 hojas de gelatina
170 g de nata (35% de grasa)
120 g de zumo de naranja recién exprimido (sin pulpa)
25 g de azúcar glas
170 g de yogur natural

Gelatina de naranja

3 hojas de gelatina
200 g de zumo de naranja recién exprimido (sin pulpa)
60 g de azúcar glas
1 - 2 naranjas en rodajas de 5 mm y cada rodaja, en cuartos

Elaboración

Forramos la base de un molde desmontable con papel de hornear. Colocamos una tira de papel de hornear o de acetato en la pared del molde, para salvaguardar la forma. Introducimos la plancha de bizcocho genovés en la base del molde y reservamos.

Crema de yogur

Ponemos 3 hojas de gelatina en un bol, cubrimos con agua y reservamos.

Ponemos la nata, el yogur, el azúcar glas y la vainilla líquida y programamos  6 min/80°C/vel 3.

Añadimos la gelatina hidratada y escurrida y mezclamos 10 seg/vel 3. Retiramos a un bol y dejamos templar (aprox. 20 minutos). Ponemos la crema templada sobre el bizcocho y reservamos en el frigorífico durante 3 horas. Mientras tanto, lavamos el vaso.

Mousse de yogur y naranja

Ponemos 3 hojas de gelatina en un bol, cubrimos con agua y reservamos.

Colocamos la mariposa en las cuchillas. Ponemos en el vaso la nata y, sin programar tiempo, montamos a vel 3 hasta que esté montada pero cremosa. Retiramos la mariposa. Vertimos en un bol grande y reservamos en el frigorífico.

Os recuerdo que para que la nata monte bien, siempre ha de estar muy fría.

Ponemos en el vaso el zumo de naranja y el azúcar glas y programamos 3 min/80°C/vel 3.

Incorporamos la gelatina hidratada y escurrida y mezclamos 10 seg/vel 3.

Añadimos el yogur y mezclamos 20 seg/vel 4. Retiramos a un bol y dejamos templar (aprox. 20 minutos).

Incorporamos 2-3 cucharadas de crema de yogur y naranja a la nata montada y, con la espátula o con unas varillas, mezclamos con movimientos envolventes hasta conseguir una mezcla homogénea. Repetimos el proceso hasta incorporar toda la crema.

Retiramos el molde del frigorífico. Ponemos la mousse de yogur de naranja sobre la crema y reservamos en el frigorífico durante 3 horas. Mientras tanto, lavamos el vaso.

Gelatina de naranja

Ponemos 3 hojas de gelatina en un bol, cubrimos con agua y reservamos.

Ponemos en el vaso el zumo de naranja y el azúcar glas y programamos 5 min/80°C/vel 3.

Incorporamos la gelatina hidratada y escurrida y mezclamos 10 seg/vel 3. Retiramos a un bol y dejamos templar (aprox. 20 minutos). Después, colocamos la gelatina de naranja sobre la mousse y reservamos en el frigorífico durante un mínimo de 6 horas.

Retiramos el molde del frigorífico, lo colocamos sobre un plato para servir y, con cuidado, lo desmoldamos. Decoramos y servimos 
Este es el corte y abajo, la mezcla de la crema con que se cubre.

 

POLLO AL LIMÓN AL ESTILO CHINO

Ingredientes

4 medias pechugas pollo
100 ml. salsa soja
2 huevos 
50 gr. maicena
2 cucharadas de  levadura seca (8 gr.)
Aceite de oliva

Para la salsa de limón

Zumo 1 limón (40 ml)
350 ml. caldo de pollo o carne, el que tengáis en casa.
50 gr. azúcar
25 gr. maicena
4 rodajas limón
Sal

Elaboración

Cortamos las pechugas por la mitad longitudinalmente.

Las colocamos en un recipiente, echamos la salsa de soja y dejamos marinar los filetes en la nevera media hora. 

Preparamos la salsa de limón, mezclando todos los ingredientes con una batidora (menos las rodajas de limón). Ponemos la mezcla en una sartén con las rodajas y dejamos cocinar hasta que de el primer hervor, reservamos. 

Batimos los huevos con la maicena y levadura.

Sacamos los filetes de la nevera, los secamos con papel de cocina y los pasamos  por la mezcla de huevo y maicena. 

Los freímos 3 minutos por cada lado, escurriendo bien el huevo para evitar que los filetes al freírse hagan puntilla; (tienen que quedar crujientes y dorados, pero jugosos en el centro, así es que hay que tener en cuenta el grosor de los filetes). 

Colocamos sobre papel absorbente para quitar el exceso de grasa y incorporamos a la salsa de limón.
Damos  un calentón a todo junto para que armonicen los sabores (el rebozado del pollo se impregnará con la salsa).

NOTA: 

Es posible que la salsa os espese demasiado, si eso ocurriera, antes de poner los filetes de pollo dentro, la podéis aclarar con un poco de caldo del que habéis utilizado. Hacerlo poquito a poco, para que la salsa no quede excesivamente ligera.

SOPA DE AJO ESTILO VANESSA EN THERMOMIX

Nunca, desde mi primera cena en el internado donde cené sopa de ajo y chicharro, allá en el siglo pasado, han sido las sopas de ajo santo de mi devoción, si en cambio, la sopa castellana que se come en Segovia, o las sopa de leche que hacía mi madre y que yo hago los días de frío invernal. Pero esta modalidad que nos hizo mi hija ayer, me ha encantado, incluso hubiera repetido, cosa rara en mi a estas alturas. Pero el menú se presentaba apetitoso y no caí en la tentación.

¿El truco? Pues todo queda en familia. Nuestra sobrina Vanessa, se lo contó a mi hija y es algo que debemos agradecerle, porque salió buenísima. Vamos a ver cómo y de que forma se hacen.

Ingredientes

8 - 10 dientes de ajo
100 g de aceite de oliva
100 g de jamón curado en dados (opcional)
1 cucharada de pimentón
1500 g de agua
2 pastillas de caldo
2 huevos
100 g de pan (en lascas finas)

Elaboración

Ponemos en el vaso de la thermomix los ajos y el aceite y pique 2 seg/vel 7.
Añadimos el jamón y, sin poner el cubilete, sofreímos 8 min/Temperatura Varoma/vel cuchara.
Agregamos el pimentón y rehogamos 30 seg/Temperatura Varoma/vel velocidad cuchara.
Añadimos el agua y las pastillas de caldo y programamos 20 min/100°C/vel 1.
Incorporamos los huevos y mezclamos 5 seg/vel 2.
Añada el pan y mezcle 2 seg/giro a la izquierda/vel 4. Dejamos reposar unos minutos dentro del vaso y sirva inmediatamente.

Hasta aquí la receta de la Thermomix, ahora viene el secreto de Vanessa, sencillo pero que convierte la sopa de ajo común en un plato agradable al paladar y de una textura increíble. 

Suficiente y tan sencillo, como poner la Thermomix, en velocidad progresiva 5, 7 ,9 durante uno o dos minutos o hasta que veamos que la crema queda suave y fina.


jueves, 23 de febrero de 2023

MATAMARIDOS

Hay algunas recetas que reciben nombres curiosos. El pescado en blanco, pescadilla en blanco, o guiso en blanco, es una misma preparación que es tradicional de Andalucía y es una especie de sopa de pescado con verduras.

El nombre que se le da se debe a que en tiempos de escasez se hacía con las espinas del pescado con lo que el guiso tenía muy poca comida, y que si se le ponía muchas veces a la misma persona tras volver del campo, tras un día de trabajo duro, era un “matamario” por la poca sustancia del plato.

Es un plato perfecto para nuestros días, en que muchos de nosotros tenemos trabajos sedentarios y necesitamos recetas nutritivas pero ligeras, como el matamaridos. Entre sus otras virtudes, está que es fácil de preparar, bastante rápido y es una manera de introducir el pescado en nuestro día a día. Concretamente, merluza o pescadilla, que son dos pescados relativamente baratos.

Ingredientes para 4 personas

300 g de lomos de pescadilla o merluza limpios de espina y piel
2 patatas medianas
1/2 cebolla
1/2 pimiento rojo
2 tomates enteros naturales de bote ( Aqui)
2 zanahorias medianas
2 dientes de ajo
½ limón
Perejil fresco picado
Aceite de oliva
Sal

Elaboración

Ponemos en una cazuela la cebolla, el pimiento rojo, los tomates, los dientes de ajo pelados.

Pelamos, cortamos la zanahoria y la añadimos al resto de las verduras.

Pelamos las patatas y vamos cascándolas en trozos del tamaño bocado sobre la cazuela.

Cubrimos con agua, salamos, añadimos un chorro de aceite y calentarnos a fuego alto. Cuando empiece a hervir, bajamos el fuego y dejamos que se cueza todo unos 25 minutos, o hasta que las patatas y la zanahoria estén blandas.

Retiramos la cazuela del fuego y sacamos la cebolla, los tomates y los dientes de ajo a un vaso batidor. Si gusta el sabor a pimiento, ponerlo entero; si se quiere más suave, añadir solo la mitad. Trituramos con batidora, lo añadimos al guiso y volvemos a ponerlo al fuego.

Cuando hierva otra vez, añadimos el pescado cortado en trocitos, un chorro de zumo de limón y un poco de perejil picado. Tapar y dejar que el pescado se cocine con el calor residual durante 5 minutos.

NOTA:
Como es la primera vez que lo he hecho, trocee las verduras como si fuera a sofreírlas en trozos pequeñitos, pero este guiso requiere justamente lo contrario. Mi consejo es que si lo pensáis hacer, las troceéis en pedazos grandes, para que al momento de retirarlas para batirlas, os resulte más fácil. Eso si, como la zanahoria es más dura que la patata, lo mejor es trocearla en rodajitas finas. El guiso está, buenísimo y además es saludable. 





 

miércoles, 22 de febrero de 2023

TALLARINES CON HUEVO FRITO


 
No se si a todo el mundo le sucede lo que a mi, pero de un par de años para acá, necesito comer menos cantidad y variar mucho de menú. Si exceptuamos la fruta fresca que es mi gran debilidad, (una comida sin fruta, no es comida para mi), me aburre bastante, pensar qué comer cada día.

Hoy he hecho tallarines, la pasta me suele gustar y procuro ponerla al menos una vez por semana de distintas formas. Hoy la hice con un huevo frito. Pensé que iba a ser un plato demasiado simple, pero curiosamente estaba rico y gustó.

Ingredientes para 2 personas

150 g de tallarines
2 huevos
2 dientes de ajo
3 guindillas secas
4 cucharadas de queso rallado (parmesano, manchego o el que sea)
Sal y pimienta negra
½ limón y perejil picado (opcionales, yo no puse el limón)

Elaboración

Ponemos a calentar agua abundante con sal en una cazuela.

Mientras el agua se calienta, pelamos los dientes de ajo, le retiramos el germen para que no repitan y los aplastamos con el lado de un cuchillo. Cortamos la guindilla en trozos grandes.

Ponemos a calentar en una sartén a fuego medio-bajo tres  cucharadas de aceite de oliva. Cuando esté caliente, añadimos el ajo y la guindilla y los dejamos a fuego suave hasta que el ajo se dore ligeramente.

Ponemos la pasta en el agua hirviendo.

Retiramos el ajo y la guindilla, y reservamos por si luego queremos añadirlos una vez terminado el plato. Yo no los puse. Subimos el fuego a medio y freímos los huevos en el mismo aceite hasta que la clara esté cocida pero la yema siga blanda. Salarlos, sacarlos a un plato y dejar la sartén a fuego muy suave.

Cuando la pasta esté al dente (controlar el tiempo con los minutos que indique el fabricante), reservaremos una taza del agua de cocción y escurrimos los tallarines.

Los pasamos a la sartén y añadimos un chorro del agua de cocción, el queso rallado, sal y pimienta (si se quiere dar un toque cítrico, se puede sustituir parte del agua de cocción con zumo de medio limón, y sumar un poco de su ralladura).

Removemos bien para que todo se mezcle y emulsione.

Retiramos la sartén del fuego.(La receta que yo he seguido indicaba dos huevos por persona, pero yo sólo he puesto uno) Si poneis dos, incorporáis  uno de los huevos y los mezcláis hasta que el huevo se rompa en trozos. Si os parece que el conjunto se ve muy pastoso, añadir un poco más de agua de cocción de la pasta y volvéis a remover.

Servimos con el otro huevo encima, un poco del ajo frito y la guindilla picados y pimienta negra recién molida Yo la pimienta se la añadí al incorporar el queso, y obvié lo de poner la guindilla y el ajo en el plato, para que no fuera tan picante. Eso será a vuestro criterio. Lo serví con un poco de perejil picado.

viernes, 17 de febrero de 2023

EMPANADA DE PICADILLO DE LEON

Ingredientes para la masa

Yo hice dos empanadas, una para regalar y otra para casa, las cantidades que van entre paréntesis son para dos empanadas.

150 gr. Leche (300 g). Yo puse la mitad de leche y la otra mitad del jugo que escurrió del relleno.
65 gr. Aceite (130 g)
60 gr Vino blanco (120 g)
450 gr de harina (900 g).
Sal

Elaboración de la masa

Ponemos en un cuenco todos los líquidos de la masa y la sal. Los mezclamos bien y vamos incorporando poco a poco el harina, primero con una espátula y cuando ya la espátula no pueda mover bien la masa, espolvoreamos la mesa de trabajo con un poco de harina y la amasamos.

Siempre que se trabajan las masas de este tipo con harina, las cantidades son orientativas, porque depende de las proteínas de cada harina. Os recomiendo que en principio no utilicéis toda la harina. Sabréis si la masa necesita más o menos harina a medida que la vayáis trabajando. Debéis conseguir una masa que no se pegue a los dedos, pero que quede suficientemente blandita como para poder estirarla sin dificultad.

Mi madre, me enseñó un truco para saber cuando la masa estaba bien hecha: Hacéis una bola con la masa y metéis en la bola el dedo índice, si no se pega, la masa ya tiene suficiente harina. Si continúa pegándose le ponéis más harina, pero siempre con mucho cuidado de no pasaros, o la masa se estirará con dificultad; como ella decía: tendrá correa. Con eso, quería decir que la masa quedará más dura y al estirarla con el rodillo, nos resultará más difícil estirarla.

Dejáis la masa hecha una bola reposando en un lugar cálido y tapada, al menos durante una hora. Yo le suelo dar un corte para ver si ha crecido. Como esta masa no lleva ningún tipo de levadura, no esponja y crece poco, pero el reposo es fundamental.

Cuando vayáis a estirarla, dividir la masa al menos en dos partes. Espolvoreáis la mesa de trabajo y el rodillo con harina. Primero estiráis de arriba abajo y después de darle la vuelta de izquierda a derecha hasta conseguir la masa suficiente para cubrir el molde que vais a utilizar.

El hecho de dividirla en dos, es para evitar que al manejarla, la masa coja mas harina y dificulte el estirado.

Las cantidades de masa para empanada pequeña, dan para un molde de unos 22/25 cm. dependiendo del grosor con el que queráis dejarla.

Colocáis la base de la empanada, en un molde cubierto de papel de hornear.

Ingredientes para el relleno

El relleno lo pongo abundante y lo hago en la thermomix. (tened en cuenta que este relleno es para dos empanadas).

250 gr. cebolla
1 diente de ajo
150 gr. pimiento rojo
2 cucharadas de aceite
900 gr. picadillo de chorizo
75 gr. vino blanco
1/2 cucharadita de café de orégano (opcional, yo no puse porque mi picadillo ya lleva.

Elaboración del relleno de la empanada.

El picadillo es la masa con la que se hace el chorizo. Siempre lo compro en León, en casa gusta mucho y lo suelo poner como entrante cuando hacemos comida familiar. Hoy, he hecho empanada.

Ponemos en el vaso de la thermomix, la cebolla, el ajo y el pimiento, 6 seg., vel.4. Bajamos los restos hacia las cuchillas, añadimos el aceite, y programamos12 min., Varoma, giro izquierda, vel. cuchara.

Agregamos el picadillo, removemos bien con la espátula para mezclar las verduras con la carne y programamos 4 min., Varoma, giro a la izquierda, vel. 1.

Cuando esté terminado el paso anterior añadimos el vino blanco y el orégano, 4 min., Varoma, giro izda., velocidad cuchara.

Ponemos el conjunto en el cestillo o en un colador para que escurra el jugo y después lo usaremos para hacer la masa. Dejamos enfriar el relleno y jugo.

El relleno lo hice el día anterior, y lo dejé escurrir dentro del frigorífico. Eso me permitió retirar la grasa que soltó el picadillo y utilizar únicamente la cantidad de jugo del guiso que necesité.

Terminación de la empanada

Estiramos la primera capa de la masa y la colocamos sobre el molde, cubrimos con el relleno, de forma generosa, reservamos y pasamos a estirar la segunda capa de la masa.

Como observaréis en las fotos, para mover la masa de un lado a otro, es fácil si una vez enharinado el rodillo, la enredáis en el y vais colocándola despacio, tanto la capa de la base como la que cubre la empanada.

Una vez colocada la masa, recortáis la sobrante con unas tijeras, dejando siempre algo de masa que sobresalga del molde para sellarla. Yo lo hago plegándola con los dedos, y termino de cerrarla con un tenedor o una cucharita de postre para que no se despegue.

Es conveniente que en el centro dejéis un hueco para que al cocer en el horno no se os abra y pierda presentación.

Si os apetece presentarla bonita, hay muchas alternativas y cada cual hace el que le gusta. Para ello usáis los recortes de la masa que os han quedado.

Una vez terminada, batís un huevo y pinceláis toda la superficie de la empanada. Cuando el huevo empiece a secarse, con un tenedor de postre pincháis por toda la superficie, eso favorece una cocción igual de toda la empanada y no se os hinchará por ningún sitio.

La metéis en horno precalentado a 180º C con ventilador y calor arriba y abajo entre 42 y 45 minutos hasta que la veáis doradita. Dejar enfriar y servir. Si la vais a comer al día siguiente, le viene estupendamente darle un golpe de calor en el microondas un minuto al trozo que vayáis a comer.





 

FISUELOS LEONESES MUY FÁCILES

Cuando hablamos de fisuelos, en España hay varias formas de elaborarlos. Todos son muy parecidos en cuanto al tipo de ingredientes, pero la forma de cocinarlos, dista mucho unos de otros. Estos son los que yo vi hacer a mi madre.

No podemos saber la fecha exacta en la que se comenzaron a hacer, aunque seguramente todos recordamos a nuestra madre y abuela elaborando este manjar.

Aunque los fisuelos se hacen en toda la provincia, son un clásico de la repostería de montaña, aquella que lograba, con pocos ingredientes y mucha audacia, crear postres llenos de sabor que reconfortaban las almas.

En la montaña de León, territorio de urogallos y osos, las frías tardes del invierno se brindan con densas tazas de chocolate caliente y uno de los bocados dulces más característicos de la montaña leonesa: los fisuelos.

La sencillez de los fisuelos radica en su origen humilde, pensado para dar calor a los estómagos de unos pueblos donde la incomunicación era una máxima cuando las nieves superaban los dos metros de altura. Regocijo para los más pequeños, que las mujeres de la casa, tradición oral mediante, creaban como nubes de masa aireada.

Hay quienes comparan los fisuelos de la montaña occidental leonesa con las filloas gallegas. Otros buscan su origen en las crepes francesas, y hay incluso quien los confunde con churros. Aun así, y a pesar de su origen incierto, la receta no parece haberse visto alterada: harina, leche y huevos en misma proporción y una cucharadita de sal. Y aunque habitualmente el orden de factores no altera el producto, las manos salpicadas de aceite y los trocitos de masa escriben un ritual que comienza por los huevos, para depositar después la harina y, por último, con la masa formada, añadir la leche.

La pizquita de sal termina de coronar una suerte de roux leonés —por aquello de las etiquetas— suave y delicioso.

A pesar de lo que uno pueda imaginarse, la leche que hoy en día se utiliza debe ser semidesnatada.

Ingredientes

2 huevos
600 ml de leche semidesnatada
500 g de harina
1 cucharadita de levadura royal u otro polvo de hornear
1/4 de cucharadita de sal
Azúcar para espolvorear después de la fritura

Elaboración

Lo primero que tendremos que hacer, es mezclar todos los ingredientes en una jarra alta y con bocal ancho, para batirlos bien con la batidora. En caso de que se prefiera hacerlo a mano, os recomiendo que mezcléis primero los huevos con la leche, la sal y la levadura royal.

Una vez que tenemos la mezcla, la dejamos reposar una hora para que esté más esponjosa.

Pasado este tiempo de reposo, ponemos a calentar una sartén con abundante aceite de oliva, y cuando empiece a echar humo vamos añadiendo la masa en espiral. Comenzamos dando la forma desde el centro hacia afuera, lentamente.

Lo tradicional es usar una garcilla como hacían las abuelas, pero podéis hacerlo con una jarra con pico.

Una vez que está dorado por ambos lados, lo sacamos a una fuente con papel absorbente y vamos haciendo nuestra torre de fisuelos.

Cuando veamos que han escurrido el aceite, espolvoreamos con un poquito de azúcar y tomamos con un buen chocolate.

Aquí encontraréis otros fisuelos, que también se hacen en León, aunque no son los que hacía mi madre y los que a mi me gustan más: https://harinalaquepida.blogspot.com/search?q=FISUELOS+DE+LEON

UNA CENA RAPIDA, DIFERENTE Y NUTRITIVA, CON TORTILLAS DE TRIGO

En casa, cenar un pescado a la plancha o en papillote, es generalmente, nuestro día a día. Una vez a la semana, cambiamos para romper la monotonía y saltarnos a la torera las costumbres. Ese día, una buena tortilla de patatas o de bonito, unas croquetas, una empanada o un bocadillo de jamón serrano es nuestro festín. Después, una fruta y a continuación una buena película.

No soy muy partidaria de comer alimentos elaborados, a mi me gustaría por ejemplo hacer una tortilla de trigo con verduras bien jugositas, pero hacer cenas diferentes para dos personas, me parece absurdo. Como al jefe lo de las verduras "que se vean", no le gusta mucho, (disfrazadas, las come todas), hoy hice estas tortillas con ingredientes que sé que le encantan. Os cuento.

Ingredientes para 1 tortilla de trigo

1 huevo batido
1 loncha de jamón york
2 lonchas de queso de fundir
Un puñadito de 4 quesos rallados

Elaboración

No pueden ser más sencillas y fáciles de hacer. En una sartén con antiadherente, ponemos unas gotitas de aceite y colocamos la tortilla de trigo.

Volcamos encima el huevo batido y esperamos que empiece a cuajarse, Cubrimos con la loncha de jamón york (la mía era grande y la troceé). A continuación ponemos dos lonchas de queso de fundir y un puñadito de una mezcla de 4 quesos rallados.

Cuando veáis que empieza fundir el queso, le dais la vuelta y dejáis que termine de fundirse el queso. A mi, me gusta que el queso esté blandito, pero dejándolo tostarse un poco, también están muy ricas





 

NATILLAS CASERAS CON THERMOMIX



Ingredientes

200 g de azúcar
5 huevos
1 litro de leche
50 g de harina fina de maíz (Maizena).Si os gustan muy espesas le podéis poner hasta 60 g.
1 cucharadita de vainilla líquida
Galletas María para acompañar, (a mis hijos les encanta mezclarlas)

Elaboración

En el vaso, ponemos el azúcar, los huevos, la leche, la vainilla y la maizena. Programamos 8 minutos, temperatura 90º y velocidad 4.

Acabado este tiempo comprobamos si tiene espuma. Si es así, programamos otros 4 minutos, temperatura 90º y velocidad 2. Si no tiene espuma, programamos 2 minutos, a velocidad 2, sin temperatura.

Yo lo puse en una fuente, pero lo bonito es poner las natillas en cuencos individuales, poniendo una galleta en cada uno, cuando enfríen llevamos al frigorífico y colocamos papel film encima para que no se forme costra. 

Al momento de servir, si nos gusta, quitamos el papel film, espolvoreamos con canela.

La galleta María podemos ponerla al fondo del recipiente donde vamos a servirlas, yo la suelo poner encima. 

En casa pongo las galletas por encima porque no las solemos espolvorear con canela, pero eso es a elección de cada uno.

RISOTO CREMOSO CON POLLO Y VERDURAS


Ingredientes

1 - 2 dientes de ajo
100 g de cebolla en trozos
50 g de pimiento rojo en trozos
50 g de pimiento verde en trozos
50 g de aceite de oliva virgen extra
300 g de contramuslos de pollo sin piel ni hueso en trozos de 2-3 cm
200 g de arroz de grano redondo
1 pastilla de caldo de pollo
1 cucharada de pimentón
1 cucharadita de sal
650 g de agua
Unas hebras de azafrán
¼ de cucharadita de colorante alimentario
100 g de guisantes congelados (opcional)
100 g de zanahoria en trozos


Elaboración

Ponemos en el vaso de la thermomix el ajo y picamos 2 seg/velocidad 7.

Añadimos la cebolla, el pimiento rojo, el pimiento verde y el aceite. Troceamos 4 seg/velocidad 4 y sofreímos 8 min/120°C/giro a la izquierda/velocidad cuchara.

Incorporamos el pollo y sofreímos 3 min/120°C/giro a la izquierda/velocidad cuchara.

Agregamos el arroz, la pastilla de caldo, el pimentón, la sal, el colorante y el agua. Ponemos el recipiente Varoma en su posición con los guisantes y la zanahoria. Tapamos el Varoma y programamos 15 min/Varoma/giro a la izquierda/velocidad cuchara. Retiramos el Varoma y ponemos las verduras en una fuente. Añadimos el arroz y mezclamos delicadamente con la espátula. Dejamos reposar 5 minutos antes de servir.