sábado, 17 de febrero de 2018

SALMÓN EN PAPILLOTE CON SALSA DE MANGO

 Ingredientes

1 filete de salmón de unos 125 g por persona
Papel aluminio
Sal
Salsa de Mango.

Elaboración

Precalentamos el horno a 220º.

Salamos las rodajas de salmón y las colocamos sobre papel de aluminio untado ligeramente de aceite (sólo para evitar que el pescado se pegue, porque el propio pescado se hará con su grasa y el jugo que suelta. 
Sellamos el papel de aluminio, plegándolo bien para que quede cerrado.

Introducimos en el horno y lo dejamos que se haga por espacio de 13 minutos. Pasado ese tiempo el salmón está listo, sacamos del horno y colocamos en un plato acompañado de la salsa de mango.

El tiempo indicado es para un filete de ese peso, si queréis hacer por ejemplo medio salmón con el mismo sistema, para que quede bien hecho, deberéis tenerlo unos 35 minutos al menos. De todas formas, lo mejor es comprobar destapando el papel de aluminio, y si no está hecho dejar unos minutos más.

Para la salsa de mango

Hay infinidad de salsas de mango. Más o menos enriquecidas con mantequilla, especias diversas y en abundancia. Yo he hecho una salsa del libro de recetas thermomix, sencilla de hacer y de sabor muy delicado que combina a la perfección con el salmón.

Ingredientes


250 gramos de mango maduro
300 gramos de agua
1 cacito de caldo de  pescado
20 gramos de vinagre
20 gramos de azúcar moreno


Elaboración


Ponemos todos los ingredientes en el vaso y programamos 10 segundos, velocidad 6, para mezclar bien los ingredientes.


Programamos 20 minutos, 100º, velocidad 2, sin poner el cubilete, para que la salsa se reduzca.


Cuando termine el tiempo, esperar a que baje un poco la temperatura y programar 10 segundos, velocidad 8.

Comprobamos si la salsa tiene la textura que nos gusta, y si fuera necesario, programamos unos minutos más hasta lograrlo.

Esta misma salsa, podemos hacerla para acompañar carne, en cuyo caso, deberemos sustituir el caldo de pescado por caldo de carne o pollo.


BUÑUELOS


Para variar, y por aquello de que va a empezar la cuaresma, hoy hice un dulce típico de la época: Buñuelos. No los suelo hacer a menudo, por lo insano de lo frito, pero de vez en cuando, hay que romper las normas y celebrar.


Ingredientes
(Salen unos 50)


125 ml de agua
125 ml de leche
75 g de mantequilla
25 g de azúcar
1 pellizco de sal
un trozo de piel de limón, sin la parte blanca
150 g de harina de repostería
1 cucharadita pequeña de levadura royal
200 gr en huevos ( 3 huevos XL)

Elaboración

Ponemos en el vaso el agua, la leche, la mantequilla, la corteza de limón, la sal y el azúcar. Programamos 4 minutos 30 segundos, a 100º, velocidad 2.  Paramos la máquina cuando termine el tiempo programado.

Echamos de golpe la harina y la levadura mezcladas. Mezclamos 10 segundos en velocidad 4. Retiramos el vaso de la thermomix y dejamos enfriar la masa durante unos minutos.

Cuando la masa haya atemperado pero sin que se quede fría, volvemos a colocar el vaso en la thermomix. Ponemos la thermomix en Velocidad 4 y vamos agregando los huevos uno a uno, esperando a agregar el siguiente cuando veamos que el anterior está totalmente integrado.

Dejamos reposar la masa unos 10 minutos antes de comenzar a hacer los buñuelos.

Ponemos una sartén con aceite abundante, y la calentamos pero no en exceso. Yo puse el fuego medio de la vitro en temperatura 6.

Con ayuda de una cucharita pequeña, vamos haciendo los buñuelos e incorporándolos a la sartén.

Insisto que el aceite no debe estar muy caliente, para que no se doren enseguida y queden crudos por dentro. Hay que hacer los buñuelos del tamaño de una nuez pequeña, porque triplican su volumen, y tampoco hay que echar muchos en la sartén.

Si hay suficiente  aceite, ellos mismos se irán dando la vuelta. Como es una masa súper ligera, una vez que se hinchan las burbujas del aceite los empujan y hacen que se den la vuelta.

Si veis que no se dan la vuelta por si mismos, darles la vuelta con ayuda de dos tenedores, pero sin presionarlos.
Cuando estén dorados los sacamos y colocamos sobre papel de cocina absorbente para que escurran el exceso de aceite.

Una vez fríos los abrimos con una tijera de cocina que corte bien para no estropearlos y los rellenamos.

Los he rellenado la mitad con trufa y la otra mitad con cabello de ángel. Pero los podéis rellenar con nata, crema pastelera, crema de chocolate, dulce de leche... lo que más os guste.

Al momento de servirlos, los espolvoreáis con azúcar glas.


TARTA DE PIÑA CON SOBAOS



 
Ingredientes
Para 8/10 personas


Crema de Piña

1 lata de rodajas de piña en su jugo grande

Crema pastelera
100 gr. de azúcar
3 huevos grandes
40 gr. de Maicena
500 gr. de leche entera
1 cucharada de vainilla líquida

Para la elaboración de la tarta necesitaremos además

24 sobaos pequeños
el jugo de la lata de piña
Nata  con el 35% de materia grasa. (a mi me sobró casi la mitad de un brick de 400 gr)

Elaboración de la crema de piña

Lo primero que haremos es una crema de piña con las rodajas de piña que habremos escurrido bien con anterioridad, reservándonos el jugo que viene en la lata y el que sueltan al escurrir. Yo lo hice con un colador grande colocado sobre un bol, y estuvo escurriendo una media hora.

Ponemos las rodajas de piña  escurridas en el vaso de la Thermomix y programamos 30 segundos, a velocidad progresiva 5-7-10. Retiramos del vaso y reservamos.

Elaboración de la Crema pastelera

Sin lavar el vaso, ponemos todos los ingredientes de la crema pastelera y programamos 6 minutos, temperatura 100 º y velocidad 4.

Retiramos del vaso y reservamos en un bol. La cubrimos con papel film transparente pegado a la crema para que no haga corteza.

Para montar la tarta

En una bandeja plana colocamos 12 sobaos (Puse 3 filas de 4 sobaos, pero tendréis que adaptaros a la forma de vuestra bandeja, procurando colocarlos muy juntos y que formen un cuadrado perfecto, sin que ninguno sobresalga). Los cubrimos con la crema de piña.

Para colocar la segunda plancha de sobaos, cortamos los sobaos por la mitad de forma transversal y  ponemos la mitad sobre la crema de piña.

Ayudándonos de una cuchara, regamos esta media capa de sobaos con el jugo que tenemos reservado de la lata de piña. Haciéndolo poco a poco, para que se empapen lo suficiente como para que la tarta quede jugosa, pero que no suelte jugo.

Movemos la crema pastelera -que ya tenemos fría- con unas varillas, para manejarla mejor y la colocamos sobre la capa de medios sobaos, distribuyéndola bien y procurando que quede de forma regular.

Sobre la crema colocamos las mitades restantes de sobaos y volvemos a regar con el jugo de piña reservado.

Para montar y colocar la nata

La nata se puede montar bien en la thermomix, pero yo la suelo montar al modo tradicional con una batidora de varillas, porque así consigo el punto que me gusta y voy viendo el avance.
Para que la nata monte bien, hemos de tener muy fría la nata y muy frío el bol donde vamos a montarla. Suelo hacerlo en un bol grande de acero inoxidable, que a su vez coloco dentro de otro con la misma forma de mayor tamaño, rellenando el espacio entre los dos, con cubitos de hielo para que la nata siempre esté muy fría.
Cuando he terminado de montarla, le añado una cucharada bien llena de azúcar glas y una cucharada también llena de queso Philadelphia. El queso Philadelphia, actúa como estabilizante, y la nata quedará perfecta pasadas unas cuantas horas, incluso días. Bato de nuevo la nata para que se integren bien, tanto el queso como el azúcar y coloco sobre la última capa de sobaos.

Decoramos al gusto. Yo puse unos fideos de chocolate y unos churritos de nata.

Está mejor hecha de un día para otro.


miércoles, 14 de febrero de 2018

CREMA DE COLIFLOR Y CALABAZA



Ingredientes

300 g de coliflor aproximadamente
400 g de calabaza pelada y troceada
1 diente de ajo
1 ramillete de perejil (sólo la hoja)
1 cebolleta en cuartos o un puerro hermoso
1 pimienta de Cayena
3 cucharadas de aceite de oliva virgen
2 cubito de caldo (yo, Maggi)
400 g de agua
sal
50 g de requesón (puse Philadelphia ligth)
1 cucharada rasa de queso parmesano, rallado
Huevo cocido, picatostes para servir (opcional)

Preparación

Ponemos el perejil, la cebolla, la cayena, el ajo y el aceite en el vaso. Damos dos golpes de turbo para que todo quede triturado. Con la ayuda de la espátula bajamos todos los ingredientes de la tapa y del interior del vaso hacia las cuchillas.

Programamos 5 minutos, temperatura Varoma, velocidad 1.

Añadimos la calabaza troceada y pulsamos dos veces el Turbo; añadimos a continuación los ramilletes de coliflor, los cubitos de caldo, la sal y el agua, programamos 30 minutos, temperatura Varoma y velocidad 1.

Comprobamos el punto de sal

Dejamos reposar unos minutos antes de triturar a velocidad progresiva 5, 7,9 hasta que quede una crema fina. Es el momento en que debemos comprobar si nos gusta como ha quedado de espesa la crema. Si os ha quedado demasiado espesa, podéis agregarle agua -poco a poco- hasta conseguir el punto que os gusta.

Añadimos el queso Philadelphia y el parmesano y programamos 10 segundos, velocidad 4.

Yo lo he acompañado de huevo cocido, pero admite también picatostes. Si lo hacéis para evitar sumar calorías, poned de los que venden en las panaderías tostados al horno que no llevan grasa.


NOTA:

Como habitualmente sólo comemos dos personas en casa, suelo hacer los primeros platos que se mantienen bien de un día para otro, para dos días, y por tanto, no le puse ni el queso parmesano ni el otro queso para probar la diferencia al día siguiente. El segundo día, puse requesón. La crema mejora considerablemente.
Otra advertencia que he de hacer, es que si no os gusta que pique demasiado, retiréis las semillas de la cayena,  yo no lo hice porque nos gusta que cuando algo lleva picante, tenga alegría, pero para los no muy adictos, mejor no las pongáis.

ENSALADA DE PATATA Y REMOLACHA

Esta es una receta de aprovechamiento de fondo de congelador. Me gusta bastante la remolacha en ensaladas, con patata, con lechuga o con aguacate, suelo hacerla a menudo, pero muchas veces no lo recuerdo y no las pongo aquí. Como aún quedan remolachas para prácticamente todo el año, hoy he preparado ésta para la cena.

Ingredientes

1/2 remolacha cocida
1 patata mediana
1 lata pequeña de migas de atún en aceite de oliva

Elaboración

Ponemos a cocer la patata entera sin pelar con sal a cocer. Dependiendo de la clase de patata, en general con que la tengáis entre 25 y 30 minutos hirviendo, estará en su punto. Para comprobarlo, lo mejor es que la pinchéis con un tenedor. Si la dejáis más tiempo del normal, se os desmoronará y no nos interesa.

Como la remolacha la tengo congelada, un rato antes la pongo en un escurridor a descongelar. Veréis que suelta bastante jugo, pero no pasa absolutamente nada, no pierde sabor.

Cuando la patata esté templada, la peláis y la troceáis en pedacitos pequeños como si fuera para una ensaladilla o un poco mas grande.

Hacéis lo mismo con la remolacha.

Abrís la lata de migas de bonito, y la incorporáis con su aceite a la remolacha y las patatas. Probáis el punto de sal.

En mi caso, siempre cuido la suma de calorías, por eso no le he puesto más aliño que el aceite del bonito y media cucharadita de mayonesa. Pero como todas las ensaladas, admite todo tipo de ingredientes y aliños al gusto. No tenía en casa lechuga, pero unas hojas de lechuga le van de maravilla.



sábado, 10 de febrero de 2018

MACARRONES PICANTES AL PARMESANO


Se podrían llamar macarrones a lo pobre, porque 
no requieren apenas ingredientes. Sin embargo, todos sabemos que de un plato de pasta, lo que más calorías aporta es  el acompañamiento o la salsa que le ponemos. 
Hoy, vamos a preparar unos macarrones con la menor cantidad de calorías posible, sabrosos pero no aptos para los intolerantes al picante. A mi personalmente me gusta, siempre que no sea en exceso. Al primer bocado, se nota el picante, pero si os ajustáis a las cantidades indicadas, no habrá problema. Yo diría que están alegres, pero no pican en exceso. 
Sólo pongo la receta para elaborar en thermomix, los hago en ella porque se pueden hacer todos los pasos en ella y no hay que echar mano a otros cacharros de cocina y por lo tanto recoger menos. Son tan sencillos que no considero necesario poner la elaboración tradicional.

Ingredientes
(2 personas)


120 g de macarrones 
2 dientes de ajo
15 g de aceite de oliva virgen (cucharada y media)
Orégano seco
Pimienta
2 guindillas secas sin semillas
Queso parmesano rallado
Sal

Elaboración

Ponemos en la thermomix 1 litro de agua y la calentamos programando 7 minutos, Temperatura 100º, velocidad 1.

Cuando el agua haya alcanzado la temperatura marcada, ponemos la pasta en el cestillo y éste en interior del vaso. Ponemos sal y programamos el tiempo de cocción marcado en el paquete, 100º, velocidad 4. Mis macarrones son de la firma Gallo, la marca indica 9 minutos.

Una vez que la pasta ya está cocida, escurrimos los macarrones,  y desechamos el agua de cocción.
Hay personas que refrescan la pasta después de la cocción, dicen que evitan que la pasta se pase de punto. Si ponéis el tiempo indicado, no sucederá tal cosa y os evitaréis que la pasta se quede fría. Simplemente ponerlos en un escurridor y moverlos de vez en cuando para que no se peguen.

Con la thermomix bien seca ponemos el aceite y lo calentamos durante 3 minutos, Temperatura100º, velocidad 1. 

A continuación ponemos el ajo en láminas y las guindillas sin semillas (las semillas harían que picaran en exceso). Doramos 7 minutos,  Temperatura 100º, velocidad 1. Si queréis que queden más doraditos ponéis 3 minutos más en Temperatura Varoma y a la misma velocidad, no tengáis miedo, no se queman.

Cuando ya los ajos están dorados, colocamos la mariposa en las cuchillas, añadimos la pasta, el orégano y la pimienta. Salteamos durante 3 minutos, 100º, velocidad 1, giro a la izquierda.

Retira los macarrones a un plato y reparte por encima el queso rallado.

Servir inmediatamente. Buen provecho!

viernes, 9 de febrero de 2018

CARRILLERAS DE CERDO A LOS DOS VINOS (BLANCO Y TINTO) EN OLLA EXPRES

  
La carrillera es un corte de carne que se extrae de la cara del animal, bien de ternera o cerdo, y es su músculo masticador. Esta pieza de casquería, de poco valor hace algunos años, se ha convertido en una delicatessen y es que si la cocinamos a fuego lento y sin prisas, convierte la carne en un plato meloso, jugoso y sabroso

Ingredientes

3/4 kg de carrilleras de cerdo
1 Cebolla
2 Dientes de ajo
1 Pimiento rojo
1 Pimiento verde italiano
3 Zanahorias
200 ml de vino tinto
200 m de vino blanco
2 pastillas de caldo de carne disueltas en 1/2 litro de agua
Harina para rebozar
Sal
Pimienta negra molida
Aceite de oliva virgen extra
Perejil para decorar

Para la guarnición (hice sólo para 2 personas)

6 cucharas colmadas de puré de patata en copos (Maggi)
250 de leche desnatada
150 de agua
1 pellizco de sal.

Elaboración

Lo primero que tenemos que hacer es retirar la tela que cubre las piezas por una de las caras y trocear la carrillera en dos.

Diluimos las pastillas de caldo de carne en medio litro de agua y reservamos.

Las salpimentamos por los dos lados y pasamos a enharinarlas, sacudiéndolas para que suelten la harina innecesaria.

Ponemos aceite en una sartén y cuando esté bien caliente pasamos las carrilleras por ambos lados, las marcamos a fuego fuerte y reservamos.

Ponemos un poco de aceite de marcar las carrilleras en la olla exprés. sofreímos primero la cebolla cortada en juliana y cuando empiece a dorarse, añadimos primero el puerro, después añadimos los pimientos troceados y limpios y cuando estén blanditos, terminamos por añadir la zanahoria cortada en trozos pequeños.

Añadimos ahora el caldo a las verduras, y a continuación el vino tinto y el vino blanco. Dejamos evaporar un poco para reducir el alcohol y ponemos encima la carne.

Tapamos la olla exprés, y ponemos 40 minutos desde que empieza a girar la válvula. En cuanto empieza a girar, reducimos la temperatura de la vitro al 6, y dejamos que se haga despacio.

Para hacer el puré, no he seguido las instrucciones del envase porque yo quería un puré más ligero. Es sencillo de hacer. Simplemente, poner la mezcla de la leche, el agua y el sal al fuego. Cuando rompa el hervor, añadir los copos de puré. Retirar del fuego, y mover enérgicamente hasta que se hayan integrado tanto la leche como los copos y servir. Podéis añadir más cantidad de líquido si queréis que el puré quede menos denso.

Decorar con romero seco y perejil.




lunes, 5 de febrero de 2018

COMO HACER LAS RECETAS DE LA THERMOMIX A LA FORMA TRADICIONAL, Y VICEVERSA, CUANDO NO TENEMOS EL ROBOT.

Con el fin de facilitar la elaboración de parte de las recetas de este blog, algunas de las cuales no tienen incorporada la explicación de como hacerlas sin thermomix, añado al blog una tabla de equivalencias o si lo preferís una guía que os permitirá hacer cada receta a la forma tradicional. Hay que tener en cuenta, que ésta, es una tabla que se ha hecho consultando por Internet a la que he sumado la propia experiencia, por lo que es posible que contenga errores, aunque los datos hayan sido contrastados.
                         


 INSTRUCCIONES   THERMOMIX
 CONVERSIÓN O EQUIVALENCIAS A COCINA   TRADICIONAL

 CONVERSIÓN O   EQUIVALENCIAS A   COCINA   TRADICIONAL

 Cazuela, olla, cazo o sartén
 Temperatura 90ºC
 Cazo
 Temperatura 100º
 Olla, intensidad de los fuegos media (al principio   fuerte y luego más floja)
 Temperatura Varoma
 Utilizamos olla (exprés o olla una olla con tapa). Si   utilizamos olla exprés, hay que reducir el tiempo a 
 1/3 parte aproximadamente.
 Giro a la izquierda
 El giro a la izquierda implica que las cuchillas en el   interior del vaso de la Thermomix no cortan los   ingredientes. Por tanto es equivalente a calentar los   ingredientes  removiéndolos suavemente de vez en   cuando.
 Velocidad cuchara
 Velocidad lenta, como si estás removiendo   despacio pero de modo constante.
 No importa que los ingredientes se troceen con las   cuchillas, seguramente porque es un  sofrito o una   crema (tipo bechamel)
 Velocidad 1 a 3
Velocidades que trocean los alimentos en trocitos   más o menos tamaño “juliana” (3-6 mm)
 Velocidad 4
 La velocidad 4 es para trocear al estilo Juliana   ingredientes blandos como podría ser  por ejemplo   un calabacín a un tamaño de entre 1- 3mm
 Velocidad 5
 La velocidad 5 en la thermomix se suele utilizar 
 para trocear ingredientes duros como  por ejemplo   una zanahoria o una calabaza a un tamaño de entre   unos 1-3 mm
 Velocidad 8 a 10
Esta velocidad es perfecta para dejar los purés cremosos, cremosos.
 Puede ser equivalente a un buen rato de estar con 
 la Minipimer, pero nunca se quedará  tan cremoso  como con la thermomix.
 Utilizar la mariposa
El vaso de la Thermomix tiene las cuchillas en la parte inferior, al estilo de una minipimer
o una batidora. La mariposa es un utensilio que se pone encima de las cuchillas y que sirve
para remover todos los ingredientes de un modo homogéneo y que a su vez impide el corte
de los alimentos. Habría que utilizarlo si por ejemplo quieres cocinar pasta o arroz
dentro del vaso. Por lo tanto, cuando veamos que se usa la mariposa, será
  a remover en un cazo los ingredientes 
  favoreciendo su mezcla pero sin cortar.
 Utilizar la Varoma
El recipiente varoma se coloca en la parte superior de la theromix y permite que los
ingredientes que contiene se hagan al vapor.
Por tanto, la equivalencia sería coger un cestillo dentro de la olla y colocar ahí los alimentos.
Poner un poco de agua en la olla y calentar a fuego alto el tiempo que se indica en la receta
 de la thermomix para que se hagan los productos   
 al vapor.
 Temperatura Varoma    velocidad 1
 Olla tapada, fuego alto y moviendo suavemente
 Velocidad cuchara   temperatura 100º
 Olla a fuego medio (al principio hasta que coja   temperatura alto), moviendo constantemente.
 El cubilete como   unidad de medida
 Lleno hasta el borde es equivalente a 100 ml. y hasta 
 el reborde que hay en el medio 50 ml

domingo, 4 de febrero de 2018

FROILANAS CON THERMOMIX Y TRADICIONAL.



 Reconozco que soy el espíritu de la contradicción. En Octubre, se deberían hacer froilanas según manda la tradición leonesa, pero hice orejas de carnaval. Ahora, en vísperas de carnaval cuando deberían hacerse orejas, flores o frixuelos, he hecho froilanas. Dentro de un mes, será la semana santa y para seguir llevando la contraria, es probable, que en lugar de torrijas haga cualquier otra cosa que se me ocurra. 
Esta es la primera vez que hacía froilanas, y ayer por curiosidad, me enteré de la historia de estas rosquillas tan ricas.
Parece ser que un maestro confitero leonés que aprendió el oficio en Alemania, fue el encargado de introducir estas rosquillas sin demasiado éxito allá por los años 80. A mediados de los 90, otro maestro confitero leonés recuperó la receta introduciéndolas en su confitería con un éxito total. 
Hoy, lo habitual es que por el mes de octubre cuando se celebra la festividad de San Froilán, la mas tradicional de las fiestas de León que se entronca con las raíces de la ciudad y se remonta a la Edad Media, estas rosquillas han pasado definitivamente a incorporarse a los hábitos alimenticios de los leoneses durante esos días .
Allí las he comprado y llevado a casa, con un éxito total. Hoy me decidí a prepararlas. Sólo diré que salieron 40 rosquillas, éramos 5 comensales y quedaron 6. Parece que gustaron bastante.

Ingredientes

Para la masa:
270 gramos de leche entera (puse desnatada)
1 cucharadita rasa de sal
15 gramos de ron blanco (puse ron negro porque no tenía blanco en casa)
75 gramos de mantequilla
140 gramos de harina de trigo
3 huevos grandes


Para freír
Aceite de oliva suave o aceite de girasol (puse de oliva de 0,4 de acidez.

Para la Glasa:
150 gramos de azúcar glas
35 gramos de agua
6/8 gotas de limón

Elaboración en Thermomix

Siempre que hago una receta, y sobre todo si es nueva para mi, como ésta, lo primero que hago es pesar todos los ingredientes y colocarlos por el orden que pide la receta para no equivocarme.

Una vez hecho el primer paso, ponemos  en el vaso de la thermomix la mantequilla, el ron, la leche y el sal. Programamos 4 minutos a Temperatura 100º y velocidad 1.

Añadimos la harina y programamos 15 segundos, velocidad 4, sin temperatura. Dejamos reposar 10 minutos  con el vaso destapado para que la masa enfríe un poco.

Pasados los 10 minutos programamos la thermomix a velocidad 4 -sin tiempo- y vamos añadiendo los huevos uno a uno por el bocal, cuidando de no añadir el siguiente hasta que el primero esté totalmente integrado, y haremos así con el tercero. Todo debe quedar bien mezclado.

En una manga pastelera desechable con la boquilla rizada ya puesta, ponemos la mezcla . 

Iremos colocando una a una en papel de hornear -previamente cortado- en trozos. A mi me salieron 40 rosquillas, así que calculad más o menos con anterioridad cuantos papeles vais a necesitar.

Diré, que en mi opinión, yo puse una boquilla demasiado grande, y hubiera sido mejor que las rosquillas quedado un poco menos gruesas.

Ponemos en la sartén el aceite, y cuando está caliente, bajamos la temperatura al 7. Las vamos colocando en la sarten una a una, boca abajo y ayudándonos del papel en abundante aceite de bien caliente. No es necesario preocuparse por el papel, se suelta sin hacer nada, y se retira desechándolo.

Ponemos sobre papel absorbente para eliminar toda la grasa posible. Dejamos enfriar

Elaboración de la glasa:
Ponemos en el vaso el azúcar, el agua y las gotas de limón. 
Programamos 20 segundos en velocidad 3. 
Con una brocha pintamos las rosquillas con esta glasa. Dejamos un ratito en reposo, y las llevamos a la mesa.

Elaboración tradicional

Pesamos y dejamos reservados todos los ingredientes.
En una cazuela, ponemos la leche, la mantequilla, el ron, las gotas de limón y la sal.
Cuando rompan a hervir y esté la mantequilla bien desleída, incorporamos de golpe la harina y removemos bien hasta que la harina no se pegue a las paredes.
Dejamos enfriar 10 minutos.
Pasado el tiempo, vamos incorporando los huevos uno a uno moviendo enérgicamente la cuchara, y esperamos hasta que esté totalmente integrado sin añadir el siguiente hasta que el anterior no esté perfectamente integrado.
Metemos en una manga pastelera y vamos colocando sobre los papelitos dando la forma de rosquilla.

Para hacer el glaseado mezclar bien el azúcar glas, el agua y las gotas de limón con ayuda de un tenedor hasta conseguir que quede una mezcla blanquecina y algo espesa.

 El resto de la elaboración seguimos exactamente los mismos pasos que hemos hecho en el caso de la thermomix.