martes, 5 de diciembre de 2017

PAVIAS DE MERLUZA




Las pavías de merluza son unas de las tapas más populares. En el sur se las conoce por Soldaditos de pavía. Se pueden hacer tanto de merluza como de bacalao, si las hacemos de bacalao, tendremos que ponerlo en remojo y no las podremos hacer hasta que esté bien desalado, para lo que debes cambiar el agua del remojo unas cuantas veces.
Yo las hice hoy de merluza, pero creo que de bacalao, como nos gusta mucho no tardaremos en probarlas

Ingredientes

2 Filetes de merluza

Para la masa

5 cucharadas soperas de harina ( 90 gr. aprox.)
1/2 sobre levadura en polvo
1 pizca de colorante alimentario
1 botellín de cerveza (20 cl)
sal

Elaboración

Descongelamos la merluza y la cortamos en tiras, las salamos y reservamos.

Hacemos la masa poniendo en un bol la harina, la levadura, el colorante y la sal. Mezclamos. Añadimos la cerveza y removemos con una varilla hasta que quede una masa bien mezclada y sin grumos.

Dejamos reposar una media hora.

Calentamos abundante aceite en una sartén , pasamos las tiras de pescado por la masa y las freímos inmediatamente.

Las ponemos sobre papel de cocina para que absorba el exceso de aceite.

Servir bien calentitas.

Con esta masa también podemos rebozar palitos de calabacín, zanahoria, espárragos, etc.

ALBONDIGAS DE POLLO Y MANZANA



Ingredientes:

2 dientes de ajo
Un manojo de perejil
200 g de manzana Golden pelada y sin pepitas
600 g de pechuga de pollo
2 huevos (1 para rebozar)
1 rebanada de pan de molde sin corteza mojado en leche y escurrido
60 g de pan rallado
Sal
Pimienta
Harina
Aceite de oliva virgen
200 g de cebolla
100 g de puerro
80 g de vino blanco
700 g de caldo de ave

Elaboración tradicional

En una picadora, picar finamente los dientes de ajos con el perejil. Reservar. Picar igualmente las manzanas y luego el pollo.
Mezclar en un bol las picadas de ajo y perejil, de manzana y de pollo, junto al huevo batido, el pan mojado en leche, el pan rallado, sal y pimienta.
Formar las albóndigas, enharinar, freír en aceite y reservar en un plato con papel de cocina para que absorba el aceite sobrante.
En una olla, pochar la cebolla y el puerro picados con un poco de aceite. Cuando cojan color, agregar una cucharada de harina y dorar un par de minutos sin dejar de remover. Incorporar el vino y cocinar 5 minutos a fuego medio para que el alcohol se evapore. Añadir el caldo y hervir unos 10 minutos. Triturar la salsa. Introducir las albóndigas y cocinar 10 minutos.

Elaboración en Thermomix

Yo las he hecho en Thermomix, son rapidísimas de hacer y mientras rebozaba y freía las albóndigas, hice la salsa con lo cual, el plato lleva poquísimo tiempo de elaboración. Me salieron 37 albóndigas con estas cantidades.

Echar en el vaso los dientes de ajo y el perejil. Picar 4 segundos en velocidad 5. Bajar los restos que hayan quedado en las paredes del vaso y volver a picar 4 segundos en velocidad 5. Reservar.
Triturar las manzanas 5 segundos en velocidad 4. Si han quedado trozos medianos, volver a picar 5 segundos en velocidad 4. Reservar.
Picar las pechugas 5 segundos en velocidad 5. Añadir la picada de ajo y perejil, las manzanas, el huevo, el pan mojado en leche, el pan rallado, sal y pimienta. Mezclar 1 minuto en velocidad espiga.
Formar las albóndigas, enharinar, pasar por huevo batido, freír en aceite y reservar en un plato con papel de cocina para que absorba el aceite sobrante.
Limpiar y secar el vaso. Echar la cebolla y el puerro con 4 cucharadas soperas de aceite. Picar 5 segundos en velocidad 4. Luego, programar 8 minutos en temperatura varoma a velocidad 1 sin el cubilete.
Agregar una cucharada de harina bien llena y dorar 2 minutos en temperatura 100º a velocidad 2.
Incorporar el vino y programar 4 minutos en temperatura 100º a velocidad 1 sin el cubilete.
Añadir el caldo y programar 10 minutos en temperatura varoma a velocidad 1 sin el cubilete.
Triturar 15 segundos en velocidad 8 (poner el cubilete!!)
Colocar la salsa junto a las albóndigas en una cacerola y cocinar 10 minutos.

Si os gusta más, podéis cambiar el pollo por pavo. En casa han gustado muchísimo, tienen un sabor suave y no llenan nada. La salsa espectacular, ni se percibe la cebolla.

viernes, 1 de diciembre de 2017

MEJILLONES EN SALSA DE PIMENTÓN


Ingredientes

3/4 de kg de mejillones
1 diente de ajo
1 cucharada sopera de harina rasa
1/2 cucharada de pimentón
Aceite oliva

Elaboración

Lo primero que tenemos que hacer es limpiar bien los mejillones, dejándolos libres de todas las adherencias que tienen en la concha y retirando el viso, puesto que vamos a servirlos en la concha.

Los vamos colocando en una olla alta a ser posible, para evitar que al hervir se nos derrame el jugo sin agua. Si, sin agua ninguna, únicamente se harán al vapor, y así soltarán su jugo.  

Los colocamos al fuego y esperamos a que se abran las conchas. Estarán cocidos cuando la carne del mejillón haya perdido su aspecto acristalado y estén bien cuajados.

Esperamos que enfríen un poco para no quemarnos y desechamos  la valva del mejillón a la que no está adherido el bicho. Vamos colocando en una fuente las valvas que tienen el mejillón y colocándolas de forma ordenada. Reservamos.

Colamos el caldo, para quitar las impurezas que pueda tener con una manga de éstas, y reservamos mientras vamos preparando la salsa.
 
En una sartén ponemos un poco de aceite y sofreímos ligeramente el ajo, la harina y el pimentón, evitando que se formen grumos y se quemen. 

Cuando hayamos terminado con ese paso, vamos añadiendo poco a poco, el caldo que han soltado los mejillones y lo vamos trabajando como si fuera una bechamel muy, muy ligera. Lo ideal es que tengamos suficiente líquido del de hervir al vapor los mejillones, y de hecho suele ser así. En caso de que nos quede muy espesa la salsa podríamos añadir un poquito de agua, pero eso restaría sabor al plato. Retiramos el ajo.

Cubrimos con la salsa los mejillones que tenemos en la bandeja y servimos bien calentitos, y a disfrutar.

MEJILLONES A LA "CHARITO"


Ingredientes

3/4 kg aproximadamente de mejillones
1/2 cebolla pequeña
1/2 pimiento verde o rojo (el que tengamos a mano)
2 ajos grandes
Pimentón
1 cayena (opcional)
Aceite de oliva

Elaboración

Limpiamos bien los mejillones retirando todas las impurezas de la cáscara y el viso.

Picamos la cebolla en brunoise, el pimiento en trozos pequeños, el ajo menudito y los ponemos con un poco de aceite en una cazuela hasta que estén bien pochados.

Cuando lo tengamos blandito , añadimos el pimentón retirando un poco del fuego para evitar que se nos queme.
Agregamos los mejillones limpios y damos vueltas para que se mezcle todo bien. Tapamos.

Hacemos un majado con ajo y perejil con una pizca de sal (sólo para que no salte al hacer el majado porque los mejillones ya tienen sal suficiente).

Añadimos al majado 1/2 vaso de vino blanco, removiendo de nuevo para que los sabores se absorban por igual. Dejamos hasta que los mejillones estén bien abiertos. Estarán listos en cuanto estén todos abiertos.

Si queremos que la salsa esté espesa, podemos añadir un poco de pan rallado, o bien en el rehogado inicial, añadiremos un poco de harina. Lisos y a disfrutar.

La receta original no lleva cayena, pero a nosotros nos gusta que estén un poco picantes, porque le da mucha gracia, por eso la añadí.

Gracias por la receta Charito!!

martes, 17 de octubre de 2017

EQUIVALENCIAS ENTRE ACEITE Y MANTEQUILLA, PARA COCINAR SANO

Siempre es deseable alimentarse de la forma más saludable posible.

Hace años que en nuestra casa se viene haciendo así, y procuramos evitar el exceso de grasa en cada comida. Tanto es así, que a veces me pregunto por qué razón no le puse como nombre al blog, "cucharadas de aceite", porque realmente es el ingrediente que más cuido de todos cuantos utilizo.

De hecho, cuando se habla de dietas, en todas se aconseja el consumo de carne de pollo, pavo o conejo por ser las que menos grasas aportan.

Sin embargo, todos sabemos que la carne de vacuno o de cerdo es bastante más sabrosa. Cuando la utilicemos, es aconsejable desgrasarla, aunque es cierto que es tarea imposible retirar todo el exceso. Precisamente por esa razón, al cocinarla, debemos hacerlo con la mínima cantidad de aceite a fin de que suelte su propia grasa.

En realidad, después de esta perorata sobre el cuidado de la grasa en la alimentación, lo que me gustaría explicar es la forma de sustituir la mantequilla por aceite, bien de oliva o de girasol en bollería, bizcochos o pastas, siempre que sea posible.

De hecho, y como obsesión personal, yo no suelo utilizar mantequilla ni en bizcochos, ni en cualquier dulce habitual.

Sólo cuando hago las "pastas de mantequilla", un brioche, croissants o los típicos bollos navideños como el roscón, el pandoro o el strudell. Tampoco la utilizo para hacer la bechamel, y puedo asegurar que sale muy rica.

Salvo en el caso de las pastas que llevan una cantidad ingente de mantequilla, el resto de la bollería que suelo hacer en casa, lleva pequeñas cantidades y únicamente la hago en ocasiones especiales, precisamente porque no creo que sea saludable.

Normalmente cuando vamos a elaborar una receta, el aceite viene indicada en mililitros y la mantequilla en gramos; para no complicarse, a mi me resulta mas sencillo medir el aceite en gramos y usar entre un 20% y un 25% menos de la cantidad de mantequilla indicada.

Por ejemplo 100 gr de mantequilla corresponderían, a 80 gr de aceite u 8 cucharadas soperas

En la dieta mediterránea tradicional, apenas utilizamos la mantequilla para cocinar,y en la repostería pueden utilizarse tanto el aceite de oliva como el de girasol (mas suave) en muchas recetas, (podéis observarlo en el blog). Para la cocina habitual, utilizo siempre aceite de oliva virgen, sin embargo para los dulces y la repostería en general, suelo utilizar aceite de oliva de 0,4 de acidez o mejor incluso, de girasol.

Los aceites más suaves ayudan a acentuar el sabor de los otros ingredientes de la receta y además por su contenido de vitamina E, ayuda a conservar y hacer los postres más jugosos y tiene la ventaja de que el aceite, contiene menos colesterol y grasas saturadas.

Como expliqué antes, no podremos sustituir la mantequilla por aceite, en recetas que necesiten cierta consistencia, como por ejemplo, los glaseados de los bizcochos (nunca los glaseo), en la elaboración de masas como el hojaldre y las masas de bollería en general, que necesitan las capas intercaladas de mantequilla y harina para su consistencia final.

Os dejo una tabla de equivalencias aproximada a modo de orientación, para que no tener que hacer siempre los cálculos. A mi me sirve mucho.


Mantequilla
Aceite de Oliva/girasol
5 gramos
3. 5 ml
15 gramos
11 ml
30 gramos
22 ml
60 gramos
44 ml
80 gramos
60 ml
125 gramos
90 ml
150 gramos
120 ml
170 gramos
135 ml
225 gramos
180 ml


 


lunes, 16 de octubre de 2017

OREJAS DE CARNAVAL THERMOMIX Y TRADICIONAL


 
Ingredientes para la masa

1 huevo mediano
1 cucharada de azúcar
50 gr de leche o zumo de naranja
50 gr de aceite de girasol
2 cucharadas de orujo
Ralladura de 1 limón
270 gr de harina
1 cucharadita de levadura

Para decorar

Azúcar blanquilla (yo puse azúcar glas)

Elaboración en thermomix

Ponemos todos los ingredientes en el vaso de la Thermomix excepto la ralladura de limón y la harina y mezclamos 20 segundos en velocidad 4.

Añadimos la harina y la ralladura de 1 limón y amasamos 1 minuto en velocidad espiga.

Es probable, que según el tamaño de la cuchara que utilicéis para los líquidos y el tamaño del huevo, la cantidad de harina varíe ligeramente . Ya sabéis, HARINA LA QUE PIDA. Tenéis que obtener una masa blandita, pero que no se pegue a las manos. Si os pasáis en la cantidad, no podréis hacer las orejas tan finas como deben quedar, fijaos que en la segunda foto del paso a paso, se percibe el dibujo de la piedra de la encimera.
Espolvoreamos muy ligeramente la superficie donde vamos a ir colocando las orejas. Vamos tomando porciones de la masa y haciendo bolitas de tamaño aproximado a una nuez. Estiramos la masa con la ayuda de un rodillo enharinado (debe quedar muy finita casi transparente).

En una sartén ponemos aceite en abundancia.

Podemos estirar la masa entera y cortarla como nos guste, yo quería que realmente parecieran orejas, así que me ayudé con dos tenedores como podéis comprobar en el paso a paso y empujé por el medio de cada pieza contra el borde de la sartén, mientras que con el otro sujetaba la oreja. Conseguí darles la forma que quería y fui colocando sobre papel absorbente para eliminar la mayor cantidad de aceite posible.

La fritura deberá quedar ahuecada y crujiente, para lo que freímos. en tandas pequeñas y con el aceite bien caliente.

Una vez bien escurridas colocamos en una bandeja y espolvoreamos con azúcar y si os gusta, podéis añadir canela.

Con estas cantidades salieron 50 orejas, pero os advierto que como no retuvieron apenas aceite y tienen poca azúcar, volaron. Estaban doraditas y crujientes, muy ricas.

Elaboración tradicional

Poner en un bol todos los ingredientes a excepción de la harina, la levadura y la ralladura de limón. Batirlos hasta que estén todos bien mezclados.

Ir incorporando poco a poco la harina hasta que se haya integrado completamente. No es necesario que la dejéis reposar,

Es probable, que según el tamaño de la cuchara que utilicéis para los líquidos y el tamaño del huevo, la cantidad de harina varíe ligeramente . Ya sabéis, HARINA LA QUE PIDA. Tenéis que obtener una masa blandita, pero que no se pegue a las manos. Si os pasáis en la cantidad, no podréis hacer las orejas tan finas como deben quedar, fijaos que en la segunda foto del paso a paso, se percibe el dibujo de la piedra de la encimera.

El resto de los pasos para la formación y el cocinado, como en la elaboración en thermomix




HUEVOS ENCAPOTADOS O HUEVOS AL CIELO...


Esta es una de las infinitas maneras de preparar el huevo. La diferencia con otros platos hechos a base de huevo es que con esta forma de cocinado, se convierte prácticamente en un plato de fiesta por lo rico que está. Tiene un pequeño inconveniente: suma calorías. Por eso vamos a tratar de reducirlas en lo posible bajando la cantidad de grasa y haciendo una bechamel "ligera". Vamos a explicarlo.
Ingredientes
(para dos personas)

2 huevos fritos
Pan rallado
1 huevo para el rebozado (no necesitamos el huevo entero, si tenemos claras, lo podemos hacer perfectamente con una clara ligeramente batida)
2 cuencos de forma semiesférica
Bechamel

Ingredientes para la "bechamel ligera" (Ver bechamel sin gluten al final del post)

3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
30 gr de cebolla
65 gr de harina
400 ml de leche desnatada
Sal al gusto
Pimienta al gusto
Nuez moscada al gusto.

Elaboración

Yo he hecho la bechamel en thermomix, porque es la forma más sencilla y sale siempre perfecta.

Ponemos el aceite y la cebolla en el vaso y programamos 3 minutos, Varoma, velocidad 3 y medio.

Añadimos la harina y rehogamos 1 minuto, 100º, velocidad 2 y medio.

Incorporamos el resto de los ingredientes y mezclamos 10 segundos en velocidad 6, y a continuación programamos 7 minutos, Varoma, velocidad 4. Ya tenemos la bechamel hecha.

Montaje del plato

Lo primero que tenemos que hacer, y antes de preparar la bechamel, es freir los dos huevos, procurando que no salgan puntillas, para lo que debemos tener la aceite menos caliente de lo habitual. Los escurrimos bien y reservamos en un plato para que pierdan toda la aceite posible.

Hacemos la bechamel.

Untamos muy ligeramente los cuencos con aceite y espolvoreamos por toda la superficie pan rallado, retirando lo que sobre.

Cubrimos el fondo de los cuencos con una porción de bechamel, teniendo en cuenta de que tenemos que reservar parte para después cubrir el huevo.

Sobre ese fondo cubierto con bechamel, colocamos el huevo frito que tendremos bien hecho pero con la yema blandita.

Tapamos con bechamel y espolvoreamos ligeramente con pan rallado, poco para que no se llenen de aceite al freír.

Reservamos en la nevera hasta que, al enfriar la bechamel, se convierta todo en un bloque.

Batimos la clara, o un huevo y volcamos el conjunto cubriéndolo por todas partes de huevo batido, freímos en aceite de oliva muy caliente, y dejamos que se dore ligeramente primero por una parte y luego por la otra. Sacamos con una espumadera para que no quede aceite. Servimos acompañados de una ensalada de lechuga y tomate.

Os dejo un paso a paso, para que os deis idea de como se hace. Buen provecho!

Salsa Bechamel sin gluten

Ingredientes:

500 gr de leche desnatada
40 gr de maicena
15 ml de aceite
Una pizca de nuez moscada
Sal y pimienta al gusto

Elaboración
Ponemos todos los ingredientes en el vaso y programamos 10 minutos, 100º, velocidad 4.












miércoles, 6 de septiembre de 2017

BIZCOCHO DE NARANJA Y YOGUR


Ingredientes

1 naranja de zumo con piel, partida en cuartos
250 g. de azúcar
3 huevos grandes
100 g. de aceite de girasol
1 yogur natural
250 g. de harina de repostería
1 sobre de levadura royal
1 pellizco de sal

Elaboración

Precalentamos el horno a 180º. Engrasamos el molde con antiadherente por los laterales la base.

Ponemos la naranja, el azúcar y los huevos en el vaso. Programamos 3 minutos, temperatura 37º C y velocidad 5.

Añadimos el aceite y el yogur natural. Mezclamos durante 5 segundos, a velocidad 4.

Incorporamos la harina, la levadura y un pellizco de sal. Programamos 15 segundos, a velocidad 3. Si no se ha mezclado bien, terminamos de hacerlo con la espátula, mediante movimientos envolventes y suaves.

Vertemos esta mezcla en el molde procurando que la masa quede distribuida de forma uniforme y no se formen burbujas de aire.

Metemos al horno y dejamos que se haga durante 40 minutos, a 180º. El tiempo depende del horno, por eso antes de sacarlo comprobamos que está hecho, pinchándolo con una aguja y si sale limpia, ya está hecho.


lunes, 28 de agosto de 2017

TORTILLA DE PATATAS LIGHT EN MICROONDAS, MUY RICA

Si hay un plato que gusta en casa, es la tortilla de patatas. El único inconveniente que tiene, es la cantidad de calorías que tiene; por eso, hasta hoy, era un plato que se hacía con suerte, una vez al mes. Cuidar la salud, es de obligado cumplimiento.

Hete aquí la solución, una tortilla de patatas con un mínimo de calorías para poder tomarla con tranquilidad.

No tiene demasiados secretos, es súper fácil de hacer, rapidita y muy, muy rica, sobre todo para aquellos que, como a mi, no les gusta la grasa o quieren comer sano.

Ingredientes

(plato único con una ensalada para tres personas)

3 patatas de buen tamaño
1 cebolla grandecita (nos gusta que sepa a cebolla)
6 huevos
3 cucharadas de aceite de oliva virgen
Sal.

Elaboración

Pelamos y cortamos las patatas en rodajitas finas y reservamos en un escurridor.

Troceamos la cebolla en brunoise, y la ponemos en un bol apto para microondas, hondo y amplio, con las 3 cucharas de aceite. Tapamos y ponemos 4 minutos a máxima potencia.

Cuando saquemos la cebolla del microondas, -siempre con cuidado de no quemarnos- , comprobamos que está bien pochadita y ponemos encima las patatas. Mezclamos bien las patatas con la cebolla, tapamos y volvemos a llevar al microondas, esta vez, durante 9 minutos.

Sacamos del microondas, volvemos a mezclar bien las patatas para que se hagan todas por igual, y ponemos otra vez tapadas, 9 minutos al microondas.

Sacamos el bol del microondas, con ayuda de una espátula machacamos un poco las patatas comprobando que estén bien hechas, las salamos y ponemos 4 minutos más al microondas.

Ya están listas las patatas y la cebolla.

En una sartén antiadherente, ponemos unas gotas de aceite, sólo la suficiente para que no se pegue (la ponemos, damos una vuelta con el aceite por toda la sartén y escurrimos la sobrante. Recordad que el objetivo es hacer una tortilla que tenga la mínima cantidad de grasa y esté rica).

La cuajamos de la forma tradicional y al gusto. A mi me gusta que esté al punto, es decir, que no quede tiesa, que se perciba el huevo, pero que no escurra como si estuviera cruda. Jugosa, pero al punto.

La podéis acompañar de una ensalada y tendréis una cena o una comida completa y sana.

El tiempo de cada paso en el microondas, dependerá siempre de dos cosas:
La potencia de vuestro microondas

La cantidad de patata que pongáis y como la cortáis. Tendréis que observar y ver como van de hechas las patatas en cada paso para aumentar o disminuir en el siguiente.

Naturalmente, también se puede hacer sin cebolla, o añadiendo cualquier otro ingrediente y así podremos hacer una tortilla paisana, o cualquier otra modalidad que nos guste de las que llevan patata.

martes, 22 de agosto de 2017

EMPANADA DE BACALAO Y PASAS


Ingredientes
Para la masa

100 ml de leche
100 ml de vino blanco
130 ml de aceite de oliva
1 cucharadita de sal
2 huevos batidos
3 sobres de levadura seca de panadería (la mía de maicena que tiene 5 gr.)
650 gramos de harina aproximadamente.

Ingredientes para el relleno

500 gr de masa de empanada aproximadamente Aquí
2 cebollas (las mías pesaban alrededor de 400 gr cada una)
1/2 k. de bacalao desalado
1 vaso de vino blanco
100 ml. de aceite de oliva virgen extra
1 cucharada de azafrán o colorante alimentario
Sal (al gusto)
1 huevo
120 g de pasas sultanas

Elaboración

Ponemos el bacalao a remojo durante 30 horas aproximadamente, dependiendo del grosor del bacalao, para quitarle la sal. Pasado este tiempo lo secamos y desmigamos.

Introducimos en una sartén 4 o 5 cucharadas de aceite y cuando esté caliente echamos las cebollas cortadas en brunoise. Las pochamos a fuego medio hasta que queden doradas y blanditas. Cuando el sofrito este bien blandito añadimos el bacalao desmigado. Pasamos el bacalao hasta que cambie de color y añadimos el vino blanco y una cucharada de colorante o azafrán. Añadimos las uvas pasas y dejamos que se cocine durante otros 15 minutos hasta que reduzca líquido pero que quede con caldo para que la empanada quede jugosa. Dejamos enfriar.

Rectificamos con sal. Lo más seguro es que no haga falta, pero probadlo bien por si al desalar el bacalao nos hemos pasado con el tiempo.

Dejamos que enfríe y apartamos el aceite o líquido sobrante en un vaso. Es importante quitar el exceso de aceite para que el relleno quede jugoso y a la vez para emplearlo en la preparación de la masa, tal como explico más adelante(a mi no me sobró más que lo justo).

Cómo montar la empanada

Dividimos la masa en dos partes similares. Las amasamos otra vez en dos bolas de masa para poder trabajar bien con ellas.

Enharinamos la encimera y estiramos la masa con el rodillo. Hacemos la base que tendrá el tamaño de la bandeja de horno que en mi caso es rectangular. La estiraremos lo más fina posible con ayuda del rodillo. Ponemos sobre la bandeja un trozo de papel para horno y encima la base cortando el sobrante si se necesitara.

Añadimos el relleno bien escurrido de aceite y lo estiramos por toda la base. Es muy importante que el relleno este frío para que la masa aguante bien.

Tapamos con la otra mitad bien estirada y la sellamos por los bordes trenzando la parte inferior sobre la superior con la ayuda de un tenedor. Si nos apetece la decoramos un poco.

Hacemos unos agujeros para que respire la empanada y con un tenedor pinchamos por distintas zonas, así no se hinchará.

Pintamos la empanada con ayuda de una brocha de cocinar y huevo batido.

Precalentamos durante 5 minutos el horno a 180ºC y luego metemos la empanada a la misma temperatura, primero en la parte de abajo del horno (unos 20 minutos) y luego otros 30 minutos por arriba y por abajo.

Está buena templada aunque en casa, la suelo hacer de un día para otro.

HUEVOS AL PLATO



Un plato socorrido y fácil donde los haya, perfectos para una cena rapidita. Los ingredientes son tan básicos que están en casi todos los frigoríficos. Están hechos en cazuelitas individuales

Ingredientes (para 3 personas)

1 tarro de tomate frito casero
1 bote de guisantes pequeño
Unas rodajitas de chorizo (se puede añadir también jamón en tacos)
3 huevos

Elaboración

Ponéis un poco de tomate frito sobre cada una de las cazuelitas, le colocáis  encima tres rodajitas de chorizo, (unos taquitos de jamón si queréis), y un puñadito de guisantes.

Colocáis encima la clara del huevo (reserváis la yema) y los metéis al horno a 200º.

En total tienen que estar, más o menos, 10 minutos, no obstante, cuando veáis que está a medio cuajar la clara, que sólo queda la parte central sin cuajar, abrís la puerta del horno, acercáis con precaución la rejilla hacia vosotros para no quemaros, y colocáis en cada cazuelita, la correspondiente yema. En cuanto veáis que la yema forma una película blanca por encima, los sacáis y a la mesa. Así la yema quedará blandita y la clara bien hecha. Rapidito y rico.

lunes, 21 de agosto de 2017

BIZCOCHO DE TURRÓN EN THERMOMIX Y TRADICIONAL

Ingredientes

5 huevos
200 g de azúcar
300 g de nata para montar pero sin montar
150 g de turrón de Jijona
270 g de harina de repostería
1 sobre de levadura de repostería (Royal)
Una pizca de sal

Elaboración en thermomix

Precalentamos el horno a 170ºC, calor arriba y abajo.
Preparamos el molde untándolo con un spray antiadherente
Separamos las claras de las yemas y las reservamos.
Ponemos la mariposa en el vaso. Echamos las yemas y el azúcar, y programamos 5 minutos a velocidad 3.
Retiramos la mariposa y añadimos la nata sin montar programando 10 segundos a velocidad 3.
Incorporamos el turrón desmigado y programamos otra vez 10 segundos a velocidad 3.
Agregamos la harina y la levadura en el vaso. Cerramos y programamos 10 segundos a velocidad 3.
Terminamos de mezclar con la espátula y sacamos a un cuenco bien amplio, para poder hacer bien la última mezcla.
Lavamos bien el vaso y la mariposa y los secamos. Ponemos la mariposa y añadimos las claras y una pizca de sal y ponemos la thermomix a velocidad 3 y ½ dejándolas hasta que estén bien montadas.
Recogemos bien las claras montadas con una espátula y las incorporamos de dos veces a la masa que hicimos anteriormente, con suavidad y con movimientos envolventes. Hay que hacerlo con suavidad, pero con firmeza, porque queda una masa muy espesa.
Colocamos la masa en el molde. Observareis que como la masa es muy espesa queda muy irregular, no preocuparos, al meterla en el horno se iguala. De todas formas, si lo preferís, podéis darle un par de golpecitos al molde contra la encimera para que se alise algo. (No lo hice y quedó perfecto)
Metemos en el horno sobre una rejilla a altura media. Horneamos durante unos 50/52 minutos en total (recodar que el tiempo es siempre aproximado, porque depende mucho del horno).
De hecho la receta por la que me he guiado indica 45 minutos, pero yo añadí 7 minutos más. Los primeros 35 minutos a 170ºC y los últimos 17 minutos a 160ºC.
Sacamos del horno. Muchas recetas indican que una vez pasados diez minutos fuera del horno, se desmolden los bizcochos. Yo siempre espero que el molde atempere. En esta ocasión concretamente he utilizado un molde de Nordic Ware que tardan en enfriar, ya veis como quedó.

Elaboración Tradicional

Precalentamos el horno a 170ºC, calor arriba y abajo.
Preparamos el molde untándolo con un spray antiadherente
Separamos las claras de las yemas y las reservamos.
Ponemos el azúcar y las yemas en un cuenco. Con una batidora de varillas batimos durante unos 5 minutos, hasta que veamos que la masa blanquea, como cuando preparamos para unas natillas.
Añadimos la nata sin montar y mezclamos de nuevo.
Desmenuzamos bien el turrón y añádeselo a la mezcla anterior. Mezclamos bien.
Incorpora la harina mezclada con la levadura y tamizada y vamos añadiendo a la masa ayudándonos de unas varillas, pero sin batir demasiado.
Ponemos las claras en un cuenco con una pizca de sal y las montamos a punto de nieve bien firme. Una vez montadas las incorporamos de dos veces a la masa principal, removiendo con una espátula cada vez con movimientos envolventes, pero con firmeza porque la mezcla es muy espesa.
Colocamos la masa en el molde con el antiadherente. Yo no lo hice y salió perfecto, pero si os da miedo porque la masa queda muy espesa y quedan montecitos, podéis darle un par de golpecitos al molde contra la encimera. Como he dicho, yo no lo hice y en cuanto empezó a cocer se puso la masa lisa.
Metemos en el horno sobre una rejilla a altura media. Horneamos durante unos 50/52 minutos en total (recodar que el tiempo es siempre aproximado, porque depende mucho del horno).
De hecho la receta por la que me he guiado indica 45 minutos, pero yo añadí 7 minutos más. Los primeros 35 minutos a 170ºC y los últimos 17 minutos a 160ºC.
Sacamos del horno. Muchas recetas indican que una vez pasados diez minutos fuera del horno, se desmolden los bizcochos. Yo siempre espero que el molde atempere. En esta ocasión concretamente he utilizado un molde de Nordic Ware que tardan en enfriar, ya veis como quedó.

Qué decir, el bizcocho es una auténtica bomba de calorías, nata, turrón, azúcar, así que, tendréis que tomar porciones más pequeñas, pero es sencillamente delicioso. La próxima vez que lo haga probaré con leche evaporada. Si no pierde, la siguiente con leche entera, así lograré reducir calorías de forma considerable, no creo que pierda demasiado.

domingo, 20 de agosto de 2017

ARROZ CON VERDURAS Y COSTILLA ADOBADA



Ingredientes

1/2 kg de costilla de cerdo adobada
250 gr de judías verdes
150 gr de guisantes
2 zanahorias
1/2 docena de alcachofas en conserva
1 pimiento rojo pequeño
1/2 cebolla cortada en brunoise
2 ajos
un ramillete de perejil
1 hoja de laurel
aceite de oliva
Sal
arroz (yo calculo a 1 taza de café por persona).

Elaboración

En una paellera, ponemos el aceite (no pongo medida porque siempre utilizo muy poca grasa, incluso cuando se trata de aceite de oliva) y cuando empieza a calentar ponemos la cebolla y los pimientos cortados pequeños, dejamos que se pochen bien.

Añadimos la costilla, para que se fría.

Cuando veamos que la costilla ha perdido su color rosado, añadimos el resto de las verduras y removemos para que todas se hagan por igual .

Hacemos un majado con el ajo y el perejil, y lo disolvemos en agua caliente antes del volcarlo sobre el resto de los ingredientes; (con agua caliente para no interrumpir la cocción de las verduras y la carne). Añadimos más agua caliente para que se hagan bien las verduras y la carne.

Pasado un rato, comprobamos pinchando con un tenedor que la carne y las verduras estén bien hechas. Probamos un poco del caldo para rectificar si fuera necesario el punto de sal. Medimos el caldo en lo posible (no lo suelo hacer, hago muchas veces arroz y siempre lo hago a bulto).

Lo habitual es que, cuando se hace un arroz, se pongan 2 medidas de agua por una de arroz; pero a mi me gusta que se haga a fuego más bien rápido por lo que pongo 3 medidas de agua por una de arroz y la dejo cocer 15 minutos. Ya digo que no suelo medirla porque hago mucha arroz, y tengo la medida tomada. Sólo lo hago cuando aumenta el número de comensales, porque entonces, si que me resulta difícil calcularlo.

Suelo acompañar la arroz de una ensalada, pero en este caso como tiene muchas verduras, no lo hago


sábado, 19 de agosto de 2017

PIZZA MARINERA


Ingredientes para la masa

200 g agua
50 g aceite de oliva virgen extra
20 g levadura prensada fresca, (de panadería) o 1 sobre levadura, de panadería deshidratada
400 g harina, (preferiblemente de fuerza)
1 cucharadita sal

Elaboración

Ponemos en el vaso el agua y el aceite y programamos 30 segundos, 37º, velocidad 1.
Añadimos la levadura y mezclamos durante 5 segundos, velocidad 4.
A continuación, incorporamos la harina y la sal.
Programamos 1 minuto, vaso cerrado, velocidad Espiga.
Retiramos la masa del vaso, la introducimos en una bolsa de plástico y dejamos reposar hasta que doble su volumen (un mínimo de 30 minutos, dependiendo de la temperatura, yo la he tenido más).
Precalentamos el horno a 250º.
Colocamos la masa en una bandeja para pizza (puede servir cualquier bandeja de horno) engrasada con aceite y extendemos la masa con las manos aceitadas o con un rodillo, hasta obtener el tamaño que necesitamos.

Ingredientes para la pizza

1 tarro de tomate frito
1 sobre de 4 quesos rallados
1 sobre de salmón ahumado
1 lata pequeñita (la más pequeña que encontréis) de atún.
1 gambas peladas

Ponemos los ingredientes y la colocamos dentro del horno, bajando la temperatura a 225º. Horneamos durante 20 minutos aproximadamente.

Nota:

Si utilizamos levadura de panadería deshidratada, la incorporamos junto con la harina.
Con estas cantidades, sale una pizza grande.






jueves, 17 de agosto de 2017

EMPANADA DE PULPO


Ingredientes
Para la masa


100 ml de leche
100 ml de vino blanco
130 ml de aceite de oliva
1 cucharadita de sal
2 huevos batidos
3 sobres de levadura seca de panadería (la mía de maicena que tiene 5 gr.)

650 gramos de harina aproximadamente.

Para el relleno
350 gramos de pulpo cocido, (2 patas hermosas)
2 cebollas
2 pimientos verdes
1diente de ajo grandecito
1 lata de pimientos del piquillo (cambié por pimientos asados de los que hago en conserva, y puse una cantidad semejante a lo que sería una lata de piquillos)
2 huevos duros
½ cucharada de pimentón dulce
Sal
Aceite de oliva.

Elaboración

Lo primero que tenemos que hacer es el relleno ya que tiene que estar frío cuando lo vayamos a utilizar para rellenar la empanada.

Para ello, cortamos las cebollas y los pimientos verdes en brunoise (la receta que yo he visto dice que en rajitas finas, pero yo tengo en casa gente a la que no le gusta encontrar tropezones de las verduras grandes)

Pelamos y picamos el ajo muy menudito. Ponemos una sartén al fuego con aceite suficiente y cuando esté caliente, comenzamos a pochar todo, hasta que todo esté bien blandito.

Añadimos el pimiento asado cortado en trozos pequeños.

Cortamos el pulpo y los huevos duros a trocitos, los agregaremos a la sartén junto a una cucharada de pimentón, lo salamos, removemos y lo dejamos cocer durante unos minutos más para que todos los sabores se unan. Retiramos y reservamos hasta que se enfríe.

Hacemos la masa mezclando la harina, la levadura, la leche y el vino (que habremos calentado ligeramente), el aceite, 1 huevo batido y 1 cucharadita de sal.

Mezclamos todo y amasamos, hasta que nos quede una pasta fina y elástica, unos 15 o 20 minutos.

Dejamos la masa en un bol, la cubrimos con papel film hasta que doble su volumen, unos 45 o 60 minutos aproximadamente. Tened en cuenta que si estamos en verano, la masa sube antes y puede ser que no necesitemos tanta levadura, de hecho, yo he puesto justamente la mitad de la que indicaba la receta, y ha subido como la espuma.

Precalentamos el horno a unos 180ºC.

Dividimos la masa en dos, la estiramos con un rodillo y una de las partes la utilizamos para cubrir el fondo de una fuente, que habremos engrasado previamente. La otra parte la utilizamos para cubrirla

A mí me apetecía hacerla redonda, y he utilizado la bandeja que tengo para hacer pizzas que como sabéis tiene unos agujeritos pequeños, poniendo por debajo un papel de hornear. De hecho, creo que así cuece mejor la parte inferior, que, en todas las empanadas tiende a quedarse algo húmeda por el peso del relleno.

Ponemos por encima el relleno de pulpo que teníamos reservado y la otra mitad de la masa también estirada con el rodillo, para cubrirlo todo.

Unimos la base con la tapa, haciendo unos pequeños dobleces y pellizcando los bordes.

Si nos ha sobrado algo de masa la podemos utilizar para hacer tiras y adornar la empanada, y para terminar hacemos un agujero del tamaño de una moneda de 5 céntimos en la parte central de la tapa, o bien, 4 agujeritos más pequeños como hice yo y la pintamos con huevo batido. Lo metemos en el horno hasta que la masa este cocida y doradita. Tarda unos 45 minutos.

Dejo fotos del paso a paso que termina con un corte para que veáis el aspecto tan apetitoso que tiene.






                                                                                                                                                                        


miércoles, 16 de agosto de 2017

CANELONES DE CARNE ASADA


Es obvio que este blog, sólo trata de poner recetas que se utilizan en una cocina familiar, y que no tiene otra ambición que la que servir de guía a la familia que me sigue, o a otras amas de casa que buscan en la red, elaboraciones sencillas en las que a la facilidad de la elaboración, se une el buen hábito de la economía doméstica.

No es este el primer plato en el que utilizo restos de comida de otro día, para aprovecharla. Hoy, vamos a tratar de aprovechar parte de los restos de un redondo asado con salsa de zanahoria (otro día pondré ésta receta), de una comida de 20 comensales en la que me fue imposible calcular bien. Con estos ingredientes hice los canelones que pongo y elaboré una lasaña que fue al congelador,  y aún me quedó carne para transformarla en una mousaka, que haré un día de éstos.

Ingredientes

15 placas para canelones
10 placas para lasaña
Restos de carne asada
La salsa de zanahoria de la carne asada
1 pedazo pequeño de jamón serrano
Unas cucharadas de salsa de tomate (casera)
2 huevos cocidos
½ tarrina de paté a la pimienta pequeña (Mercadona)

Para la bechamel

3 cucharadas soperas de aceite de oliva virgen extra
30 gr de cebolla
70 gr de harina
600 ml de leche entera o desnatada, al gusto
Sal al gusto
Pimienta al gusto
Nuez moscada al gusto.

Elaboración del relleno.

Podéis utilizar placas de pasta, de las que vienen precocinadas, (Utilizo las de la marca El Pavo), son bastante ricas, y os ahorraréis unos minutos, simplemente seguid los pasos que os indica el envase.
Si por el contrario, no  tenéis en casa de estas y en cambio de las que hay que cocer, poned una cazuela al fuego con agua abundante y un chorrito de aceite, no dejéis que hierva, sólo que este bien caliente. Ponemos dentro las placas de los canelones y removemos para que no se peguen entre sí. Tapamos la cazuela y dejamos unos 20 minutos removiendo con cuidado de vez en cuando.

Cuando haya pasado el tiempo, las sacamos con ayuda de una espumadera para que no se rompan y las ponemos encima de un paño limpio o en la mesa de trabajo un poco engrasada y separadas entre sí. (prefiero el paño, porque así escurren bien)

Si no tenemos thermomix, picamos la carne, el jamón y el huevo en una picadora, siempre mejor por separado porque cada ingrediente necesita un tiempo. Hacemos la mezcla con el resto de los ingredientes y reservamos.

Si lo hacéis en la thermomix, troceáis primero el jamón y lo trituráis, reservarlo.

A continuación ponéis en la thermomix, la carne asada en trozos pequeños, retirando todos los restos de grasa o gelatina que tenga, y le dais unos golpes de turbo (2 ó 3). No deis más, porque se convertiría en puré.

Añadís el huevo duro, el paté, y el jamón picado, con un poco de la salsa de zanahoria de la carne asada y unas cucharadas de salsa de tomate. No os indico cantidades porque en mi caso, la carne quedó demasiado seca y fui añadiendo hasta encontrar el punto que me permitía manejar la masa para el relleno tanto de los canelones como de la lasaña.

En una fuente apta para horno, untamos la base con unas cucharadas de salsa de tomate, pero sólo la necesaria para evitar que luego se nos peguen los canelones.

Procedemos a rellenar los canelones cogiendo una placa de canelón y poniendo en el centro una cucharada del relleno, enrollamos y los vamos colocando en la fuente de forma ordenada. Yo hice 15, pero sobraron 3. Éramos tres personas y lo acompañé de una ensalada, fue más que suficiente.

Los cubrimos con una bechamel ligera (la elaboración al final de la receta) para que el plato resulte más “digerible”, los cubrimos de queso rallado y ponemos al horno con el gratinador a 250º, unos minutos. Vigilad para que no se quemen.

Para la lasaña, puse la misma base de tomate y utilicé el siguiente orden: una capa de placas, la mezcla de la carne picada, unas rodajas de calabacín cortadas muy finas y hechas en la Varoma al vapor durante 7 minutos a temperatura 100, Velocidad 1, una capa de bechamel y repetí otra vez hasta terminar con una capa de bechamel.

La guardé en el congelador en un envase de pírex con tapa hermética cuando ya estaba bien fría y así, tengo resuelta la comida para otra ocasión. Si hacéis la lasaña y la congeláis, sacadla del congelador la noche anterior y unos minutos antes de la comida, la destapáis, le ponéis el queso rallado y dejáis gratinar en el horno. Queda como recién hecha.

Elaboración de la bechamel

Ponemos el aceite y la cebolla en el vaso y programamos 3 minutos, temperatura Varoma, velocidad 3 y medio. (Yo troceo la cebolla para que no se note).

Añadimos la harina y rehogamos 1 minuto, 100º, velocidad 2 y medio.

Incorporamos el resto de los ingredientes y mezclamos 10 segundos en velocidad 6.

Programamos 7 minutos, Varoma, velocidad 4

Para mi gusto, siempre que se elaboran platos de pasta con bechamel, tanto la pimienta como la nuez moscada, son imprescindibles. Sin excederse, le dan un toque especial que hace el plato muy sabroso.

Servir calentito.


lunes, 14 de agosto de 2017

TEMPURA DE BERENJENAS CON MIEL DE CAÑA


Volvemos a lo de todos los años por ésta época. De pronto en el huerto tienes de todo. Salen a un tiempo los calabacines, la zanahoria, la calabaza, la judía verde, la coliflor, el tomate y las berenjenas. Normalmente, suelo congelar la verdura para tener todo el invierno cubiertas las necesidades porque es verdura absolutamente natural y por tanto, con más sabor, aunque reconozco que cuando más rica está, es recién recogida de la planta. Cada año, incorporo alguna manera de cocinarla que sea una novedad para que no nos canse. Por ejemplo la berenjena, la suelo hacer rebozada, rellena, a la plancha o en musaka y cuando ya estamos cansados, como no me gusta congelada, hago pisto para conserva. Se trata de aprovechar todo lo que la naturaleza nos brinda, sin que nada se estropee.

Ingredientes

3 berenjenas de tamaño mediano
6 cucharadas soperas, colmadas, de harina de tempura (Mercadona)
300 ml de agua helada
sal
Miel de caña(Mercadona)
Aceite de oliva para freír

Elaboración

Cortamos la berenjena en bastoncillos del tamaño de una patata frita aproximadamente (centímetro y medio de grosor) y metemos en agua con sal, al menos una hora, para que suden y pierdan el amargor.

El secreto de la tempura es que el agua esté helada, de este modo queda el rebozado muy crujiente. Así que ponemos en un bol o plato la harina con la sal y le añadimos el agua, y batimos hasta que esté todo bien ligado.

Para mantener la tempura fría mientras las hacía, metí el cuenco en que preparé la tempura en otro más grande y lo rodeé con bolsas de cubitos de hielo.

Escurrimos bien las berenjenas, pasamos por papel absorbente para quitar los restos de agua, y pasamos por la tempura.

Freímos en abundante aceite en la freidora a 180º, que es la temperatura máxima de mi freidora, pero supongo que se pueden hacer perfectamente en una sartén, aunque tardaréis un poco más en hacerlas.

Sacamos cuando empiecen a tomar color, y colocamos sobre papel absorbente de nuevo, para evitar el exceso de aceite y una vez escurridas vamos emplatando por capas: ponemos el fondo y le echamos un poco de miel por encima.

Ponemos otra capa y volvemos a echar miel. De este modo todos los trozos llevarán algo de miel, si la echamos al final, las de arriba tendrán toda la miel y las de abajo quedarán secas.

La mejor forma de poner la miel de caña sobre las berenjenas es introduciendo en el tarro de la miel un tenedor y dejar que la miel escurra, hasta que veamos que sólo cae un hilito fino, que es justo cuando la pondremos sobre las berenjenas. Son berenjenas en tempura, con miel (no, en miel)

Finalizamos con la miel

Nota.

Para quien no conozca la miel de caña, diré que es más líquida y menos dulce que la miel de abejas. Tiene una textura parecida e incluso el color de la salsa de soja. No creo que la miel de abejas sirviera para este fin.

La tempura sirve para hacer bastoncillos de zanahoria, calabaza, calabacín, pimientos, etc.

En casa unos la tomaron con miel y otros sin ella, de cualquier forma está muy rica. Yo la puse como un primer plato, pero os puede servir como parte de un entrante de picoteo.

Éste plato es sin miel