sábado, 31 de diciembre de 2016

TARTA TATIN


Esta es una tarta perfecta para los amantes de las tartas de frutas, de todas las tartas es mi predilecta, nunca resisto la tentación y tomo un trozo aunque no debería hacerlo. Simplemente el día que la tomo, lo hago con precaución y suprimo otros alimentos que se transformen en azúcar, así voy consiguiendo mantener mis niveles de glucosa. No he probado nunca a sustituir el azúcar por stevia o natreen, simplemente tomo menos de lo que me gustaría, pero me doy el lujo de comer algo rico. Mi médico dice que un día no pasa nada y que jamás debemos sustituir los postres hechos en casa por los preparados para diabéticos que hay en el mercado.

Ingredientes:
Para la masa


50 gr. almendra cruda
100 gr. harina todo uso
75 gr. mantequilla fría
75 gr. azúcar glas
1 yema
1/2 cta. vainilla
1/2 cta. sal

Para el relleno

7 manzanas Golden, las mías pesaban 1,700 kg
160 gr. Azúcar
50 gr. mantequilla
Una pizca de canela
el zumo de un limón y medio

Sobre la receta base, que llevaba ralladura de un limón y el zumo de medio, sustituí todo por zumo de limón y medio que utilicé para ir rociando las manzanas a medida que las iba pelando para evitar que se oxidaran, para que no estuviera la manzana ácida añadí 2 cucharadas soperas más de azúcar al momento de hacerlas.

Elaboración de la masa en thermomix

Colocamos el azúcar, en la thermomix y la molemos durante unos segundos a velocidad progresiva, 5,7,9. Reservamos.

Moler la almendra, 10 seg. vel.10. Despegar del fondo un poco. Yo me ahorré ese paso puesto que puse almendra molida
Añadimos la harina, la mantequilla, el azúcar glas, la yema, la vainilla y la sal, 10 seg. vel.6. Formar una bola, envolver en papel film y dejar reposar en la nevera.

Como podréis observar, en este caso, la thermomix sólo acorta los tiempos pero teniendo azúcar glas en casa (Mercadona) y la almendra molida, la podéis hacer perfectamente sin necesidad de la maquinita y estará igual de buena.

Elaboración del relleno

Pelar y cortar las manzanas en cuartos, las colocamos en una sartén (yo las puse en un wok porque es más espacioso y a la hora de moverlas no se destrozan), junto al azúcar, la mantequilla, la canela, y el zumo de limón y cocemos a fuego suave 15-20 minutos, removiendo con cuidado varias veces con una espátula. Cuando las manzanas ya están blanditas, subir el fuego y dorar hasta conseguir un color caramelo, las mías quedaron pálidas y sólo tomaron color al hacer la tarta en el horno.
Engrasamos un molde Pírex con mantequilla abundante, y vamos colocando las manzanas ya hechas con el lado curvo hacia abajo apretándolas entre si.

Precalentamos el horno a 180º.

Sobre un papel de hornear, espolvorear harina y estirar la masa dándole la forma del molde, pasando suavemente el rodillo, no hace falta que quede perfecta, se parchea y listo.

Llevar la masa con el papel y la colocamos sobre las manzanas para despegar suavemente la masa sobre las manzanas (al dar la vuelta y levantar el papel y se irá despegando la masa).

Remetemos los bordes bajándolos con el dedo.
Horneamos 30 minutos, o hasta que la masa comience a dorarse. Desmoldar dando la vuelta como si fuera una tortilla sobre una bandeja, cuando esté templada para no quemaros. Ya sabéis que en caso de esta tarta, debe quedar a la vista la parte de la manzana, como veis en la imagen. Lo bueno de esta tarta es tomarla un poco caliente, pero yo siempre la preparo el día anterior y la saco un poco antes de servirla del frigorífico y está buenísima.

Elaboración tradicional

Únicamente pongo la de la masa de almendra, puesto que el resto de la tarta se hace sin la thermomix

Moler la almendra bien fina con un molinillo o adquirirla ya molida.
Añadir la harina, mantequilla, azúcar glas, yema, vainilla y sal, y mezclar bien.. Formar una bola, envolver en film y llevar a la nevera.


COCHINILLO AL HORNO


Ingredientes para 5 personas

½ cochinillo (éste pesaba 2,600 kg)
Aceite de oliva o manteca de cerdo para pintar el cochinillo
4 hojas de laurel.
3 ajos
1 ramillete de perejil

Elaboración

Debemos pedir al carnicero, que parta el cochinillo por la mitad longitudinalmente. Es la única forma de asarlo perfectamente por el escaso espacio de los hornos caseros. Si tenéis que hacer un cochinillo entero, pedir que os lo corten en cuatro piezas.

Precalentamos el horno a 170 grados con el ventilador. Es fundamental utilizar la función ventilador para hacer este asado, porque abrevia los tiempos de asado. Si tu horno no lo tiene, el asado tardará entre 4 horas y media y 5 en estar terminado.

Yo suelo prepararlo la noche anterior untando, si la tengo, con manteca de cerdo o bien con aceite de oliva, - queda rico igualmente-, y un majado con el ajo, el perejil y la sal para que tome bien los sabores.

Lo unto bien por la parte interior del bicho, y por la piel. Me gusta más hacerlo con manteca porque al ponerlo por la noche en el frigorífico, se mantiene fija tanto sobre la piel como por dentro, y me evito tener que volver a pintarlo al momento de ponerlo en el horno.

Si lo hacéis con aceite poned sobre la piel unas gotas de aceite de oliva y extenderlo bien por todo el cochinillo.
Llenamos la bandeja del horno de agua hasta que cubra 3/4 partes de su capacidad, le añadimos unas hojas de laurel y colocamos en la parte de abajo del horno. Si os gusta podéis ponerle también un poco de tomillo y romero fresco como sustitución del ajo y el perejil, en esta ocasión yo no tenía en casa, pero quedó muy rico.

Colocamos el cochinillo con la piel hacia abajo en la rejilla del horno y ponéis la rejilla en la primera altura que tengáis sobre el agua.

Horneamos el cochinillo en dos fases.

Durante 1 hora y 45 minutos a 170º, con el modo ventilador y calor arriba y abajo. Es importante –insisto- colocar la bandeja en la parte baja del horno.

Siempre debe haber agua en la bandeja. Si vemos que durante el horneado se va evaporando, añadimos un vaso de agua más.
Pasado ese tiempo, sacamos el cochinillo del horno y lo ponemos con la piel hacia arriba, Si observamos que la piel se ha secado demasiado pintamos un poco con aceite de oliva, en mi caso no fue necesario.

No olvidéis que la bandeja siempre debe tener agua .

Subimos la temperatura del horno a 220º.
Volvemos a meter el cochinillo en el horno y lo dejamos durante 45 minutos más o hasta que veas que la piel está dorada y crujiente.

Lo ideal es servir el cochinillo acompañado de unas patatas panaderas, o de una salsa de manzanas. Nosotros lo comimos sólo porque no tuve tiempo de hacer ninguna de las dos cosas y las echamos en falta, aunque debo decir que prácticamente lo terminamos.

Si antes vais a tomar unos entrantes, apagar el horno y dejar el cochinillo dentro para que no pierda calor.
Es importante el tamaño del cochinillo para conseguir un asado perfecto. No debe sobrepasar los 5 kg.
La piel debe quedar crujiente. Estará en su punto cuando al golpearla con un cuchillo, se rompa.

Si no queréis que las patas y la cabeza se os tuesten demasiado, podéis envolverlas en papel de aluminio cuando le dais la vuelta

Si os apetece con salsa de manzana lo haréis así:

1 cebolla
2 manzanas
75 ml. de vino blanco

Con un poco de aceite, sofreímos la cebolla, picada muy finita. Pelamos y cortamos las manzanas en trozos no demasiado pequeños. Cuando la cebolla está dorada, añadimos las manzanas a la sartén. Ponemos un poco de sal. Esperamos que queden blanditas pero no deshechas y, añadimos el vino blanco y un poco de agua. Dejamos que se reduzca la salsa durante unos minutos y ya estará lista. En nuestra casa somos más de patata panadera.

CREMA DE ZANAHORIA Y BROCOLI


Ingredientes para la crema

3 cucharadas soperas de aceite
60 g de cebolla
350 g de brócoli (1 brócoli entero)
150 g de zanahoria pelada
350 g de agua
1 cucharadita de sal
1 pizca de pimienta molida
Picatostes tostados o fritos

Elaboración

Ponemos el aceite y la cebolla pelada y cortada en cuartos en el vaso. Programamos 3 segundos, velocidad 4.

Con la espátula bajamos los restos y programamos 4 minutos, temperatura 100 ºC, velocidad 1.

Añadimos las verduras bien lavadas y cortadas en trozos junto con el agua, la sal y la pimienta. Programamos 25 minutos, temperatura 100 ºC, velocidad 1.

En mi caso he utilizado verduras congeladas de nuestro huerto. No he variado en nada la receta, salvo que he dejado la verdura fuera del congelador mientras preparaba el resto de los ingredientes y la he incorporado después de freír la cebolla. He añadido 5 minutos más a la cocción y ha quedado perfecta.

Cuando terminamos, trituramos 10 segundos, velocidad progresiva 5-10, o bien hasta que hayamos logrado la textura que nos gusta. Si vemos que nos ha quedado demasiado espesa, añadimos agua y volvemos a mezclar a velocidad 10, probamos y dejamos reposar un rato para que esté a buena temperatura para comer y el agua añadida, no haga que pierda sabor la crema.

Sirve con picatostes. En esta ocasión los he puesto fritos bien escurridos en papel de cocina, pero si queréis restar más calorías está igual de buena con picatostes tostados.

Si además sois de los que les gusta darle un sabor diferente, le podéis añadir al momento de comer un chorrito de aceite de oliva y orégano, aunque yo la prefiero tal cual.

lunes, 19 de diciembre de 2016

BACALAO CON COSTRA

Antes de explicar la elaboración, señalar que tengo perjudicada mi maquina de fotos, y que en las ultimas recetas están hechas con el teléfono, por lo tanto, carecen del color y la calidad que sería deseable.

Ingredientes

Bacalao
Patatas
Pimiento rojo fresco
Cebolla
Mayonesa
Aceite
Sal

Elaboración

Para esta receta he utilizado bacalao seco y como era muy grueso, lo he tenido desalando durante cuatro días en el frigorífico, cambiándole el agua 1 vez al día. La receta se puede hacer también con bacalao fresco, congelado o cualquier otro pescado blanco, con lo que os podéis ahorrar el paso más largo. De todas formas, a nosotros nos gusta este tipo de bacalao y al punto de sal, cada cual ha de encontrar el suyo.

Si elegís el bacalao desalado, es el momento de colocar en un escurridor para que suelte el agua mientras hacemos los primeros pasos del plato.

Precalentar el horno a 250º.

Para empezar la elaboración y dependiendo de los comensales, peláis unas patatas y las cortáis en rodajas no demasiado finas, las saláis y las ponéis a freír en aceite bien caliente (al 9), para que no se llenen de aceite. Una vez que ha empezado la fritura bajáis la temperatura de forma que la patata se haga bien por dentro pero no quede crujiente (al 7), y cuando estén hechas, las vais colocando a capas sobre una fuente que pueda ir al horno, procurando escurrir bien el aceite para que el plato resulte ligero.

Laváis bien el pimiento y lo vais cortando en aros muy finitos. No demasiado pimiento. Yo puse la mitad de un pimiento morrón grande.

Hacéis lo mismo con la cebolla. Puse la mitad de una cebolla mediana. Los freís juntos hasta que estén blanditos pero no dorados y colocáis sobre el lecho de patatas fritas.

Colocáis los trozos del bacalao sobre el conjunto y cubrís con la mayonesa.

Lo metéis al horno y vigiláis porque el tiempo depende del grosor del bacalao. Yo lo tuve 10 minutos, pero era grueso, quedo en su justo punto aunque tuve que poner un papel de aluminio a los cinco minutos para evitar que se quemara la costra. Quedó muy rico y es una forma diferente de comer el bacalao. Os animo a probarlo.