En casa pongo al menos cada 10/15 días legumbre. En invierno suelo poner más veces judías, que en León son excepcionalmente buenas, de la tierra, nada que ver con las importadas allende los mares que tienen una piel mucho más basta y son más harinosas, y que por cierto, también se venden por aquí porque en cuestión de gustos, no hay nada escrito.
Sean las que sean, blancas, pintas, canela, tiricia, verdina, procuro cada vez hacer una receta para darles un toque distinto, que no nos cansen y disfrutar de un plato saludable. Por supuesto, siempre tratando de evitar las grasas en lo posible, porque ricas, ricas, las judías como más ricas están es en una buena fabada, pero eso incluiría morcilla, chorizo y otras grasas que sólo entran excepcionalmente en nuestra cocina. Hoy las he preparado de esta forma y han salido estupendas.
Ingredientes
300 g. de judías pintas
2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
½ puerro, sólo la parte blanca
1 diente de ajo, muy picado
½ tomate rojo, pelado y partido menudito
½ cucharada de pimentón
1 trozo de jamón pequeño
1 hoja de laurel
sal
½ taza de las de café de arroz de grano redondo
Elaboración
La noche anterior, ponemos en remojo las judías pintas, con bastante agua.
Ponemos el aceite de oliva en la olla, y lo calentamos a fuego medio-fuerte.
Añadimos el puerro y los ajos bien picaditos, rehogamos a fuego medio hasta que la cebolla esté pochada.
Incorporamos los dados de tomate y rehogamos durante unos minutos.
Separamos del fuego la olla, y sofreímos el pimentón.
Agregamos las judías pintas, aclaradas y escurridas, el trozo de jamón y la hoja de laurel. Cubrimos con agua hasta que esté un par de dedos por encima de los ingredientes y echamos un poco de sal.
Cuando empiece a hervir, echamos un vaso de agua fría «para asustarlas». Colocamos la tapa de la olla y desde que empieza a salir el vapor (bajamos un poco el fuego) dejamos que se hagan durante 12 minutos. (Hago hincapié en que mi olla rápida es una WMF, y por tanto en cuanto a los tiempos, sigo lo que sus instrucciones indican, lo que quiere decir que cada cual, debe seguir las instrucciones de la suya).
Esperamos a que salga todo el vapor y baje la válvula de seguridad para poder abrir la olla. Probamos para comprobar el punto de sal y si es necesario, añadimos un poco más de sal.
Retiramos la punta de jamón.
Añadimos a la olla el arroz y el jamón desmenuzado. Dejamos que cueza todo, a fuego medio, durante 14 minutos (sin tapar la olla).
Retiramos del fuego, dejamos reposar durante unos minutos y servimos inmediatamente.
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