sábado, 24 de febrero de 2024

JUDIAS VERDES EN OLLA RAPIDA, AL ESTILO DE MI MADRE


Siempre que íbamos a casa de mis padres por el verano, le pedíamos a mi madre que nos hiciera judías verdes porque le salían riquísimas. 

Mi padre, después de jubilarse se compró un huerto y encontró un hobby maravilloso, que le proporcionaba cosas muy importantes, buena salud, aire libre y satisfacción personal. 

Durante todo el verano teníamos las mejores frutas y hortalizas, naturalmente las más ecológicas y frescas. 

En su momento, yo hice lo mismo, salvando las distancias, porque mi padre, tenía una parcela muy grande y yo un huerto de 100 metros, pero eso sólo lo hice unos años, porque requería un esfuerzo que mi salud no me permitía. Ahora tengo dos huertos elevados en los que cultivo algunas lechugas, cebollas, y tomates, pero fundamentalmente fresas. 

Me encanta cuidarlos y mi espalda no se resiente. Por suerte nos siguen regalando verduras y si no es así, las compramos en un vivero que tenemos cerca.

Ya se sabe que las normas de cultivo en España son extremadamente exigentes y que no está permitido el uso indiscriminado tanto de fertilizantes, como de abonos o de sulfatos, con lo cual, son de toda garantía. 

Aviso un rato antes de salir de casa al dueño del vivero, y como me conoce, cuando llego ya me está pelando las judías. Le compro muchas cosas, voy varias veces y siempre me regala otras cosas. El excedente, lo voy guardando en el congelador para el resto del año.

Tienen un sabor totalmente diferente a las que se compran en Madrid.

Y ahora, os cuento como hacía mi madre las judías verdes.

Ella hacía una cocina rica en condimentos pero sin grasas. Por ejemplo, a las judías, les ponía durante la cocción o un trozo de jamón, (digo jamón, no hueso de jamón que nosotros no utilizamos porque desprende mucha grasa), o un trozo de ternera. 

Estaban buenísimas. Yo hoy las hice en olla rápida, y en lugar de ternera, les he puesto un hueso de rodilla que al no tener caña, da sabor pero no suelta grasa.

Ingredientes

1 k de judías verdes congeladas de León
1 par de patatas medianas
Aceite de oliva
1 ajo
1 cucharada de pimentón.

Elaboración

Ponemos agua con sal en la olla rápida, como 3 o cuatro dedos. 

Cuando rompe el hervor, añadimos el hueso y las judías verdes. Incorporamos el par de patatas, escachadas y  antes de cerrar la olla, hacemos un sofrito con los ajos y el pimentón y lo añado. Cerramos la olla y dejamos por 20 minutos a fuego medio bajo. (Ojo, los ajos no deben freírse en exceso, y para evitar que se os queme el pimentón, lo ponéis después de retirar la sartén del sofrito del fuego)

El truco para que las judías queden tan ricas está en que, después de despresurizarse la olla dejemos el guiso dar un hervor a fuego fuerte, de manera que parte del caldo de la cocción se consuma y la patata se desmorone espesando el caldo. 

Probad el punto de sal, y si seguís los pasos que indico, os van a encantar. Están buenísimas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario